Las matem¨¢ticas se van al Este: los Sixers fichan a Daryl Morey
La franquicia de Philadelphia da un golpe sobre la mesa y se hace con Daryl Morey, el genio de las matem¨¢ticas que convirti¨® a los Rockets en aspirantes.
Los Sixers se ponen serios. La hist¨®rica franquicia, cansada de los continuos vaivenes deportivos del equipo y ante el peligro de ver su proyecto, construido en torno a Ben Simmons y Joel Embiid, fallido, ha hecho una serie de movimientos con la intenci¨®n de salvarlo y convertirse en un equipo competitivo a corto plazo. Primero echaron a Brett Borwn, el entrenador de El Proceso que no ha dejado de ser un hombre que no ha podido mantener la qu¨ªmica ni resolver los problemas t¨¢cticos que planteaban sus dos estrellas. Despu¨¦s contrataron a Doc Rivers, solo unas horas despu¨¦s de que este saliera por la puerta de atr¨¢s de los Clippers. Y ahora fichan a Daryl Morey, el genio de las matem¨¢ticas que se manten¨ªa en Houston desde 2008 y que hab¨ªa creado un sistema espectacular en torno a James Harden que convirti¨® a los texanos en eternos aspirantes... aunque ni siquiera llegaron a disputar las Finales.
La intenci¨®n de la franquicia es dar un giro completo a la parte deportiva y tambi¨¦n a la directiva para cambiar el rumbo. En los despachos sigue el General Manager Elton Brand, cuyo puesto est¨¢ en el aire por los patinazos veraniegos de los ¨²ltimos a?os y la llegada de un Morey que ocupaba el mismo puesto en los Rockets hasta hace nada. Habr¨¢ que ver si ambos se coordinan o si sale el exjugador, que no ha conseguido movimientos especialmente buenos en los ¨²ltimos tiempos. Los Sixers buscan convertirse en un equipo competitivo a corto plazo tras una temporada en la que se han quedado en el sexto puesto del Este y han ca¨ªdo sin paliativos en primera ronda contra los Celtics por 4-0, algo inadmisible para una entidad que el curso anterior llevaba a los Raptors, a la postre campeones, al s¨¦ptimo partido de las semifinales de Conferencia. Ya sabemos c¨®mo acab¨® aquello, por obra y gracia de Kawhi Leonard.
Para algunos, el movimiento levanta ciertas suspicacias. Doc Rivers, un entrenador con fama de buen t¨ªo y campe¨®n en 2008 con los Celtics, es alguien radicalmente distinto, en formo y en forma, a un Mike D'Antoni que permit¨ªa el intervencionismo de Morey al comprar su idea, una en la que cre¨ªa y de la que era la m¨¢xima representaci¨®n en la NBA. El directivo y el entrenador se aliaron con James Harden para sacarle brillo, y si bien el proyecto se qued¨® a medias (o a un partido, el s¨¦ptimo de las finales del Oeste de 2018 ante los Warriors) y choc¨® contra sus propias carencias, nadie ha discutido el creacionismo de un Morey que ha hecho movimientos de buenos (el de Chris Paul) a cuestionables (el que sac¨® a Chris Paul y trajo a Russell Westbrook), estos ¨²ltimos tras incumplir promesas y ceder ante La Barba y la era de los jugadores empoderados. Habr¨¢ que ver si Morey va a trasladar ese mismo sistema a un lugar que tiene un nuevo t¨¦cnico, uno que a buen seguro no querr¨¢ comprar unas ideas que usa parcialmente dentro de una era en la que todos tiran triples, pero nunca ha convertido en su santo y se?a.
Doc Rivers puede ser la soluci¨®n para los problemas t¨¢cticos y el colapso de la zona que generan Ben Simmons y Joel Embiid, siempre estorb¨¢ndose, y tambi¨¦n un hombre que resuelva los problemas de qu¨ªmica y que provoque unidad en la plantilla de la misma manera que lo hizo en los Celtics, que no en los Clippers, donde el load managment y el hermetismo de Kawhi le superaron de forma clara y rotunda. Pero tendr¨¢ que adaptarse a un directivo acostumbrado a sentirse cercano al equipo, no f¨ªsicamente como Mark Cuban pero s¨ª en cuanto a la influencia que tiene en el juego del equipo. Las matem¨¢ticas se tendr¨¢n que complementar con un entrenador cuya reputaci¨®n pierde de un hilo y dos estrellas desmadejadas. Y un h¨¢ndicap claro y rotundo, el de llegar a un equipo sin tiradores despu¨¦s de crear un sistema basado, neta y completamente, en el triple. Embiid es fuerte en el poste y pierde cuando sale, Al Horford plantea un problema deportivo y contractual y, en un vistazo general, falta sacar lo mejor de un Tobias Harris que se reencontrar¨¢ con el entrenador con el que practic¨® su mejor juego, y refuerzos, veteranos o no, que den consistencia moral y tiro. Todo eso tendr¨¢ que resolver Doc Rivers. Al igual que Daryl Morey. Todo eso, y el hecho de que tu base y estrella, Ben Simmons, ha anotado dos solitarios triples en toda su carrera en la NBA. Hab¨ªa que decirlo.