GRUPO F | VILLARREAL - YOUNG BOYS
La Champions como terapia
Villarreal y Young Boys miran a octavos de final en plena crisis de juego y de resultados. Emery se aferra a Pedraza y Trigueros.
Quien siga al Villarreal a diario en LaLiga ya se habr¨¢ acostumbrado al tobog¨¢n en el que se ha convertido su temporada. En Mestalla, nueva curva. Aquellos que s¨®lo le hayan visto en Champions, donde el resto de planes pueden esperar, estar¨¢n de enhorabuena: vuelve su mejor versi¨®n tras empatar con el Atalanta, bailar al United sin que el resultado le correspondiera y barrer al Young Boys en Berna. Hoy, el Submarino espera dar un importante paso rumbo a octavos y, ya de paso, espantar los fantasmas que le crecen los fines de semana. Sin Gerard, Danjuma ser¨¢ una vez m¨¢s su clavo ardiendo (sigue el partido en directo en AS.com).
Emery quiere esquivar que se reproduzca y difunda la palabra crisis. Aunque no existe t¨¦rmino m¨¢s preciso para definir al 13? equipo en Espa?a, construido en verano para incordiar a los poderosos. El t¨¦cnico, entre dudas, lesiones y rotaciones, est¨¢ obligado a volver a dar otra vuelta de tuerca a su once en busca de la solidez perdida. En el lateral recuperar¨¢ a Mario, al no tener a Foyth (lesionado) y Aurier (no est¨¢ inscrito). El partido de hace quince d¨ªas en Suiza no debe confundir al personal. El Submarino gole¨®, pero sobrevivi¨® agobiado. Hasta Albiol mostr¨® s¨ªntomas de flaqueza.
El Young Boys tampoco atraviesa por su momento m¨¢s dulce. Su imperiosa necesidad le hace peligroso. A su plaga de achaques hay que sumarle una dura racha: una victoria en los ¨²ltimos cinco encuentros. Empat¨® ante el colista, luego lleg¨® el traspi¨¦s de la Champions, la derrota en Copa frente al Lugano y un nuevo revolc¨®n contra el Saint Gallen. Wagner ha ido dando descansos como ha podido. Hasta hoy, que pondr¨¢ todo su arsenal con Elia a la cabeza. Se juega una final por un futuro en Europa. Y ah¨ª, en ese duelo por sumar proezas internacionales, el Villarreal le aventaja. Pedraza y Trigueros volver¨¢n a portar la bandera de una ilusi¨®n iniciada en Gdansk y que quieren seguir ondeando hasta primavera.
