Nadal suma ante Millman su victoria 850 y la m¨¢s contundente en Wimbledon

Dos d¨ªas antes de debutar en Wimbledon, Rafa Nadal dijo que se ve¨ªa "preparado". Un serio aviso trat¨¢ndose de un jugador que no suele presumir demasiado de su estado de forma. Pero en su estreno ante John Millman, el espa?ol ha demostrado que no iba de farol. Est¨¢ tremendo. El f¨ªsico le acompa?a, los golpes de derecha tambi¨¦n, y cuando necesita tirar de otros recursos en la imprevisible hierba (dejadas, subidas a la red, voleas...), los exhibe con calidad y precisi¨®n quir¨²rgica. As¨ª se ha deshecho del australiano, con quien jam¨¢s hab¨ªa jugado hasta este lunes, en tres sets y con bastante comodidad: 6-1, 6-3 y 6-2 en una hora y 45 minutos. En segunda ronda se enfrentar¨¢ al estadounidense Donald Young, que super¨® a Denis Istomin por retirada del uzbeko cuando le ganaba por 5-7, 6-4, 6-4 y 4-2.

Es la victoria 850 de Nadal en la ¨¦lite del tenis (suma 180 derrotas) en su partido n¨²mero 50?(41-9) en el Grand Slam londinense, donde ha firmado su mejor debut, con solo seis juegos perdidos. En 2005 cedi¨® siete en el inicio ante Vincent Spadea. En realidad es su victoria m¨¢s contundente en todas las rondas del torneo (en 2007 perdi¨® siete juegos en segunda ronda contra Werner Schauer y en 2008, otros siete en octavos ante Mikhail Youzhny). Solo seis jugadores hab¨ªan alcanzado antes 850 triunfos: Jimmy Connors (1.253), Roger Federer (1.104), Ivan Lendl (1.071), Guillermo Vilas (929), John McEnroe (875) y Andre Agassi (870).

Emocionado por su regreso al ruedo que es la pista 1 de Wimbledon, al pie de la famosa colina de Aorangi Park, el balear arranc¨® como un tiro, con rotura de saque a las primeras de cambio. Millman no reaccion¨® hasta el tercer juego, que fue el ¨²nico que se apunt¨® en el primer set.

Nadal, seguro y fino, sacando bien y subiendo solo cuando tocaba, sentenci¨® con su drive y sigui¨® firme en el inicio de la segunda manga. Con otro break, tom¨® ventaja ante un rival que aprovech¨® alg¨²n mal resto del espa?ol y se vino arriba rob¨¢ndole un juego al servicio con temple desde el fondo de la pista, donde se negoci¨® casi todo el partido. Pero la bravuconada solo le sirvi¨® para enfadar al dos veces campe¨®n en Londres y desatar su ira. Entre el 3-2 de ese segundo set y el 4-0 del tercero, el parcial fue de 7-1 para el espa?ol, que puso la directa. El ¨²nico pero, muy peque?o, es que volvi¨® a perder su saque despu¨¦s, pero ya daba igual, nadie pod¨ªa apartarle de la victoria. Una victoria que puede infundir temor en los rivales.