REAL ZARAGOZA / HISTORIAS DE SEGUNDA (XVIII)
El tercer ascenso del Real Zaragoza (III)
Bajo la presidencia de Abril, el club aragon谷s compr車 y ampli車 Torrero, a?adi車 a su nombre el t赤tulo de Real, fich車 a los mundialistas Gonzalvo II y Hern芍ndez y retorn車 a Primera Divisi車n en 1951 en una promoci車n de infarto resuelta por &goal-average*.
El Real Zaragoza no pudo alcanzar el premio gordo del ascenso directo, pero su segundo puesto le dio el pasaporte para disputar la promoci車n, una segunda oportunidad que no estaba dispuesto a desaprovechar. Con el relevo de Juanito Ruiz por Urquiri en el banquillo, el equipo aragon谷s se jug車 su suerte en un liguilla a doble vuelta junto al Sabadell 每tercero del Grupo I de Segunda Divisi車n-, el Salamanca y el Las Palmas 每segundo y tercero del Grupo II-, y el Murcia y el M芍laga, decimotercero y decimocuarto clasificados de Primera Divisi車n.
El Zaragoza comenz車 el galope, con una goleada al Sabadell en la Cruz Alta (2-4), y se impuso despu谷s a la Uni車n Deportiva Las Palmas en Torrero en la tarde en la que se inaugur車 el segundo tramo de la General y la directiva elev車 las localidades de pie hasta las 15 pesetas: ※?A迆pa el Zaragoza, pero bajen los precios!§, se pudo leer en una de las pancartas m芍s ocurrentes. El equipo aragon谷s sufri車 frente a un adversario 芍spero y bronco, pero acab車 coronando su triunfo por 3-1 con un recordad赤simo &gol del cojo* del defensa Calo, que, en una 谷poca sin sustituciones, se hab赤a roto el peron谷 izquierdo y estaba como figura decorativa en el extremo derecha. ※Me sirvieron el bal車n tan a placer que, superando mi dolor, vi la ocasi車n clara y la aprovech谷§, coment車 el zaguero leon谷s, que fue inmediatamente escayolado y dijo adi車s a la temporada.
Despu谷s de un empate en El Calvario de Salamanca (1-1), el Zaragoza le arrebat車 la primera posici車n al M芍laga en un d赤a de verdadero j迆bilo en Torrero. Quiz芍 en el partido m芍s brillante de su historia hasta entonces, el equipo aragon谷s complet車 una actuaci車n maravillosa y aplast車 por 6-2 a un rival dirigido por el gran Ricardo Zamora y que s車lo hab赤a encajado dos goles en las tres primeras jornadas. El M芍laga, favorito en todos los pron車sticos, sali車 a imponer su te車rica mejor clase y se encontr車 con un Zaragoza plet車rico de f迆tbol y de genio, que, despu谷s de una primera mitad equilibrada, le arras車 literalmente tras el descanso con cinco goles, cuatro de ellos en once minutos de f芍bula, gracias a un juego impetuoso, veloc赤simo y arrollador. El M芍laga digiri車 muy mal la paliza y el duelo acab車 entre malos modos y con una peque?a trifulca entre Hern芍ndez, autor de tres de los seis goles del Zaragoza, y el central visitante Arn芍u. Juanito Ruiz no cab赤a en s赤 de satisfacci車n: ※El Zaragoza ha hecho el mejor partido de su vida. Y lo digo sin exageraciones§. Y para comprobar que lo del entrenador no era una hip谷rbole basta con tomarle prestada la pluma al cronista de &Heraldo de Arag車n* Miguel Gay, que hab赤a tenido la suerte de presenciar la mayor赤a de los partidos del Zaragoza desde su fundaci車n: ※?ste es el mejor partido que le he visto al Zaragoza en su historia. Un partido que nunca se olvidar芍§.
En la 迆ltima jornada de la primera vuelta, el Zaragoza arras車 tambi谷n al Murcia en La Condomina (1-4), en otro encuentro en el que Rosendo Hern芍ndez volvi車 a ser protagonista. El genial pero irascible interior canario no firm車 esta vez ninguno de los goles del Zaragoza, pero, insultado por la grada durante toda la tarde, dedic車 al final al p迆blico gestos despectivos que provocaron una lluvia de sillas al terreno de juego y le ocasionaron una multa de 1.250 pesetas del gobernador civil de Murcia, Crist車bal Graci芍 Mart赤nez, que pagaron dos pe?as del club aragon谷s.
El Real Zaragoza lleg車 al ecuador de la liguilla como l赤der, con un punto de ventaja sobre el M芍laga y tres sobre el Las Palmas, la gran sorpresa de esta promoci車n.
Con otro lleno absoluto en Torrero, el Zaragoza volvi車 a derrotar al Sabadell antes de cosechar su primera derrota de la liguilla en el Insular de Las Palmas de Gran Canaria (2-0), un resultado que le hizo descender a la segunda posici車n, con un punto menos que el l赤der M芍laga.
Pero el equipo de Juanito Ruiz reaccion車 con otra fuerte goleada al Salamanca (5-0) y volvi車 a ponerse primero por mejor cociente que el M芍laga y con un punto m芍s que la Uni車n Deportiva Las Palmas.
Y al estar ya el Murcia, el Sabadell y el Salamanca sin ninguna opci車n se dispararon los rumores sobre la compra de partidos de los tres aspirantes al ascenso, con el Murcia y el Salamanca siempre en el centro de las sospechas.
El Zaragoza era l赤der, pero le quedaba por delante el obst芍culo m芍s dif赤cil: su visita a La Rosaleda en la pen迆ltima jornada. La semana vino cargada de pol谷mica, porque el 芍rbitro navarro Zariquiegui, designado inicialmente para dirigir el encuentro, denunci車 en *El Pensamiento Navarro* su intento de compra por parte de un supuesto emisario del Real Zaragoza. Seg迆n Zariquiegui, 谷ste le ofreci車 en un bar de Pamplona una fuerte suma por la victoria del equipo aragon谷s, la mitad de esa cifra por el empate y otra menor por la derrota por menos de cuatro goles de diferencia. El 芍rbitro puso el caso en manos de la Federaci車n Espa?ola, que opt車 por designar en su lugar al madrile?o Marr車n para el partido de La Rosaleda y abri車 un expediente que al final qued車 en nada por no poderse identificar al &comprador*, al no ser nadie significado del Zaragoza.
Y en este ambiente sobreexcitado se disput車 el M芍laga-Zaragoza, que m芍s que un partido de f迆tbol fue una batalla de nervios contra el reloj por parte de los dos equipos. Todo el encuentro fue un rodar continuo de incidentes violentos, que el 芍rbitro se vio impotente para dominar. El Zaragoza, que no se amilan車 ante las continuas coacciones del M芍laga, perdi車 por 4-2, pero pudo mantener el &goal-average* particular a su favor, lo que resultar赤a decisivo para su ascenso. En los 迆ltimos minutos, Juanito Ruiz fue conducido a la grada por dos polic赤as cuando se levant車 del banquillo para protestar por una brutal patada en la ingle del uruguayo Guti谷rrez a Hern芍ndez, que adem芍s de soportar durante todo el partido un violent赤simo marcaje, fue multado por el gobernador civil de M芍laga, Manuel Garc赤a del Olmo, con 250 pesetas ※por incorrecta actitud hacia el p迆blico§. Esa multa la pagaron los socios del Real Zaragoza por suscripci車n popular de 0,25 pesetas, destin芍ndose el sobrante al culto para la Virgen del Pilar.
Al final, Juanito Ruiz se fue tan indignado como feliz de La Rosaleda: ※Estoy que echo fuego. No merec赤 que me expulsaran del banquillo, porque no me he metido con nadie. Nunca he visto peor p迆blico que el de M芍laga. El partido ha sido una continua caza del hombre, y parece mentira que eso lo hagan profesionales. Todo sali車 tal y como pens芍bamos, porque era muy dif赤cil que el M芍laga nos remontara la ventaja de Torrero. Pero si el M芍laga hubiese jugado al f迆tbol en lugar de dedicarse a dar le?azos, lo m芍s probable es que siguieran en Primera Divisi車n. Pegando patadas no se puede jugar al f迆tbol. Y que no me hablen del partido de Torrero. All赤 no pas車 nada y no hubo una sola violencia. S車lo en el 迆ltimo minuto se registr車 un incidente entre Hern芍ndez y Arn芍u§.
Hern芍ndez, por su parte, tampoco se mordi車 la lengua: ※El M芍laga ha ido m芍s a la pierna que al bal車n. Ha jugado al le?azo, pero no ha podido eliminarnos§.
Tras este resultado y la sospechosa victoria del Las Palmas en Salamanca, se lleg車 a la jornada final con el M芍laga l赤der, seguido a un punto por el Las Palmas y a dos por el Zaragoza. El calendario se cerraba con los decisivos Real Zaragoza-Murcia y Las Palmas-M芍laga. As赤 que para ascender el Zaragoza ten赤a que ganar en Torrero y esperar a que el Las Palmas y el M芍laga no empataran en el Insular. Y todo, porque el &goal-average* particular con el M芍laga le era favorable en caso de empate a puntos, mientras que con el Las Palmas lo ten赤a empatado a expensas del cociente final (la divisi車n de goles a favor por goles en contra).
El partido frente al Murcia se jug車 el 8 de julio de 1951 en medio de un calor achicharrante, con las entradas agotadas desde la v赤spera y m芍s de ocho mil peticiones de localidades sin poder atender.
Aquella tarde se empez車 a celebrar todo demasiado pronto. Una llamada &Comisi車n de Propaganda*, que actuaba al margen de la directiva de Abril, tuvo la descabellada idea de festejar el ascenso por anticipado haciendo desfilar por el c谷sped antes de empezar el encuentro a la banda del Hogar Pignatelli, que toc車 los acordes del nuevo himno del Real Zaragoza 每&Los leones de Torrero*-, lanzando despu谷s una sucesi車n interminable de cohetes. Adem芍s, el nuevo presidente de la Federaci車n Aragonesa de F迆tbol, el ef赤mero Miguel Merino Ezquerro, hizo entrega al club de una bandera del Real Zaragoza que fue izada en los proleg車menos en el gran m芍stil de la General. Y para completar la fiesta previa, el propietario de &Muebles Pall芍s*, en acto de desagravio a Juanito Ruiz por lo que le hab赤a sucedido en M芍laga, decidi車 que el &alifante* no merec赤a sentarse m芍s en un banquillo, sino en un sill車n perfectamente acolchado y tapizado en rojo, y con el escudo del club preciosamente bordado en el respaldo. ※A Juanito Ruiz, nada de banquillo. Un sill車n a perpetuidad§, le dijeron por los altavoces de Torrero mientras posaba para la ocasi車n para los fot車grafos en los minutos previos al decisivo partido.
El Murcia se present車 en Torrero con una extraordinaria prima del M芍laga, pero el Zaragoza, que hab赤a utilizado a discreci車n la palanca del dinero durante toda la temporada, ni se plante車 inicialmente intentar comprar el partido, porque nadie dudaba de la victoria. Pero el equipo aragon谷s se las vio y se las deseo en un encuentro de una angustia infinita y de una emoci車n tremenda. Un Zaragoza desconocido, lento y nervioso, se adelant車 muy pronto en el marcador, al empalmar Zubeld赤a un pase del h迆ngaro Hrotk車, pero no logr車 imponerse a un Murcia sereno, r芍pido y valiente, que tuvo en el extremo derecho Tito una amenaza constante para el portero Higinio, al descoser continuamente por su banda a Pica II. Periche empat車 para el equipo pimentonero al cuarto de hora, al rematar precisamente una falta por una mano innecesaria de Pica II, y Del Toro sembr車 de p芍nico Torrero al estrellar un disparo en el larguero en el minuto 37.
Al descanso se lleg車 con el inquietante empate a un gol y el presidente Abril no tuvo m芍s remedio que acudir al vestuario visitante para proponerle un pacto al Murcia a trav谷s de Guillermo Calero, primo hermano del ex presidente de la Federaci車n Espa?ola y miembro del comit谷 ejecutivo de la FIFA, Armando Mu?oz Calero, que hab赤a venido con la expedici車n murcianista. El pacto consisti車 en una prima de 15.000 pesetas por jugador, camuflada dentro del fichaje del interior Alc芍zar por 250.000 pesetas, y el puesto de secretario general del club aragon谷s al propio Guillermo Calero, muy relacionado con los altos mandos federativos espa?oles. Se alcanz車 un acuerdo de altas instancias, pero no todos los jugadores del Murcia lo respetaron. En la segunda mitad el Zaragoza pas車 a dominar la situaci車n, pero a los 58 minutos precisamente Alc芍zar adelant車 de falta directa a los visitantes y provoc車 un furibundo di芍logo entre banquillos, del que se percat車 hasta el p迆blico. Antes de un cuarto de hora, el medio Juanete enmend車 la situaci車n con un espectacular blocaje en el 芍rea, a dos manos y por encima de la cabeza, a centro de Gonzalvo II. Penalti y... expulsi車n, porque Carre?o protest車 primero e insult車 gravemente despu谷s a Hern芍ndez. ?ste no desaprovech車 el m芍ximo castigo, pero al Zaragoza, que no supo jugar nunca el partido, le hac赤a falta un nuevo gol. ?ste lleg車 en el minuto 78, al concluir Noguera una internada, tras pase de Hrotk車 en una jugada que naci車 en el capit芍n Jugo.
El desenlace final del partido provoc車 desigual reacci車n entre los jugadores del Murcia. As赤, el portero G車mez, cu?ado del zaragocista Ech芍niz, fue insultado por algunos compa?eros y directivos, mientras Carre?o y Juanete recibieron varios empujones y alg迆n pu?etazo.
A la desesperada, el Zaragoza hab赤a hecho sus deberes, pero le quedaba por delante una angustiosa espera hasta conocer el desenlace del partido Las Palmas-M芍laga, que se sab赤a hab赤a llegado al descanso con empate a cero. Veinte minutos estuvo Torrero en silencio hasta que lleg車 la esperada conferencia telef車nica desde Canarias: el M芍laga hab赤a perdido 4-1 y el Zaragoza estaba de nuevo en Primera Divisi車n. Juanito Ruiz ascend赤a esta vez al equipo como entrenador: ※?ste es mi tercer ascenso a Primera. Sub赤 en 1936 y 1942 como jugador y ahora lo hago como entrenador. Qu谷 m芍s puedo pedir#§.
Se desat車 la apoteosis, la afici車n se ech車 al campo y una marea humana acompa?車 al Zaragoza en el &Pirata Azul*, su autob迆s, hasta la Bas赤lica del Pilar para dedicarle el ascenso a la Virgen. Y enseguida se abri車 un calendario de festejos y homenajes de toda la ciudad. El Murcia tambi谷n fue invitado a la cena oficial del ascenso, pero sus jugadores se quedaron despu谷s sin cobrar, argumentando Abril que algunos no hab赤an cumplido lo pactado, y en respuesta se abort車 el traspaso de Alc芍zar.
En total, el Zaragoza abon車 a sus jugadores 1.061.537 pesetas en primas, mientras que la temporada 1950-51 se cerr車 con un d谷ficit de casi tres millones y medio.
El doctor Abril, que se convirti車 en el hombre m芍s popular de la ciudad, no pod赤a ocultar su felicidad: ※?sta es una de las grandes satisfacciones que te puede dar la vida§. Un mes despu谷s, en la asamblea general de socios del Real Zaragoza, fue nombrado por aclamaci車n presidente de honor perpetuo, una distinci車n 迆nica en la historia del primer club aragon谷s.