DeMarcus Cousins: una promesa ca¨ªda en desgracia
El tend¨®n de Aquiles fue el principio del fin de Cousins, una de las mayores promesas de la ¨²ltima d¨¦cada. El p¨ªvot, cortado por los Lakers, sigue con su particular ca¨ªda a los infiernos.

No es oro todo lo que reluce. Ni en la vida ni en la NBA, siempre acompa?ada de una cara m¨¢s triste que la que habitualmente se muestra en televisi¨®n. Esa otra cara, muchas veces obligada a formar parte de la cultura hollywoodense que acompa?a a una competici¨®n tan cuidadosa con el relato que vende, es la que est¨¢ viviendo DeMarcus Cousins desde el 26 de enero del 2018, d¨ªa en el que se lesion¨® el tend¨®n de Aquiles. Esa rotura maldita que tantas carreras se ha llevado por delante apareci¨® en el peor momento de uno de los mejores talentos que el baloncesto norteamericano ha visto pasar en la ¨²ltima d¨¦cada. Un hombre con unas cualidades f¨ªsicas innatas, con aptitudes no siempre acordes a sus actitudes pero que se encontraba en una creciente progresi¨®n que le estaba reconciliando con el aficionado medio y empezando a convertirse en lo que en su d¨ªa promet¨ªa ser.?
Nunca es buen momento para lesionarse, pero en el caso de Cousins, la frase cobra a¨²n m¨¢s significado. Ven¨ªa de promediar 22 puntos, 15 rebotes, 7 asistencias, casi 3 robos y 2 tapones en los ¨²ltimos 8 encuentros. 24+15+6+2+2 en los ¨²ltimos 15. Y 25+13+5,4+1,6+1,6 en la que estaba siendo la temporada m¨¢s completa de su carrera, tanto en ataque como en defensa. Los Pelicans carburaban con un equipo que represent¨® el c¨²lmen del proyecto. La pareja interior que DeMarcus formaba con Anthony Davis empezaba a dar sus frutos, Rondo, otra sombra hoy de lo que en su d¨ªa fue, progresaba y la plantilla, que inclu¨ªa a gente como Jruie Holiday o E'Twaun Moore, dejaba atr¨¢s el mal juego inicial y sumaba 7 victorias en los ¨²ltimos 8 partidos.
Todo se fue al traste con la lesi¨®n del center por mucho que la franquicia llegara a semifinales de Conferencia (el tope del proyecto Anthony Davis) y le robara un partido a unos Warriors que volaban hacia el tercer campeonato en cuatro a?os que les confirmaba (si no lo estaban ya) como uno de las mejores dinast¨ªas de la historia. Ese encuentro en el que se impusieron a los campeones fue el mayor momento de gloria que los Pelicans, desmadejados al a?o siguiente con la derrotas y el sainete formado por Davis, vivieron. Un partido en el que su estrella se fue a los 33 puntos y 18 rebotes, Rondo reparti¨® 21 asistencias y los de Alvin Gentry dejaron a Curry y compa?¨ªa en apenas 100 puntos. El punto ¨¢lgido de una serie que no tuvo historia (4-1 al final) y que no cont¨® con la presencia de un Cousins que lo vio todo desde el banquillo... y que, desde entonces, solo ha sumado 38 partidos m¨¢s entre regular season y playoffs.
Mucho talento y dinero
El proyecto truncado de los Pelicans no fue lo ¨²nico que se llev¨® por delante el Aquiles de Cousins. Estrella de la Universidad de Kentucky y n¨²mero 5 del draft del 2010, el p¨ªvot arrastr¨® de su adolescencia ese car¨¢cter indomable que le hizo tener problemas con muchos de sus entrenadores. Ni siquiera George Karl, curtido en mil batallas contra Michael Jordan, Kobe Bryant y compa?¨ªa, pudo poner rectitud en su acalorada cabeza. Las 33 victorias de ese a?o fueron las m¨¢ximas que sumaron los Kings con el p¨ªvot como jugador franquicia. Un proyecto fallido m¨¢s dentro de una entidad que lleva cometiendo errores desde tiempo inmemoriables (su ¨²ltima presencia en playoffs dara del 2006, la ausencia m¨¢s larga de toda la NBA) y que no supo o no pudo manejar a un talento indudable que ha podido ser el ¨²ltimo gran p¨ªvot que ha visto la competici¨®n norteamericana.
No porque sea el ¨²nico ni porque tenga todos los atributos de lo que podemos considerar un p¨ªvot como los de antes, m¨¢s bien por ser esa ¨²ltima representaci¨®n calidad innata que hemos visto en un center. Lo que representaron en el siglo XXI primero Shaquille O'Neal y luego (en menor medida) Dwight Howard, lo ten¨ªa Cousins. Manos grandes, capacidad de intimidaci¨®n, mucho peso, fortaleza de cintura para abajo y aptitudes en ataque y en defensa. DeMarcus llev¨® su posici¨®n m¨¢s all¨¢ de los atributos tradicionales y fue capaz de jugar botando el bal¨®n, a?adiendo el triple a sus armas y haciendo gala de una visi¨®n de juego superior a la que han demostrado otros antes que ¨¦l. Adre Drummond, Rudy Gobert o Clint Capela se han postulado hoy en d¨ªa a ocupar una posici¨®n vacante y casi ausente en la NBA actual, pero ninguno de ellos ha demostrado tener la capacidad innata que Cousins ten¨ªa y con la que se acab¨® convirtiendo en la mayor promesa de una generaci¨®n que inclu¨ªa a John Wall, Evan Turner o Derrick Favors (n¨²meros 1, 2 y 3 de ese draft) y de la que acab¨® siendo la m¨¢xima referencia junto con Paul George (10).?
El Aquiles cort¨® de ra¨ªz a un hombre que lleg¨® a promediar 23+12, 24+13 y 27+12 en sus tres ¨²ltimas temporadas completas como jugador de los Kings y siendo en esas dos ¨²ltimas temporada seleccionado en el Segundo Mejor Quinteto de la NBA. Fue All Star tanto esas campa?as como en las dos siguientes, cuando, con tan solo 27 a?os, estaba explotando definitivamente. Todo cambi¨® ese fat¨ªdico 26 de enero, en el primer gran problema de un jugador cuya envergadura representaba un h¨¢ndicap en la recuperaci¨®n. Tard¨® 358 d¨ªas en recuperarse, la ausencia por lesi¨®n m¨¢s larga de la historia de la NBA. Regres¨® con los Warriors hasta que se desgarr¨® el cu¨¢driceps de la pierna izquierda (todas sus lesiones han sido ah¨ª) en primera ronda ante los Clippers y se rompi¨® el ligamento cruzado anterior de la rodilla justo cuando se acababa de confirmar su fichaje con los Lakers.?
El c¨²mulo de desgracias le ha dejado sin una suculenta cantidad de dinero que no parece que vaya a recuperar. El tend¨®n no solo se rompi¨® en su peor momento en cuanto a nivel de juego, tambi¨¦n de dinero. Estaba en el ¨²ltimo a?o de contrato (cobr¨® 18 millones en esa ¨²ltima campa?a en los Pelicans que ten¨ªa pendientes de un acuerdo anterior firmado con los Kings, con los que renunci¨® a una player option de 30 millones) e iba a salir a un mercado para optar a un contrato m¨¢ximo que pod¨ªa llegar a superar los 133 millones. Las dudas sobre su recuperaci¨®n precipitaron su llegada a los Warriors por algo m¨¢s de 5 millones y al salir tocado de La Bah¨ªa apenas acord¨® 3,5 con los Lakers... que acaban de cortarle para hacer sitio a Markieff Morris, hermano de Marcus.?
Un futuro incierto
Un cap¨ªtulo m¨¢s en una lista eterna de desprop¨®sitos que suponen una de las mayores desgracias del baloncesto reciente en cuando a lesiones se refiere. Ni siquiera se pudo llevar el anillo con unos Warriors desdibujados en la fase final por las lesiones, aunque si se quit¨® el mantra que le se?alaba como el mejor jugador de la historia que jam¨¢s ha disputado un partido de playoffs. 7,6 puntos y 4,9 rebotes con menos de un 40% en tiros de campo son la herencia que deja de su paso por la post temporada, en la que apenas pudo disputar 8 partidos, 5 como titular y con un esfuerzo sobrehumano, eso s¨ª, para disputar una Finales en las que fue todo coraz¨®n al no poder ni saltar como se le recordaba. Jug¨® visiblemente afectado, pero jug¨®. Algo es algo.
Parece que Cousins ha podido llegar a un pacto con los Lakers, franquicia a la que oficialmente ya no pertenece pero que le permite seguir entrenando, qui¨¦n sabe si a cambio de firmar por el m¨ªnimo la temporada que viene. Se rumoreaba con un posible retorno esta temporada para los playoffs y es posible que alg¨²n equipo quiera firmarle como refuerzo interior para la fase final (los pron¨®sticos iniciales eran que estar¨ªa de 6 a 8 meses de baja). Sin embargo, es complicado que el p¨ªvot, uno de los jugadores m¨¢s talentosos que han pasado por la NBA en la ¨²ltima d¨¦cada, pueda recuperar su antiguo nivel y convertirse en lo que en su d¨ªa promet¨ªa ser. Un dominador de la zona, un ¨²ltimo reducto del p¨ªvot cl¨¢sico en una Liga que no espera a nadie y en la que si caes, es muy dif¨ªcil levantarse. Que se lo digan a Cousins, esa estrella estrellada, ese talento que pudo ser y no fue...