Un enfermo visita a otro: el Madrid se la juega en Roma
El equipo de Di Francesco es s¨¦ptimo en su Liga y se ve asolado por las bajas. Podr¨ªa jugar con tres centrales, como ante el Bar?a. Dzeko es duda.
El 19 de septiembre, l¨¦ase anteayer, el Madrid le ganaba 3-0 al Roma en el Bernab¨¦u en uno de sus mejores partidos de los ¨²ltimos tiempos, seg¨²n reconocimiento general. El 24 de noviembre el mismo equipo y ya con otro entrenador ca¨ªa 3-0 en Eibar, en uno de sus peores partidos de los ¨²ltimos tiempos. Eso es este Madrid, un tiro al aire. Resulta impredecible saber qu¨¦ versi¨®n presentar¨¢ en Roma, amortizado ya ese primer efecto Solari. Estas son sus cuentas: ganar le clasifica como primero de grupo, empatar le asegura depender de s¨ª mismo para el mismo fin aunque no el pase y perder puede obligarle a vencer al CSKA en la jornada final para no quedar fuera (sigue el partido en directo en As.com).
Ipurua ha multiplicado el enredo. Ca¨ªdo Casemiro s¨®lo queda un relevo natural en la plantilla, Marcos Llorente, en el que no han cre¨ªdo sucesivamente Zidane, Lopetegui y Solari. Ha jugado esta temporada el 5,8% de los minutos. De los futbolistas de campo, s¨®lo Valverde ha tenido menos presencia. Ayer mismo, Solari, al ser preguntado por las opciones para cubrir la vacante, le cit¨® por detr¨¢s de Ceballos, Kroos, Valverde y hasta los centrales, aun reconoci¨¦ndole como el centrocampista t¨¢cticamente mejor educado para la plaza. As¨ª que todo indica que Kroos, que ya le record¨® a Lopetegui que no es Casemiro, tendr¨¢ que ser Casemiro.
Eso le abrir¨ªa un hueco a Isco, que no ha sido titular en ninguno de los cinco partidos con Solari. En cuatro de las siete derrotas del equipo o no estuvo o no sali¨® de inicio. Una raz¨®n aritm¨¦tica que quiz¨¢ incline a Solari a ponerle hoy. Tiene m¨¢s. Lucas V¨¢zquez estuvo en sus cuatro victorias y falt¨® en la ¨²nica derrota. Inclinarse por ¨¦l dejar¨ªa fuera a Asensio o Bale, toda vez que Benzema anda libre de toda sospecha (10 goles, tres asistencias y anotador en todas las competiciones). Bale ha metido un gol en dos meses. Asensio, dos en lo que va de temporada. Andan en m¨ªnimos, pero parece menos conflictivo sentar al balear. En la porter¨ªa, la lesi¨®n de Keylor evita la discusi¨®n aunque cabe recordar que la estad¨ªstica le favorece frente a Courtois.
Un Roma mermado
La mejor noticia para el Madrid es que se mira en el espejo. El Roma est¨¢ a¨²n peor en casi todo ("Somos dos equipos enfermos", dijo Di Francesco, su t¨¦cnico). Es s¨¦ptimo en la Liga y se ha dejado puntos en siete partidos, la mayor¨ªa ante equipos que est¨¢n por debajo en la clasificaci¨®n. Tambi¨¦n pierde el partido de las ausencias. Volver¨¢ a faltar, como en el Bernab¨¦u, Pastore, el fichaje estrella del verano, m¨¢s Perotti, De Rossi y Pellegrini, jugadores cruciales todos en el centro del campo. Y lo tiene dif¨ªcil Dzeko, autor de 63 goles en las dos ¨²ltimas temporadas y la principal arma ofensiva del cuadro italiano. Se lesion¨® en el entrenamiento previo al partido y hasta hoy no se sabr¨¢ si est¨¢ apto. Quiz¨¢ no arriesgue, teniendo en cuenta que el Roma tiene un partido crucial frente al Inter el pr¨®ximo domingo y que su objetivo principal es la cuarta plaza que da acceso a la Champions. Su sustituto ser¨ªa el checo Schick, el fichaje m¨¢s caro en la historia del club y que a¨²n est¨¢ por demostrarlo. A cambio, recupera al meta Olsen y al central Manolas.
El Roma tampoco se libra de las cr¨ªticas por falta de actitud de sus futbolistas, especialmente tras la derrota en Udine el pasado s¨¢bado (1-0). ¡°Carecimos de determinaci¨®n y eso es algo que no puede comprarse en el supermercado¡±, reconoci¨® Di Francesco.
Hasta la capacidad del t¨¦cnico est¨¢ discusi¨®n. Monchi lo eligi¨® por su profundo conocimiento de la Serie A. James Pallotta, el presidente, crey¨® que ayudar¨ªa ¡°a sacar talentos j¨®venes de la cantera¡±. Y la afici¨®n vio en ¨¦l una continuidad en las ideas de Zeman, al que Di Francesco profes¨® siempre admiraci¨®n: ¡°Disfrut¨¦ jugando con ¨¦l aqu¨ª. Es el ¨²nico entrenador que me hizo re¨ªr¡±. Ha procurado siempre huir del juego horizontal y es obsesiva su idea de que el equipo debe culminar en disparo todos sus ataques.
Hoy, por las bajas, podr¨ªa retomar una defensa con tres centrales, excepcional en su carrera pero que le sirvi¨® para eliminar al Bar?a en la pasada Champions. El Ol¨ªmpico es su refugio y a estas alturas el Madrid ya debe saberlo.
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