REAL ZARAGOZA / HISTORIAS DE SEGUNDA (XVII)
El tercer ascenso del Real Zaragoza (II)
Bajo la presidencia de Abril, el club aragon谷s compr車 y ampli車 Torrero, a?adi車 a su nombre el t赤tulo de Real, fich車 a los mundialistas Gonzalvo II y Hern芍ndez, se gan車 el apelativo de &millonario* y retorn車 a Primera Divisi車n en 1951 en una promoci車n de infarto.
Con el entusiasmo desbordado por los fichajes de los mundialistas Gonzalvo II y Hern芍ndez, y con m芍s de cuatro mil nuevos socios, el Zaragoza se present車 ante su p迆blico el 3 de septiembre de 1950 con un amistoso frente al Atl谷tico de Bilbao, entonces uno de los tres grandes y el segundo equipo en simpat赤as de la inmensa mayor赤a de los aragoneses, en un campo de Torrero literalmente a reventar. El Zaragoza, con goles de Hern芍ndez (2) y Cabido, venci車 con autoridad a los rojiblancos, que acudieron con todos sus titulares, y todav赤a se dispar車 m芍s la euforia en una ciudad que ya alcanzaba los 244.000 habitantes.
El aforo de Torrero era de apenas 15.000 espectadores y, aunque los precios de las entradas estaban elevados al l赤mite, se hac赤a imprescindible ampliar su capacidad para dar cabida al aluvi車n de nuevos aficionados y para poder compensar con las recaudaciones en taquilla el coste de un equipo de alt赤simos vuelos. As赤 que el presidente Juli芍n Abril se puso manos a la obra casi desde su nombramiento. Sus antecesores Lasala, Mola, Salvador y Vald谷s tambi谷n hab赤an querido comprar y ampliar Torrero, pero fue Abril, con su conocida audacia y resoluci車n, el que lo consigui車. Primero firm車 una pr車rroga de un a?o del contrato de arriendo, por 36.000 pesetas de alquiler, y despu谷s acept車 la propuesta de venta de las acciones del grupo mayoritario de la Sociedad An車nima Campo de Deportes, que llevaba impl赤cito un permiso para comenzar las obras de ampliaci車n del campo. ?stas comenzaron el 15 de septiembre, despu谷s de la primera jornada del campeonato en Segunda, bajo la direcci車n del arquitecto y directivo Julio Descart赤n. Se levant車 el famoso &Gol de Piscina*, una rotonda que un赤a ese sector con la Tribuna de Preferencia, y se sustituy車 el grader赤o de General, que contaba con s車lo dos filas de asientos y el resto eran localidades de pie en un terrapl谷n, por el primer tramo de la famosa &Gradona*, de 18 metros de altura y 38 gradas con pasillos de f芍cil acceso, que elevaron el aforo hasta los 19.837 espectadores, con un coste de 1.650.000 pesetas. Estas obras eran la primera fase de un ambicioso proyecto para remozar por completo la instalaci車n y llegar a los 49.000 espectadores de capacidad, pero que no llegar赤a nunca a completarse. Adem芍s, el 4 de noviembre de 1950 el Zaragoza ejerci車 su opci車n de compra sobre Torrero y deposit車 el dinero en la oficina central del Banco de Vizcaya de la capital aragonesa: 1.224.308 pesetas.
Y con campo propio y un equipo plagado de grandes nombres -entre traspasos, primas de fichaje y sueldos mensuales, el costo de la plantilla 1950-51 super車 los cuatro millones de pesetas, una cifra fabulosa para un equipo de Segunda Divisi車n-, al Zaragoza no tardaron en colgarle el sobrenombre de &Millonario*, un apelativo que hizo fortuna en el f迆tbol espa?ol y que propici車 que en el resto de campos de la categor赤a se le recibiera con una desmedida hostilidad.
La Segunda Divisi車n mantuvo su dise?o de la temporada anterior, con 32 clubes divididos en dos grupos de 16, agrupados por criterios de proximidad geogr芍fica. Los dos primeros equipos de cada grupo ascend赤an autom芍ticamente a Primera Divisi車n, mientras que los segundos y terceros, junto al decimotercero y al decimocuarto clasificados de Primera Divisi車n, disputaban una promoci車n, con una liguilla a doble vuelta, que daba dos plazas de ascenso o permanencia en Primera Divisi車n.
El Zaragoza, como el curso anterior, qued車 encuadrado en el Grupo I o Norte, y desde el primer d赤a qued車 claro que el campeonato iba a ser un mano a mano entre el equipo aragon谷s y el Real Gij車n. El Zaragoza, dirigido por Urquiri, comenz車 como un tiro, con una goleada a la Gimn芍stica Lucense en Torrero (4-0) y un ajustado triunfo en Ferrol (1-2), pero en la tercera jornada sufri車 un tropiezo en casa frente al Sabadell, el tercer candidato al ascenso directo, y cedi車 el liderato al Gij車n. De ah赤 al final de la primera vuelta s車lo perdi車 otro partido, en Buenavista frente al Oviedo (3-1), mientras desguaz車 al San Andr谷s en Barcelona (3-7), venci車 por la m赤nima al Gij車n (1-0), se impuso al Osasuna en Pamplona (1-2), con el apoyo en las gradas de San Juan de cuatro mil seguidores desplazados desde todos los puntos de Arag車n en un tren especial, 60 autocares 每tres de ellos desde Jaca- y numerosos autom車viles particulares, y despach車 al Huesca en Torrero (3-0) en el primer derbi aragon谷s de la historia en Segunda. ※El Zaragoza jug車 con m芍s coraje del que acostumbra. Y 谷ste es un buen s赤ntoma, porque en Segunda Divisi車n se emplea mucho el coraje y poco la filigrana§, destac車 Miguel Gay en su cr車nica de esta partido en &Heraldo de Arag車n*. Y es que el Zaragoza de los &Millonarios*, cuajado de jugadores de Primera Divisi車n, finos y t谷cnicos, tuvo problemas para adaptarse a una categor赤a 芍spera, donde imperaba la pierna fuerte cuando no el hachazo, con terrenos de juego de reducidas dimensiones y demasiadas calvas y 芍rbitros sin ganas de complicarse la vida con los exaltados p迆blicos locales.
Al ecuador del campeonato se lleg車 con el Gij車n l赤der y el Zaragoza s車lo un punto por detr芍s, seguidos por un Logro?谷s que no tard車 en desfondarse, por el Sabadell, por el Oviedo y por el San Andr谷s.
En la segunda vuelta, el equipo aragon谷s se desquit車 del Sabadell con una fuerte goleada en la Cruz Alta (1-5), con Hern芍ndez en tarde esplendorosa, masacr車 de nuevo al San Andr谷s (8-3) y recuper車 el liderato justo antes de jugar en Gij車n. Pero como tantas veces en su historia se hundi車 en el barro de El Molin車n y regres車 cosido a goles (6-2), perdiendo el primer puesto y el &goal-average* particular.
Aunque el Zaragoza no baj車 nunca de la segunda plaza, la escandalosa derrota en Gij車n le hizo mucho da?o y el entrenador Urquiri comenz車 a estar seriamente cuestionado. Una derrota en Torrelavega frente a la modest赤sima Gimn芍stica acab車 de complicar m芍s las cosas y sirvi車 en bandeja el ascenso directo al Gij車n. Todo el mundo se puso nervioso por el colosal esfuerzo econ車mico realizado y hasta el presidente Abril cay車 en cierto des芍nimo y coloc車 en el escaparate a Hern芍ndez, la gran figura del equipo junto a Gonzalvo II. El 15 de marzo de 1951 el Deportivo de La Coru?a present車 al Zaragoza una propuesta por escrito por el gran interior canario, lo que aprovech車 Abril para ofrec谷rselo al Barcelona, que ya lo hab赤a querido fichar en agosto. Ocho d赤as despu谷s, el Viernes Santo, Jos谷 Samitier, secretario t谷cnico del club azulgrana, se desplaz車 a la capital aragonesa para negociar el fichaje, ofreciendo un intercambio con el defensa Pedr赤n y el medio volante argentino Marcos Aurelio, pero sin dinero de por medio, lo que acab車 abortando la operaci車n. Al d赤a siguiente Abril sali車 a desmentir la venta de Hern芍ndez, algo que tambi谷n hizo el Barcelona el 31 de marzo de 1951.
Pero entre desmentido y desmentido tuvo lugar el 30 de marzo de 1951 una multitudinaria junta general extraordinaria en la que el Zaragoza Club de F迆tbol aprob車 sus nuevos estatutos, donde se incluy車 su cambio de nombre por el de Real Zaragoza Club Deportivo, con la creaci車n de nuevas secciones de baloncesto, hockey patines, pelota, atletismo, nataci車n, boxeo y lucha.
El punto m芍s conflictivo, sin duda, era el apelativo de Real, porque vulneraba uno de los acuerdos del acta de constituci車n del club en 1932.
El socio n迆mero uno, Luis Gayarre, viejo iberista de solera, tom車 la palabra y dijo lo siguiente: ※?Qu谷 finalidad tiene llamar al Zaragoza &Real Zaragoza Club Deportivo*? No lo comprendo. Yo no veo la finalidad del cambio o agregaci車n de Real. Cuando la constituci車n del club en 1932 se dijo que desaparec赤a y ahora se quiere volver a crear, cuando ni tan siquiera en Espa?a hay monarqu赤a§.
Respondi車 Juli芍n Abril: ※Efectivamente, en Espa?a no hay monarqu赤a, pero s赤 es un reino. Adem芍s, la denominaci車n de Real la llevan otros clubes, como el Real Madrid o la Real Sociedad, y la propia Real Federaci車n Espa?ola de F迆tbol§.
Nadie m芍s intervino y la junta general extraordinaria de socios aprob車 por aclamaci車n los nuevos estatutos y el cambio de nombre.
La maniobra fue de una ilegalidad manifiesta, pero Abril, tambi谷n de clamorosa significaci車n iberista en su juventud, aunque de filiaci車n mon芍rquica y tradicionalista, quiso hacerle un gui?o a su directivo Emilio Ara, casado con la marquesa de Arlanza y siempre dispuesto a avalar cr谷ditos a favor del club. La prueba es que el 2 de agosto de 1951 la junta directiva nombr車 socio de honor del Real Zaragoza a Emilio Ara, el mismo que el 19 de abril de 1922 hab赤a conseguido de Alfonso XIII el t赤tulo de Real para la Sociedad Atl谷tica Stadium, el club en el que se fundi車 en 1925 un primitivo Zaragoza F迆tbol Club, fusionado previamente con el Club Deportivo Fuenclara.
Y aqu赤 se hace imprescindible aclarar que el Zaragoza Club Deportivo que result車 de la fusi車n en 1925 de la Real Sociedad Atl谷tica Stadium y el Zaragoza F迆tbol Club perdi車 oficialmente el t赤tulo de Real el 7 de julio de 1931 al eliminarse durante la II Rep迆blica Espa?ola todos los s赤mbolos de la realeza.
En la mencionada asamblea del 30 de marzo de 1951 se pas車 tambi谷n a constituir una nueva junta directiva del ya Real Zaragoza presidida por Juli芍n Abril, con un nuevo periodo de mandato de dos temporadas.
Presidente: Primitivo Juli芍n Abril Pascual.
Vicepresidente 1?: Jes迆s Vald谷s de Guzm芍n.
Vicepresidente 2?: Eduardo Teixeira Gracianeta.
Secretario: Jos谷 Manuel Ibietatorremend赤a Su芍rez.
Vicesecretario: Francisco Mart赤n Espa?a.
Tesorero: Jos谷 Aisa L車pez.
Vicetesorero: Carlos Guill谷n Borruey.
Contador: Carmelo Falces Nogu谷.
Vocales: Emilio Ara Besc車s, Enrique Aub芍 Forcada, Julio Giner Gracia, Joaqu赤n Novales Segura, Francisco Ortiz Pascual, Jos谷 Tajada Aladr谷n, Manuel Solano Zaragozano, Luis Ram赤rez Ruanes, Pedro Broto Rodr赤guez y Eliseo Sastre del Blanco.
Pero despu谷s de este par谷ntesis obligado volvamos al campeonato en Segunda Divisi車n, ya en sus 迆ltimas jornadas.
Una nueva derrota en Tarragona ante el colista dej車 al Zaragoza ya a cinco puntos del l赤der Gij車n y termin車 de acabar con el menguado cr谷dito de Urquiri, que pec車 de blando y de excesivamente contemplativo con los jugadores, y se mostr車 siempre sobrepasado por el te車rico favoritismo del Zaragoza. Fue destituido al d赤a siguiente, el 2 de abril de 1951, aunque se disfraz車 la decisi車n con el sorprendente eufemismo de que se iba a ausentar unos d赤as de la ciudad ※por vacaciones§, y relevado por Juanito Ruiz, hasta entonces entrenador del filial Atl谷tico Zaragoza y que, a cinco jornadas del final, afront車 su tercera etapa en el banquillo del equipo aragon谷s.
Urquiri estuvo tres semanas mudo, pero a la que arregl車 su finiquito no se mordi車 la lengua: ※Entre una directiva que no puede irse y yo he optado por sacrificarme. Estoy contento de haber dejado al equipo en el segundo lugar de la clasificaci車n, aunque la directiva no me haya perdonado que el Zaragoza no fuera el primero. El equipo ha dado el rendimiento que yo esperaba. Ni m芍s ni menos. Es un equipo al que el juego de Segunda no le permite mayores triunfos. Por otra parte, ha sido el &coco*, al cual se enfrentaban siempre los rivales con las u?as afiladas. Deseo fervientemente que el Zaragoza logre el ascenso y que la afici車n vea cumplidos tan nobles deseos§.
Juanito Ruiz debut車 con una gran victoria frente al Osasuna (4-2) en un partido plagado de incidentes en el terreno de juego y en la grada por la violencia continuada de los futbolistas navarros, y que deriv車 despu谷s en una ruptura oficial de relaciones entre ambos clubes. Dos semanas despu谷s, el Zaragoza derrot車 tambi谷n al Oviedo en Torrero y asegur車 matem芍ticamente su segundo puesto y, por tanto, su clasificaci車n para la promoci車n, donde se iba a jugar una de las dos plazas con premio junto al Sabadell, el Salamanca y el Las Palmas, tambi谷n de Segunda, y el Murcia y el M芍laga, de Primera.
Apuntar tambi谷n como cierre que la Uni車n Deportiva Huesca 每no confundir con el Huesca actual, que fue fundado en 1960- finaliz車 en una meritoria quinta posici車n en el Grupo I de Segunda y se qued車 a tres puntos de disputar la promoci車n. El Zaragoza visit車 su campo de San Jorge en la pen迆ltima jornada y, pese a que acudi車 plagado de reservas y actu車 con un punto de relajaci車n al estar ya clasificado, tuvo que soportar insultos sin tasa ni medida durante toda la tarde. Y eso que el Huesca venci車 c車modamente 2-0. El portero Candi no daba cr谷dito a lo sucedido -※Me han insultado much赤simo, m芍s que en ning迆n otro campo§-, mientras el presidente Abril no ocult車 su disgusto: ※El trato del p迆blico de Huesca hacia el Zaragoza no lo acabo de entender§.
(El relato de esta temporada continuar芍 ma?ana en el cap赤tulo XVIII de esta serie de Historias de Segunda).