Sengun: la delicia turca que ilumina el futuro de los Rockets

La NBA no espera a nadie. Es una frase muy com¨²n que est¨¢ viviendo en sus carnes Usman Garuba, un jugador polivalente que destac¨® enormemente en el Real Madrid pero que todav¨ªa no ha tenido su oportunidad en la mejor Liga del mundo. El ala-p¨ªvot espa?ol apenas ha disputado 11 partidos en total, con 6,5 minutos de media y un paso obligado por la G-League que tampoco destac¨® por sus grandes alardes. Su mejor partido fue su debut ante los Timberwolves: 4 puntos, 2 rebotes, 1 asistencia, 1 robo y 0 p¨¦rdidas en 8 minutos. Un mero espejismo; el choque en el que ha contado con m¨¢s minutos se fue a 17 y apenas tuvo producci¨®n (3+4+1+2) y generalmente, no salta a la pista y no acaba de entrar en la rotaci¨®n de un Stephen Silas que ha probado muchas cosas distintas, pero no termina de incluir en sus planes al internacional espa?ol.

Garuba tiene 19 a?os, cuenta con experiencia en la ¨¦lite europea y ten¨ªa cualidades que hac¨ªan presagiar una oportunidad en la NBA que todav¨ªa no ha llegado. Fuerte de cintura para arriba y de cintura para abajo, velocidad, fortaleza y capacidad para defender tanto a un p¨ªvot para un base. Sin embargo, los jugadores con sus capacidades f¨ªsicas son inagotables en el baloncesto norteamericano, que parece crearlos en una m¨¢quina. Y Draymond Green lidera una camada de baloncestistas multidisciplinares y brillantes en defensa, s¨ª... pero Draymond Green solo hay uno. Y convertirse en un jugador hist¨®ricamente bueno es algo que no puede hacer todo el mundo. Garuba tambi¨¦n ten¨ªa aptitudes para el pase, era peligroso fuera del aro y pod¨ªa meter triples abiertos, una cualidad en la que, adem¨¢s, ten¨ªa mucho margen de mejora. Pero, pero, pero...

Los motivos por los que Garuba no ha encontrado todav¨ªa su sitio pueden ser muchos, pero es obvio que la competencia joven de los Rockets existe y eso ha provocado que el ala-p¨ªvot est¨¦ en un segundo plano. Eso, y una mejora paulatina del equipo texano, que est¨¢ a tres victorias del play-in en una Conferencia Oeste en la que todos pierden y nadie est¨¢ lejos. Y ahora, con la variable del coronavirus, pensar en algo m¨¢s ser¨ªa l¨ªcito para Silas, que puede centrarse en reconstruir mientras adapta su plantilla y mira al futuro pero sin renunciar a nada en el presente. Tras una victoria en el segundo partido ante los Thunder, Houston sufri¨® 14 derrotas consecutivas. Y, tras esto, siete victorias seguidas, dos cifras que si las juntas no tienen cabida en la historia de la NBA. Pero, y esto es evidente, Garuba tiene muchas explicaciones para no encontrar su sitio. Y una de ellas tiene nombre y apellido: Alperen Sengun.

La promesa turca

Los Rockets ten¨ªan muy claro que iban a seleccionar a Jalen Green en la segunda posici¨®n del draft 2021. Lo hicieron asumiedo, como toda la NBA, que Cade Cunningham ser¨ªa el n¨²mero 1, una previsi¨®n que se cumpli¨®. Pero, tras Green, los Rockets ten¨ªan la vista puesta en Alperen Sengun, un p¨ªvot turco que ven¨ªa de cuajar una excelente temporada en el Besiktas turco: 19,0 puntos, 8,7 rebotes, 2,7 asistencias, 1,6 tapones y 1,3 robos de bal¨®n por partido, siendo elegido Jugador del Mes en cinco de los seis meses que dur¨® la competici¨®n. Consecuentemente, el 12 de mayo fue elegido MVP de la competici¨®n y aprovech¨® ese mismo d¨ªa su intenci¨®n de presentarse al draft de la NBA. El problema para los Rockets es que no volver¨ªan a elegir hasta el puesto n¨²mero 23, en una ronda procedente de los Blazers. Y en el 24, conseguida por parte de los Bucks. Y se hab¨ªan fijado en un jugador al que no quer¨ªan dejar escapar. Pero la cantidad de equipo que ten¨ªan entre medias les dejaba muy dif¨ªcil el hacerse con su persona.

Al final, los Rockets llegaron a un acuerdo con los Thunder, que se hicieron con Sengun en el n¨²mero 16. Vendieron dos futuras rondas del draft a Sam Presti, que las colecciona (alg¨²n d¨ªa entenderemos por qu¨¦) y se hicieron con los servicios de Sengun, que el 7 de agosto firm¨® con los Rockets. Y acertaron: desde entonces, el p¨ªvot est¨¢ tutelado por John Lucas, entrenador asistente del equipo, que prepara entrenos personalizados para su pupilo. El t¨¦cnico, afable y severo, contrasta con el jugador, el antagonista juguet¨®n. Pero su qu¨ªmica es innegable y pasan mucho tiempo juntos, provocando que el desarrollo de Sengun aumente de forma proporcional a la fe que Lucas tiene por ¨¦l. Una relaci¨®n bidireccional que est¨¢ dando sus frutos y que cuenta con la innegable colaboraci¨®n de Orhun Gungoren, el int¨¦rprete del p¨ªvot, que sigue mejorando su ingl¨¦s pero tiene que todav¨ªa tiene que ayudarse de su colaborador para entender y hacerse entender entre jugadores y cuerpo t¨¦cnico.

En el trainning camp de Las Vegas, Sengun ya se dio cuenta de que Estados Unidos no era Turqu¨ªa. Y con su salto definitivo a la NBA, que tuvo lugar el 20 de octubre, la evidencia se hizo todav¨ªa m¨¢s grande. Por eso su din¨¢mica ha sido claramente ascendente y su curva de aprendizaje lleva el proceso correcto. Los Rockets han puesto ¨¦nfasis en mantenerse en plena forma f¨ªsica, y Sengun ha tenido que cambiar algunos de sus h¨¢bitos alimenticios y de sue?o, aumentando su fuerza y acondicionamiento y sufriendo golpes constantes a medida que avanzan los partidos. Parte del proceso, de ese camino de fortalecimiento y desarrollo de una determinada resiliencia, cualidades necesarias para triunfar en una NBA ultracompetitiva y poder tener una carrera larga, a la par que fruct¨ªfera. El propio jugador ha reconocido que esa parte del camino fue dif¨ªcil. Pero necesaria, claro.

?La cara del futuro de los Rockets?

Desde la salida de James Harden, los Rockets est¨¢n en plena reconstrucci¨®n. Un entrenador nuevo, renovaci¨®n de los directivos tras el adi¨®s de Daryl Morey y una cantidad ingente de jugadores j¨®venes (son el octavo equipo m¨¢s precoz de la competici¨®n) donde apenas emerge Eric Gordon (que, si todo va bien, ser¨¢ traspasado en el mercado). Y muchos pronosticaban que Jaleen Green ser¨ªa la cara del nuevo proyecto, pero algunos difieren y empiezan a se?alar a Sengun para eso. El p¨ªvot est¨¢ desarrollando su capacidad de pase, se mueve bien en la pintura y todav¨ªa tiene que convertirse en un reboteador m¨¢s efectivo y tener fundamentos m¨¢s claros y desarrollados en defensa. Pero su margen de mejora es muy grande y Green, que est¨¢ cuajando una temporada rookie bastante decente, parece tener un margen m¨¢s peque?o para convertirse en la megaestrella que siempre puede llegar (y no siempre llega) a ser un n¨²mero 2 del draft.

Green promedia 14 puntos por partido, pero apenas participa en el resto de aspectos del juego y est¨¢ con muchos problemas en el lanzamiento: un 38% en tiros de campo y menos del 28% en triples. Y todo en 30,8 minutos por noche. En contrapartida, Sengun est¨¢ en 9,1 puntos, 4,7 rebotes y 2,7 asistencias, pero en apenas 18,6 minutos de juego. Es decir, en menos tiempo, una mayor efectividad. En la derrota (por 35 puntos) ante los Cavaliers, Sengun se fue a 19 tantos y 11 rebotes, adem¨¢s de aportar 5 asistencias, en tan solo 28 minutos, completando una racha de 4 partidos en las que promedi¨® 15 puntos con un 55% en tiros de campo. Y, de momento, solo intenta 1,2 triples por noche, una faceta que todav¨ªa no ha desarrollado del todo y que est¨¢ perfeccionando, una vez m¨¢s, con Lucas, su amigo y protector.

As¨ª est¨¢n las cosas en Houston, que antes de su racha de 7 victorias consecutivas eran el 29? equipo en asistencias por partido y en los 11 encuentros siguientes (8-3 de r¨¦cord), se convirtieron en el tercero, con Sengun involucrando mucho m¨¢s a sus compa?eros y forzando a una parte de la afici¨®n a pedir por redes sociales su titularidad (solo ha saltado de incio en dos partidos esta temporada) en detrimiento de un Daniel Theis que no entra en los planes de futuro de la entidad. La proyecci¨®n del p¨ªvot es mete¨®rica, su capacidad de aprendizaje est¨¢ muy desarrollada y su margen de mejora es enorme. Todav¨ªa es pronto para considerar que se trata de la cara de la franquicia para los a?os venideros, pero est¨¢ claro que tiene mucho potencial y que tiene talento y calidad para el baloncesto. Garuba, por su parte, tendr¨¢ que seguir esperando una oportunidad que llegar¨¢. Porque s¨ª, la NBA no espera a nadie. Pero siempre, siempre, siempre te da una ocasi¨®n para hacerte un hueco y triunfar. Es parte del sue?o americano. O de la competici¨®n norteamericana. Qu¨¦ m¨¢s da. El momento llegar¨¢ y el espa?ol tendr¨¢ que aprovecharlo. As¨ª son las cosas. Para bien y para mal.