La sensaci¨®n que ten¨ªamos en Italia cuando por primera vez en 60 a?os fallamos la clasificaci¨®n a un Mundial, era que se hab¨ªa acabado el f¨²tbol. Nos hab¨ªan quitado la pelota. Pasar de esto a la ilusi¨®n de estos meses, generada a golpe de r¨¦cords (la Azzurra nunca hab¨ªa ganado 11 partidos seguidos y ni hab¨ªa terminado una fase de clasificaci¨®n con pleno de victorias) se debe al trabajo de Roberto Mancini, que realiz¨® algo complicad¨ªsimo empezando por una idea muy sencilla: meter a cada jugador en su sitio favorito y dejarle con la pelota en los pies lo m¨¢s posible. Bonucci declar¨® a AS que antes "ir con la Nazionale daba casi pereza" y ahora los azzurri ans¨ªan por ser convocados e ir a pasarlo bien en Coverciano. El buen rollo es a un nivel tan alto que Belotti e Immobile, que se juegan el puesto de delantero centro, se animan y buscan si uno marca un gol y el otro est¨¢ en el banquillo. Una felicidad que nace de la juventud. Bajo Mancini se estrenaron 33 nuevos azzurri y Zaniolo, por ejemplo, fue convocado sin haber jugado en la Serie A.

La lesi¨®n en la rodilla le impidi¨® al talento de la Roma acudir a la Eurocopa, pero el entrenador complet¨® la delantera con otro joven, Giacomo Raspadori (21 a?os), que con caracter¨ªsticas distintas a los otros puntas ser¨¢ una alternativa interesante. Mancini decidi¨® renunciar en su lista definitiva de Politano a pesar de sus buenas actuaciones en este curso, confirm¨® a Bernardeschi, que vivi¨® una temporada decepcionante en la Juve y con la Azzurra muestra otra cara. Sensi tuvo que dejar la concentraci¨®n por problemas f¨ªsicos y entr¨® Pessina. Hubo tambi¨¦n un 'fichaje' para la defensa: Rafael Toloi del Atalanta, brasile?o que consigui¨® el pasaporte italiano este a?o. El seleccionador le prefiri¨® a Gianluca Mancini por ser central y adaptarse tambi¨¦n como lateral derecho. En la zaga, eso s¨ª, con Donnarumma (todav¨ªa en busca de su nuevo equipo) seguir¨¢n siendo protagonistas Bonucci y Chiellini. Jorginho, que acaba de coronarse campe¨®n de Europa, mantendr¨¢ las riendas del mediocampo al lado de un Barella cuyo crecimiento, en el Inter de Conte, ha sido impresionante.

Los problemas en la rodilla hicieron temer la ausencia de Verratti, pero desde Coverciano afirman que el del PSG est¨¢ mejorando ¡°antes de lo esperado¡± y finalmente ser¨¢ parte de la gran cita. En la delantera se espera mucho de Insigne, que cerr¨® la temporada con 19 goles, de Chiesa, una de las pocas buenas noticias en el a?o de la Juve. Immobile y Belotti seguir¨¢n peleando por el otro puesto, con el de la Lazio favorito. La ¨²nica cuesti¨®n sobre esta Italia es su falta de experiencia: si es cierto que nunca hab¨ªa ganado tantos partidos en las clasificaciones, tambi¨¦n es verdad que la Nazionale construy¨® su leyenda cuando el nivel sube. Habr¨¢ que ver c¨®mo reaccionan los de Mancini, pero Italia tiene todo el derecho para sentirse una de las mejores selecciones de Euro2020 y so?ar con nuevas "notti magiche" en el Ol¨ªmpico de Roma. Hace tres a?os, ni el m¨¢s optimista lo habr¨ªa imaginado.

Llevar el dorsal 10 que fue de Baggio, Del Piero y Totti es un honor, pero tambi¨¦n una responsabilidad: Insigne llegar¨¢ a la gran cita con 29 a?os y se espera much¨ªsimo de ¨¦l, en un contexto t¨¢ctico ideal para desarrollar su talento.

Mancini ha optado por un proyecto t¨¢ctico muy definido desde el principio. Olvidaros del catenaccio, su 4-3-3 es muy parecido al que utiliz¨® Maurizio Sarri para enamorar media Europa con su f¨²tbol: juego posicional, gegenpressing e imprevisibilidad entre l¨ªneas.

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