Tatum resucita a los Celtics
Segunda derrota en playoffs de Miami, que amag¨® con una nueva remontada pero sucumbi¨® al gran partido de Tatum. Smart Brown y Kemba, claves. Volvi¨® Hayward.


Parece que la charla de Brad Stevens ha surtido efecto. Hablamos de la que le dio a sus cuatro figuras, la totalidad de su equipo titular en estos playoffs desde que se lesion¨® Gordon Hayward y sin Daniel Theis, cuyas funciones son otras y no entra dentro de la plana mayor espiritual y moral del equipo. La conversaci¨®n tuvo lugar tras la consabida bronca que hubo en el vestuario de los Celtics a la conclusi¨®n del segundo partido, esa en el que tuvieron que separar a Smart y Brown para que no llegaran a las manos. Con ellos dos, Kemba y Tatum habl¨® a la una de la ma?ana el entrenador bostoniano y parece que la reacci¨®n ha llegado cuando m¨¢s necesaria era. Un 3-0 jam¨¢s se ha remontado en la historia de los playoffs y de esa situaci¨®n se quer¨ªan librar unos Celtics que endosaron a Miami la que es tan solo su segunda derrota en estos playoffs y tendr¨¢n ahora hasta la noche del mi¨¦rcoles para descansar, aclarar ideas y reunir las fuerzas suficientes para empatar una serie cuyos dos primeros partidos se decantaron a favor de sus rivales a pesar de tener ventajas de dobles d¨ªgitos. En ambas noches ocurri¨® y en las dos sucumbieron ante el poder¨ªo t¨¢ctico de Spoelstra, su propio miedo esc¨¦nico y el pundonor de los rivales, siempre bajo la atenta y escrutadora mirada de un Pat Riley que lo observa todo entre bambalinas, aunque en persona y desde Disney. En la posici¨®n que le han asignado para ver los partidos y con la mascarilla, ese ser adimensional con una mente fuera de lo com¨²n vio a su equipo perecer, a pesar de hacer su en¨¦simo amago de remontada y meter el miedo en el cuerpo al herido orgullo verde.
Los Celtics empezaron mandando en un primer periodo en el que se fueron con nueve puntos de ventaja (22-31), atacando incansablemente la pintura de los Heat y anotando 18 puntos en la zona por solo 4 de su rival, que adem¨¢s perdi¨® 5 balones solo en el primer cuarto (por solo uno de los verdes). En ese mismo apareci¨® Hayward, un regreso apalabrado entre Stevens y sus cuatro lugartenientes en esa famosa charla y con una restricci¨®n de minutos relativa (disput¨® 30). Con 6+5+4+3+1 acab¨® el alero, algo oxidado pero sabiendo romper la zona al instante, esa quimera que tantos estragos caus¨® en la ofensiva bostoniana en el duelo anterior. Hayward, que disput¨® su primer partido como suplente de toda la temporada, ya ha dejado caer que no va a ausentarse de la burbuja para el nacimiento de su hijo, una losa que le podr¨ªa dejar sin jugar y para la que ha recapacitado en el mes que ha estado de baja. Con su presencia y el buen hacer de los titulares, los Celtics se marcharon al descanso 13 arriba (50-63), defendiendo bien a Dragic y Butler e impidiendo que Duncan Robinson (del que han sabido aprovechar su debilidad defensiva) les metiera triples a mansalva como en el segundo encuentro. En el ¨²ltimo encuentro anot¨® 6; en este, se ha quedado en cuatro, pero solo llevaba uno al descanso, y el encargado de sostener a los de Florida fue un Herro que explot¨® con 16 tantos en el segundo periodo. Mientras tanto, Jaylen Brown se iba al descanso con 17 puntos y Tatum hac¨ªa de todo: 13+8+7. Y los Heat se iban ya a 8 p¨¦rdidas.
Eso s¨ª, los verdes entraban al tercer cuarto como si fuera camino al infierno, acord¨¢ndose de 37-17 que recibieron en el segundo partido de parcial. Esta vez, las cosas fueron distintas, con los verdes centrados mientras recib¨ªan las embestidas de un rival que quiso pero no pudo. La ventaja hab¨ªa crecido para los te¨®ricos visitantes (te¨®ricos porque no hay ventaja de campo) con 12 minutos por delante (74-89) y con un Tatum que fue el factor diferencial de los suyos, con 25 puntos, 14 rebotes y 8 asistencias (solo una en toda la segunda mitad), transmitiendo calma y consiguiendo ser la soluci¨®n a una ofensiva celtic que, en esta ocasi¨®n, s¨ª consigui¨® atacar la zona y frenar al rival en ataque. Al menos hasta el final, cuando Miami despert¨® y volvi¨® a meter el miedo en el cuerpo a un equipo que hab¨ªa llegado a ir 20 arriba minutos antes. En 65 a?os de historia, los Celtics han ido 12 o m¨¢s puntos por delante en el ¨²ltimo cuarto 157 veces, 158 con la de esta noche. Y las han ganado todas... menos el primer partido ante Miami. De nuevo, fantasmas, sobre todo cuando Duncan Robinson enchufaba tres triples en poco m¨¢s de tres minutos y Adebayo, enorme hoy (27+16), torpedeaba la zona aprovech¨¢ndose del quinteto peque?o de Stevens, su favorito (Kemba-Smart-Tatum-Brown-Hayward), que funcion¨® todo el partido y tuvo ligeras dudas al final.
El cuarteto m¨¢gico de Stevens
Esta vez, los Celtics no se dejaron remontar. Una falta flagarante a Brown en ataque daba dos tiros y posesi¨®n a los Heat, que se colocaban a cinco (104-109) con un minuto para el final, gracias a un tiro libre de Robinson (fall¨® el otro) y a una r¨¢pida canasta del omnipresente Adebayo. Boston resolvi¨® desde la l¨ªnea de personal y no lleg¨® a ver a su rival a menos de una posesi¨®n, con Smart lanzando seis tiros libres sin fallo en los ¨²ltimos minutos y llegando a los 20 puntos. Una barrera que, adem¨¢s de ¨¦l y Tatum, superaron Jaylen Brown (26+7+5+3, enorme partido el suyo) y Kemba Walker (21 puntos con 50% en tiros de campo y en triples), que se olvid¨® de sus malas series de tiro de los ¨²ltimos encuentros. El cuarteto m¨¢gico de Stevens. Adem¨¢s, Grant Williams se postul¨® como un defensor v¨¢lido ante Adebayo en ciertos momentos, aunque la clave estuvo en la defensa colectiva de los Celtics, que provoc¨® 13 p¨¦rdidas (ellos tuvieron una m¨¢s, ojo con eso) y dej¨® a su rival en 12 de 44 en triples (un 27,3%). Y 2 de 10 en tiros de campo (y en triples) para Crowder, 2 de 10 tambi¨¦n para Dragic (1 de 5 en triples), y 4 de 12 desde el exterior para un Herro que apareci¨® en el segundo cuarto, pero anot¨® solo 6 puntos m¨¢s de forma combinada en los otros tres para 22 totales. Butler, por cierto, 17+8+3, con 2 tapones, apareciendo al final pero tarde y sin ser ese hombre clave que rob¨® balones important¨ªsimos en el duelo anterior.
Los Celtics siguen vivos. Con 22 a?os, Tatum ha sumado su cuarto partido con al menos 25+10+5, el que m¨¢s antes de cumplir los 23 junto a LeBron James desde 1965. Y el juego coral, con los cuatro jugadores de la ya famosa charla de Stevens, superando la veintena (92 puntos de forma combinada entre los cuatro, con un 52,4% en tiros de campo, 7 de 19 en triples y 19 de 22 en tiros libres), da una vida extra a un equipo que deber¨¢ volver a sufrir, aparentemente m¨¢s, para igualar el mi¨¦rcoles la eliminatoria y no irse con un 3-1 abajo que solo ha sido remontado 13 veces en la historia. Las dos ¨²ltimas, ya se sabe, por los Nuggets. Pero claro, tampoco se van a agarrar a eso en Boston. El com¨²n denominador de los tres partidos es que ha contado con ventajas de los Celtics lo suficientemente grandes para llevar el partido controlado hasta el final; en dos, no lo han conseguido, pero en este ¨²ltimo s¨ª. A priori, parecen tener m¨¢s argumentos que sus rivales para hacerse con una serie en la que van por detr¨¢s, pero con una mente brillante como la de Spoelstra y sus dificultades para cerrar los partidos, todo puede pasar. La situaci¨®n es mejor que ayer, pero igualar la eliminatoria y empezar una nueva serie dentro de la serie a cinco partidos puede favorecerles llegando en una din¨¢mica ascendente. De momento, 2-1 y los Celtics siguen vivos. Menos que sus rivales pero vivos, al fin y al cabo. Y, ya se sabe, mientras hay vida hay esperanza.