NBA | FINALES 2021 | SUNS-BUCKS
Todos los ojos en Antetokounmpo
Esta noche arrancan las Finales 2021 de la NBA con toda la atenci¨®n puesta en la rodilla del alero griego, que es duda. Ser¨¢ el primer anillo de los Suns o el segundo de los Bucks.
En el verano de 1968, la NBA ampli¨® formato: de doce a catorce franquicias (en 1976 ya eran 22 tras la fusi¨®n con la ABA) tras la inclusi¨®n de dos nuevas, Phoenix Suns y Milwaukee Bucks. A partir de esta noche (03:00 hora espa?ola), cincuenta y tres a?os despu¨¦s, Suns y Bucks juegan por el anillo de campe¨®n. Una final imprevista, una apuesta casi imposible en el arranque de la temporada, que coronar¨¢ por primera vez a los de Arizona o por segunda a los de Wisconsin.
As¨ª que, en cierto modo, esta final hila para siempre el destino de dos franquicias que llegaron juntas a la Liga y se jugaron un a?o despu¨¦s, en 1969, el n¨²mero 1 del draft por el sistema de moneda al aire. Ganaron los Bucks, que se llevaron a Lew Alcindor, el jugador que en 1971 pas¨® a llamarse Kareem Abdul-Jabbar y en 1975 se fue a los Lakers. Con ¨¦l y Oscar Robertson, los Bucks, por entonces equipo de la Conferencia Oeste, pasaron en dos a?os de 27 a 66 victorias y se proclamaron campeones en 1971. Despu¨¦s, perdieron la final de 1974 contra los Celtics, el mismo y grand¨ªsimo equipo (Dave Cowens, John Havlicek, Jo Jo White¡) que dej¨® sin t¨ªtulo dos a?os despu¨¦s, en 1976, a unos Suns que solo hab¨ªan vuelto una vez m¨¢s a la gran batalla. Fue en 1993, cuando el equipo comandado por Charles Barkley no pudo con los Bulls de un Michael Jordan divino (41 puntos, 8,5 rebotes y 6,3 asistencias por partido).
As¨ª que Suns y Bucks solo cominaban, en la parrilla de salida de esta temporada, cuatro Finales y un t¨ªtulo. Y de sus actuales plantillas, solo un jugador (Jae Crowder: seis la pasada temporada con los Heat) sabe lo que es disputar un partido en la lucha por el t¨ªtulo. Pero han sido, finalmente, los mejores de una temporada y unos playoffs marcados por las lesiones. De Jamal Murray a Anthony Davis y LeBron James; de Kawhi Leonard a Mike Conley y Donovan Mitchell; de Joel Embiid a James Harden y Kyrie Irving¡ y, claro, de Trae Young a un Giannis Antetokounmpo que tiene en vilo a la NBA.
Sin noticias de Giannis Antetokounmpo
El jugador franquicia de los Bucks, el dos veces MVP de la NBA, sufri¨® una sufri¨® una hiperextensi¨®n en la rodilla izquierda en el cuarto partido de la final del Este. No ha jugado desde entonces y es duda para el inicio de la gran batalla contra los Suns. Se trata de si juega¡ pero tambi¨¦n de en qu¨¦ condiciones lo hace. Sin ¨¦l, su equipo super¨® a Atlanta Hawks, pero lo tendr¨ªa en chino contra un rival del nivel de los Suns.
Ayer todas las se?ales fueron vagas, todas las palabras ambiguas. Nadie fuera del c¨ªrculo m¨¢s interno de los Bucks (o quiz¨¢ ni ah¨ª) sabe si Giannis jugar¨¢ esta noche¡ y las pr¨®ximas. Y nadie sabe c¨®mo est¨¢, en caso de que se lance a hacerlo, la rodilla de un jugador que vive de sus (portentosas) explosiones f¨ªsicas. Mala cosa para cerrar el a?o, y no ha cesado la controversia al respecto, del calendario comprimido en tiempos de pandemia: se acab¨® la pasada temporada (t¨ªtulo de los Lakers) el 11 de octubre y se empez¨® esta el 22 de diciembre. Con 72 partidos por equipo, no los 82 habituales, y un ritmo extenuante para evitar jugar en agosto, anatema para las televisiones, y enlazar sin pisarse con los Juegos Ol¨ªmpicos: un hipot¨¦tico s¨¦ptimo partido se jugar¨ªa el 22, un d¨ªa antes de la ceremonia de inauguraci¨®n. Hay tres jugadores (Devin Booker, Khris Middleton, Jrue Holiday) que est¨¢n en esta Final y estar¨¢n el d¨ªa 25 en Tokio, cuando EE UU debute contra Francia.
El cuento de hadas contra el exorcismo
La sombra de Giannis (y de su rodilla¡) se alarga sobre cualquier pron¨®stico y expectativa de unas Finales que podr¨ªan ser excelentes con todos los protagonistas presentes y en plenitud. Una batalla entre segundos de Conferencia, rendidos los primeros (Utah Jazz y Philadelphia 76ers) y demolidos los favoritos que asomaban por detr¨¢s, todos crujidos por las lesiones: Lakers, Clippers y unos Nets que llegaron a parecer todopoderosos. Esta ser¨¢ una batalla que medir¨¢ dos formas de vivir unos playoffs, dos maneras de viajar de eliminatoria en eliminatoria, dos de enderezar un proyecto y poner rumbo a la elite. El cuento de hadas de los Suns contra el exorcismo de los Bucks.
Porque en el Este se quiso dar por amortizados ya a estos Bucks, desde luego demasiado pronto. El ascenso de los Nets at¨®micos, la construcci¨®n de un monolito de m¨²sculo en Philadelphia y la aparici¨®n de Miami Heat (flor de un d¨ªa, por ahora) sacaron de plano a un equipo en el que se hab¨ªa dejado de creer, por las limitaciones en playoffs de su entrenador (Mike Budenholzer) y su estrella (el h¨ªper f¨ªsico Giannis). Los Bucks ganaron solo 15 partidos en la temporada 2013-14, ya a bordo sus dos all star, el griego y el extraordinario escolta Khris Middleton. Sufrieron dolores de crecimiento y explotaron en 2018, tras la salida del banquillo del retorcido Jason Kidd, que ahora dirigir¨¢ a Luka Doncic en los Mavericks (veremos c¨®mo va eso). Despu¨¦s de dos temporadas de 60 y 56 victorias y dos costalazos tremendos en playoffs (contra Raptors y Heat), los Bucks parec¨ªan material con fecha de caducidad, un equipo en el que Budenholzer agotaba trayecto y sobre el que pend¨ªa como un castigo divino la agencia libre de Antetokounmpo.
Pero el griego apost¨® por seguir en su casa (n¨²mero 15 del draft de 2013) sin condiciones (228 millones por cinco a?os) y los Bucks eligieron darse otra oportunidad con una nueva estructura que sum¨® a Jrue Holiday y se qued¨® sin Bogdan Bogdanovic despu¨¦s de un extra?o sainete. La apuesta por la evoluci¨®n sin revoluci¨®n funcion¨®, rematada por la llegada de PJ Tucker en marzo. Hizo falta que las lesiones crujieran a los Nets, pero siempre hay que encontrar viento a favor. As¨ª ha sido para un equipo que vive en un ejercicio de superaci¨®n de sus l¨ªmites, de confrontaci¨®n de sus miedos; en el que las lesiones en clave baja (DiVincenzo) o nuclear (Giannis) no han sido excusa y en el que Middleton ha explotado como s¨²per estrella (si es que no lo era), Antetokounmpo ha ense?ado trazos de su evoluci¨®n definitiva hacia el jugador total que acabar¨¢ siendo y Jrue, Tucker y Brook Lopez han aparecido cuando se les ha necesitado. Un bloque resiliente y ultra f¨ªsico, que conquista las batallas en las que antes sacaba bandera blanca y que tiene la mejor defensa de los playoffs (la segunda es la de los Suns) y una dependencia menor del triple que en pasadas temporadas. Y un entrenador, el cuestionad¨ªsimo Budenholzer, que esta vez si se ha atrevido con algunos volantazos: nuevos sistemas defensivos, ajustes en las eliminatorias, soluciones para un ataque con tendencia bipolar¡
Esa pelea contra el destino de los Bucks, que parecieron ventilados cuando perd¨ªan 2-0 con los Nets pero que han sido uno de los tres o cuatro mejores equipos de la NBA en el ¨²ltimo trienio, contrasta con el mete¨®rico ascenso de Phoenix Suns. El equipo del valle llevaba desde 2010 sin jugar playoffs y tiene el peor porcentaje de triunfos (30,2%) de un finalista en el lustro anterior a luchar por el t¨ªtulo. La siguiente peor marca es, dos a?os seguidos de susto, la de los Lakers 2020, que llegaron al t¨ªtulo tras seis a?os sin playoffs.
Los Suns, hace dos telediarios un ejemplo de disfunci¨®n y caos, llevaba desde 2014 sin alcanzar el 50% de victorias y han saltado en esta temporada a un 70% (51-21) que equivale a casi 60 en una temporada de calendario normal. Ya ten¨ªan ese valioso n¨²cleo joven que forman los aleros Mikal Bridges y Cam Johnson, el p¨ªvot DeAndre Ayton (n¨²mero 1 del draft de 2018, el de Luka Doncic) y el escolta Devin Booker, un anotador maravilloso que (24 a?os) ha sido ya dos veces all star y es uno de los ¨²nicos seis jugadores que ha anotado 70 puntos en un partido NBA (marzo de 2017). Pero ven¨ªan (con Booker, Ayton y Bridges) de ganar 19 partidos en la temporada 2018-19.
El nuevo armaz¨®n incluye llegadas clave en despachos (James Jones), banquillo (Monty Williams) y pista, donde apost¨® muy fuerte por Chris Paul, que pas¨® a ocupar el puesto de base que hab¨ªa cubierto con ¨¦xito Ricky Rubio la pasada temporada, cuando los Suns dieron se?ales de vida y firmaron un prometedor 8-0 en su paso (sin playoffs) por la burbuja de Florida. Paul (36 a?os) va a jugar su primera Final despu¨¦s de 16 a?os y m¨¢s de 1.200 partidos en la NBA, 123 de playoffs. Once veces all star, el billete para la lucha por el t¨ªtulo se le hab¨ªa resistido hasta ahora (Hornets, Clippers, Rockets¡) a uno de los mejores bases de la historia, que consagrar¨ªa su lugar en esa lista de elegidos con un anillo de campe¨®n. M¨¢s vale tarde que nunca.
Los Suns han sufrido percances, sobre todo en las carnes del propio Paul (lesiones de hombro y mano, trance con los protocolos sanitarios) pero han marchado en todos los playoffs con el viento muy de cara: las lesiones de los Lakers (Davis a la cabeza), la ausencia de Jamal Murray y las de Kawhi Leonard y Serge Ibaka. Ahora, el estado f¨ªsico de Antetokounmpo puede ponerles en bandeja un t¨ªtulo que ser¨ªa de plena justicia en todo caso: no existen los asteriscos. Los Suns juegan de maravilla, ganan de mil maneras distintas, tienen talento, dureza y unos j¨®venes que est¨¢n sobradamente preparados pese a su te¨®rica inexperiencia. Son un equipo sin apenas puntos d¨¦biles que est¨¢ a cuatro victorias de completar un viraje total tras a?os en el fango y alcanzar lo que no pudieron antes Steve Nash, Charles Barkley, Amar'e Stoudemire, Kevin Johnsnon, Paul Westphal, Dick Van Arsdale, Alvan Adams, Tom Chambers...
Ser¨¢ el primer anillo en Arizona o el segundo, medio siglo despu¨¦s, en Wisconsin. Ser¨¢, en todo caso, una historia maravillosa y est¨¢ a cuatro victorias de escribirse. Hoy se resuelve la primera: arrancan las Finales 2021 de la NBA, desde hoy ya no se duerme.