Jayson Tatum, el orgullo 'celtic' y el h¨¦roe perdido de Boston
El alero ha explotado en la segunda mitad de la temporada y se ha establecido como la referencia definitiva de una franquicia necesitada de un nuevo h¨¦roe.
?Es tan bueno Jayson Tatum, ese chico nacido en Misuri hace casi 22 a?os y que est¨¢ liderando a los Boston Celtics como de si una estrella se tratase? Es m¨¢s, ?es verdaderamente una estrella? ?Cu¨¢l es su verdadero potencial? ?Puede convertirse realmente en la cara de la franquicia m¨¢s ganadora de la historia? Son muchas las preguntas que han perseguido a Tatum desde que aterrizara en la NBA hace apenas tres temporadas. Al principio, no era m¨¢s que otra piedra angular del proyecto construido por Brad Stevens, ese t¨¦cnico de Indiana que estaba demostrando saber mucho m¨¢s que lo que demostraba su aspecto de joven estudiante salido de la universidad. Y de ah¨ª venia, aunque no precisamente de estudiar. Con una incre¨ªble precocidad, hab¨ªa llegado a los mandos de la Universidad de Butler, ganando en cuatro ocasiones la Horizon League, siendo el primer t¨¦cnico que llevaba a su equipo a la final de la NCAA (algo que hizo en 2010 y 2011 cayendo ante Duke y?Connecticut) y siendo nombrado Entrenador del A?o de la conferencia otras dos veces.
Es cierto, no se nos olvida, que est¨¢bamos hablando de Tatum, pero para poder escribir sobre el alero y su incre¨ªble progresi¨®n hay que hacerlo tambi¨¦n de su descubridor, ese hombre llamado a convertirse en el pr¨®ximo Popovich en una Liga que, por cierto, todav¨ªa tiene al Popovich original (cada vez m¨¢s desdibujado) y en la que tiene un margen de mejora directamente proporcional a su extraordionaria precocidad. Es, con 43 a?os, el tercer entrenador m¨¢s joven de la Liga tras Ryan Saunders (33 a?os y en los Wolves) y Luke Walton (39, con los Kings), tiene, como curiosidad, la misma edad que el insumergible Vince Carter y es el ¨²nico de los tres ¨²ltimos nombres mencionados que va a estar este a?o en los playoffs salvo sorpresa may¨²scula en el Oeste.
Suya fue, y de Danny Ainge, la responsabilidad de construir un nuevo equipo ganador que escapara de los ¨²ltimo equipo de Boston que tuvo ese ADN celtic tan inherente como valorado en el Garden. Y suya en parte fue la culpa de llegar a las finales del Este en 2017 con un equipo cuyo jugador franquicia era Isaiah Thomas (qu¨¦ pena de historia) y volver a las andadas para rozar las Finales con gente como Jaylen Brown, Terry Rozier, Al Horford o Jayson Tatum como baloncestistas m¨¢s destacados.
Lejos queda ese Tatum que tembl¨® ante la posibilidad de ¨¦xito ante la eterna (y aternizada) sombra de LeBron James, que se coron¨® (si no lo estaba ya) en unos playoffs en los que termin¨® de forjar su alargada leyenda. En ese encuentro Tatum solo intentar¨ªa 6 tiros en el ¨²ltimo periodo merced sobre todo a las 3 faltas que cometi¨® y que le dejaron fuera del partido cuando sum¨® la sexta ya con menos de un minuto para el final y el partido en el bolsillo de los Cavs. En ese periodo, el alero fue el m¨¢ximo anotador de los suyos (anotando 9 de sus 24 puntos) pero tambi¨¦n el que peor +/- sum¨® (-9), tanto ah¨ª como en el resto de ese s¨¦ptimo encuentro (-17), en el que fue desmadejado por los nervios que atenazaron las manos de unos Celtics que llegaron a ir 15 puntos arriba pero que acabaron cayendo por primera vez en todos los playoffs en el Garden, despidi¨¦ndose de unas Finales que rozaron con la yema de los dedos. Lo dicho, LeBron.
Tatum ya no es el mismo que antes. La experiencia de la campa?a pasada junto a Kyrie y el sainete que le acompa?aba fue aleccionadora y el incipiente talento aprendi¨® que m¨¢s val¨ªa seguir a un Stevens que siempre ha estado m¨¢s c¨®modo sin estrellas monopolizadoras y unidimiensionales. Y los frutos se est¨¢n recogiendo. En la primera parte de la temporada ya hasta la derrota de los Celtics ante los Sixers, Tatum estaba en casi 21 puntos por partido. Superaba la veintena junto a Brown, ese otro descubrimiento del draft con tanto talento como su compa?ero pero con menos protagonismo en ataque y Kemba Walker, el fichaje de Danny Ainge que ha hecho olvidar al vilipendiado Kyrie.
Tras ese encuentro, el alero ha explotado m¨¢s a¨²n si cabe. Ha alcanzado una nueva dimensi¨®n en ausencia de un Walker tocado (se ha perdido 8 de los ¨²ltimos 22 partidos desde esa fecha) y se ha ido a los 28 puntos, 7 rebotes y 3 asistencias en 18 duelos. Y todo con un 52% en tiros de campo y un 47 en triples, unos porcentajes estratosf¨¦ricos para un jugador que est¨¢ lanzando 18,5 tiros por noche en todo el curso baloncest¨ªstico, cinco m¨¢s que el a?o pasado junto a Kyrie. En febrero, Tatum ha anotado 30 tantos por noche con un 50% en triples, el primer celtic que consigue esas cifras en un mes natural desde Larry Bird (nada menos) y en los ¨²ltimos 5 partidos (solo en el primero jug¨® Kemba), se ha ido a los 35 puntos y 8 rebotes, superando el 60% en tiros en todos ellos menos en uno, los 30 puntos en todos menos en uno y y¨¦ndose a los 41 contra los Lakers y esa eternizada sombra de LeBron, que ha dejado a los Celtics sin tantas y tantas oportunidades. Ante los angelinos sufrieron su ¨²nica derrota en esta ¨²ltima racha de Tatum, pero salieron con sensaciones muy positivas y con un encuentro disputado en terreno hostil que estuvieron a punto de llevarse.?
Tatum, que tambi¨¦n es el primer jugador de 21 a?os o menos con tres partidos seguidos de 30 puntos con un 60% en tiros de campo desde Shaquille O'Neal en 1994, es el l¨ªder definitivo de los Celtics. Ha disputado su primer All Star, estar¨¢ en los mejores quintetos de la Liga y sigue progresando en defensa como parte de un equipo que es el cuarto que menos puntos recibe de toda la NBA (106,5) y que a su vez tiene el mejor rating ofensivo de la era Stevens (113,5) superado el logrado el a?o pasado con esa cat¨¢strofe de temporada que tuvo m¨¢s de extradeportivo que de deportivo. Un rating que, por cierto, pasa de 109 a 116 con Tatum en pista, una diferencia casi id¨¦ntica a la de LeBron James. La influencia, desde luego, est¨¢ probada. Sobre todo, cuando sus rivales anotan 5 puntos menos por cada 100 posesiones cuando el alero est¨¢ en cancha (de 110 a 105). Casi nada.??
Solo el tiempo dir¨¢ hasta donde pueden llegar Tatum y su talento. Con 23 puntos y 7 rebotes de promedio en la totalidad del presente curso baloncest¨ªstico, sigue moldeando un juego que se perfecciona en triples (69% de acierto este mes cuando lanza de tres en step back), utiliza cada vez menos la media distancia (solo el 8% de sus tiros son desde ah¨ª por el 16 del a?o pasado) y es completo tanto en ataque como en defensa con una progresi¨®n magn¨ªfica a la que solo le falta encontrar a sus compa?eros en los espacios que genera cuando penetra. ?Es tan bueno como dicen? Parece que s¨ª. ?Es una estrella? Ser¨ªa muy atrevido afirmar lo contrarioi. ?Hasta d¨®nde puede llegar? Eso, ya lo veremos.?