?Y ahora, qu¨¦? Draft, mercado, fechas... as¨ª ser¨¢ la NBA 2020-21
La NBA ha cerrado con un enorme ¨¦xito organizativo la burbuja de Florida. Pero ahora fija ya la vista en una pr¨®xima temporada en la que la pandemia seguir¨¢ condicionando todo.
La NBA lo ha conseguido. Ha coronado un campe¨®n, Los Angeles Lakers, y ha cerrado una temporada 2019-20 que estuvo parada m¨¢s de cuatro meses por culpa de la pandemia y cuya cancelaci¨®n definitiva lleg¨® a parecer una certeza. Pero la burbuja de Disney World ha acabado siendo un absoluto ¨¦xito, un logro hist¨®rico en t¨¦rminos organizativos y sanitarios. Ni un solo positivo, muy pocos problemas de disciplina y una temporada que se pudo terminar con unos playoffs completos. Desde ese punto de vista, un escenario ideal que, sin embargo, no ha evitado que las p¨¦rdidas de la temporada vayan a irse por encima de los 1.000 millones de d¨®lares. No se pudo completar el calendario de forma ¨ªntegra (un asunto que afecta a los contratos televisivos, sobre todo a los locales de cada franquicia) y se perdi¨® el p¨²blico en las gradas, un concepto que (especialmente en playoffs) es trascendental para una cuota de ingresos en la que llega a suponer hasta el 40%. Antes de la pandemia, la NBA se mov¨ªa en unos ingresos de unos 8.000 millones de d¨®lares al a?o. Ahora¡
Ahora no hay certezas, tampoco de los plazos del coronavirus y las posibles respuestas m¨¦dicas en cuanto a vacunas o, simplemente, de la implementaci¨®n y disponibilidad de test r¨¢pidos, un asunto en cuya investigaci¨®n la NBA ha participado desde el principio y que puede transformar radicalmente los plazos de regreso de los aficionados a las gradas. No hay garant¨ªas, m¨¢s all¨¢ de que normalidad no va a ser tampoco una palabra que se vaya a desgastar durante la temporada 2020-21, ni en t¨¦rminos de negocio ni en cuanto a calendarios y fechas con, adem¨¢s, el posible conflicto con los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio (23 de julio-8 de agosto) por el camino.
As¨ª que la NBA puede felicitarse y celebrar el enorme ¨¦xito de la burbuja de Florida y prepararse para los problemas que traer¨¢ la pr¨®xima temporada y para duras gestiones y negociaciones de cara a cerrar unos plazos y formas que ahora mismo se desconocen. Ambas cosas son compatibles. Lo que es seguro, es que una vez terminadas las Finales, toca trabajar otra vez para organizar un calendario y un reparto de beneficios de los que ahora mismo no se sabe pr¨¢cticamente nada. Estos pueden ser unos plazos l¨®gicos, o lo m¨¢s parecido a ellos seg¨²n lo que se sabe ahora y tal y como organiza John Hollinger en The Athletic:
PRIMERA QUINCENA DE NOVIEMBRE. FIJAR EL SALARY CAP:?Este es el primer paso y es esencial. Ahora habr¨¢ casi un mes sin noticias oficiales, en principio, mientras franquicias y jugadores (a trav¨¦s de su sindicato: NBPA) negocian el salary cap, la cantidad que los equipos invierten en salarios para la temporada. Normalmente, esta sale de un c¨¢lculo sobre el BRI, los ingresos relaciones directamente con los partidos (Basketball Related Income). Ahora mismo cualquier proyecci¨®n es casi imposible si se quiere hacer con precisi¨®n, m¨¢s all¨¢ de que es obvio que no se va a volver por ahora al volumen de negocio que se manejaba antes de la pandemia y que pon¨ªa el tope para la temporada 2020-21 en unos 115 millones. Tampoco se quiere dejar que el n¨²mero caiga en picado, como lo har¨ªa con un c¨¢lculo convencional, y hay quien teme descensos de hasta 30 millones de d¨®lares. Esto crear¨ªa un conflicto laboral que se quiere evitar con acuerdos que suavicen la ca¨ªda, la repartan en plazos m¨¢s largos y hagan que el cap no dependa, excepcionalmente, de ese BRI. Cuando se llegue a ese acuerdo, las franquicias podr¨¢n saber a qu¨¦ atenerse en el mercado de fichajes, con los contratos rookies¡ Tambi¨¦n se tienen que fijar nuevas fechas para la aplicaci¨®n de los condicionantes de los contratos (player options, team options¡), ya que la temporada no se va a jugar obviamente en el arco natural octubre-junio.
18 DE NOVIEMBRE. DRAFT: Esta s¨ª es una fecha establecida, la mayor certeza que hay ahora mismo sobre el futuro a corto plazo de la NBA. De hecho, las franquicias ya est¨¢n teniendo reuniones virtuales (de 30 minutos por Zoom) con los jugadores, y est¨¢n realizando ex¨¢menes m¨¦dicos presenciales. Estos tendr¨¢n una importancia capital ya que no va a haber entrenamientos privados.
FINALES DE NOVIEMBRE, ANUNCIO DE INICIO: La NBA quiere anunciar cu¨¢ndo comenzar¨¢ la pr¨®xima temporada con unos dos meses de antelaci¨®n. La opci¨®n de comenzar en Navidad es una quimera ya, y de hecho se puedo llegar a febrero o incluso marzo, opciones que crear¨ªan problemas a nivel log¨ªstico muy serios pero que abrir¨ªan la opci¨®n a m¨¢s noches con p¨²blico en los pabellones. Hay que recordar que se trata de cu¨¢ndo habr¨¢ aficionados¡ pero tambi¨¦n de cu¨¢nta normalidad tendr¨¢n los aforos en los tiempos de la distancia social. Ahora mismo hay una fecha que empieza a ganar mucha fuerza para el inicio de la NBA 2020-21, el D¨ªa de Martin Luther King, el 18 de enero de 2021. Una jornada ya emblem¨¢tica para la Liga, que siempre fija en ella partidos importantes, y que sirve de clima templado entre la imposibilidad de diciembre y la dificultad que plantear¨ªa febrero. Para Acci¨®n de Gracias (26 de noviembre) tendr¨ªa que haber anuncio oficial. Si no, los plazos empezar¨¢n a alargarse de forma ya muy dr¨¢stica¡
FINALES DE NOVIEMBRE O 1 DE DICIEMBRE, AGENCIA LIBRE: Si se abre el mercado el 1 de diciembre, las franquicias habr¨ªan tenido casi dos semanas para trabajar con el salary cap, hacer sus cuentas y c¨¢lculos¡ Y, por detr¨¢s habr¨ªa tres semanas para generar inter¨¦s y cerrar contrataciones antes de la Navidad.
DICIEMBRE, ANUNCIO DEL CALENDARIO: Otro asunto que se vuelve peliagudo, ya que se si quiere jugar sin burbuja, se tendr¨¢ al menos que reducir los viajes y las posibilidades de infecci¨®n de todos los implicados. Normalmente, se tarda meses en cerrar un calendario que esta vez, al menos, tiene la ventaja de que los pabellones est¨¢n muy despejados (no hay actos sociales, convenciones, conciertos¡). Todo apunta a que se va a intentar agrupar los partidos entre rivales de la misma Divisi¨®n, incluso con series de multipartido entre los mismos equipos, una opci¨®n que con p¨²blico no gusta y no se aplica. Se trata de reducir peligro y de conseguir un calendario mas comprimido porque, en todo caso, la idea es intentar que para el curso 2021-22 s¨ª que se recupere la mayor cuota posible de normalidad. Normalmente, una Regular Season con 82 partidos por equipo requiere unos 170 d¨ªas. La NBA considerar¨ªa un ¨¦xito reducir esa cifra a unos 155 d¨ªas, con cuatro partidos por semana para cada franquicia y el por ahora intocable par¨®n de una semana por el All Star Weekend.
18 DE ENERO, INICIO: La fecha que ahora mismo parece ideal. Ir m¨¢s all¨¢ podr¨ªa permitir m¨¢s partidos con p¨²blico pero traer¨ªa enormes problemas de cara a organizar la siguiente temporada y a evitar que las Finales vuelvan a coincidir con la temporada NFL, algo que ha sido un gran quebradero de cabeza para la NBA en este cierre de la burbuja. Si se consigue acabar la Regular Season en torno al 20 de junio, incluso se suavizar¨ªa el choque con los Juegos Ol¨ªmpicos ya que estar¨ªan liberados todos los jugadores que no hayan llegado a playoffs e incluso los de los equipos que caigan en primera ronda. Este arco 18 de enero-20 de junio permitir¨ªa coronar un campe¨®n ya a finales de agosto.
Lo ¨²nico cierto ahora mismo es que ya se negocia, que se quiere evitar a toda costa el formato burbuja, que se sue?a con el regreso del p¨²blico a los pabellones, se tiene mucha fe en la llegada de los test r¨¢pidos y se asume que la crisis econ¨®mica no se va a ir por arte de magia. Seg¨²n el ¨²ltimo convenio, los jugadores se llevan entre el 49y el 51% del citado BRI, y sobre eso se est¨¢ negociando contando tambi¨¦n con la parte de los salarios que bloquea la Liga, y que durante el par¨®n por la pandemia pas¨® del 10% habitual al 25%.
Michele Roberts, directora ejecutiva del NBPA, sabe que no hay m¨¢s remedio que alcanzar un buen acuerdo: ¡°Nuestras proyecciones estaban siendo de unos 8.000 millones de ingresos, y ahora tenemos claro que no vamos a tener 8.000 millones de ingresos. Mientras no haya p¨²blico en los pabellones, m¨¢s nos vale ser realistas. La cuesti¨®n es c¨®mo lidiar con eso y con el dolor que va a producir. No tenemos que pelearnos porque todos sabemos que vamos a recibir un buen golpe en el reparto. No vamos a tener aficionados en las gradas en el n¨²mero y el ritmo de antes de la pandemia, todav¨ªa no. Es obvio que la tarta a repartir va a ser mucho m¨¢s peque?a. La cuesti¨®n es c¨®mo hacerlo de una forma que no destruya el esp¨ªritu del actual convenio colectivo. Las dos partes quieren lo que les corresponde. Pero todos tenemos que ceder y asumir que vamos a perder una parte de lo que gan¨¢bamos, analizar qu¨¦ gastos son inevitables, qu¨¦ cantidades no se pueden tocar¡ Los jugadores est¨¢n preparados, saben que no van a cobrar con normalidad porque la tarta es m¨¢s peque?a. Pero hay que ver c¨®mo se hace, no podemos dejar que sea un desastre que arrase con todo el pr¨®ximo a?o. Necesitamos encontrar una f¨®rmula que esa flexible y que refleje la realidad de la situaci¨®n. No podemos sobrevivir unos sin los otros, y por eso ya estamos negociando¡±.
Roberts, eso s¨ª, tiene claro que los jugadores no quieren ni o¨ªr hablar de otra burbuja: ¡°No, demonios, no. Y con esto cito lo que ellos me dicen cuando les pregunto. Estamos viendo c¨®mo les va al b¨¦isbol y al football sin burbuja. Por ahora, ha habido cosas que han hecho muy bien y otras en las que han tenido muchos problemas. Estamos viendo qu¨¦ se puede replicar de lo que han hecho bien y qu¨¦ no podemos repetir de lo que han hecho mal. La burbuja ser¨ªa la ¨²ltima opci¨®n, la menos ideal. Habr¨ªa que ver otros protocolos, en todo caso y si hubiera que hacer algo similar: si se puede conseguir que los jugadores est¨¦n en sus casas aunque no anden de lado a lado de las ciudades, por ejemplo¡ Por ahora estamos hablando de una temporada m¨¢s convencional pero acortando el calendario, reduciendo viajes¡¡±.