Desquite en la Liga
La Final Four de la Euroliga dej車 heridas abiertas en los dos colosos del baloncesto espa?ol, el Real Madrid y el Bar?a, propensas a infectarse si no se aplica una cura eficaz. La enfermer赤a dispone de la misma medicina para los dos pacientes: la Liga ACB. Pero no hay suficientes dosis para saciar a ambos. Al final del camino, dentro de un mes, s車lo habr芍 desquite y felicidad, en el mejor de los casos, para uno de ellos: el campe車n. El derrotado continuar芍 sintiendo el escozor de Belgrado. En el caso del Madrid, la desaz車n por la oportunidad perdida en la final ante el Efes, al que lleg車 a dominar durante gran parte del partido. En el caso del Barcelona, el dolor de haber ca赤do en semifinales ante el eterno rival, al que hab赤a doblado en los cinco duelos anteriores. S車lo la Liga puede paliar el tormento.
El Valencia-Baskonia, un atractivo cruce, dio el pistoletazo a la lucha por la corona. El Madrid entra en escena este mi谷rcoles, s車lo tres d赤as despu谷s de su subcampeonato europeo, frente al Manresa, un oponente que tambi谷n ha probado el sinsabor de una final continental perdida, en su caso en la Champions. Para el equipo blanco, la ACB es la 迆nica oportunidad de celebrar uno de los tres grandes t赤tulos, Euroliga, Liga o Copa, un men迆 que la pasada temporada tampoco pudo catar, por primera vez en la era de Pablo Laso. Las dos 迆ltimas Supercopas son un bot赤n demasiado escaso para un ca?車n de su calibre. El Bar?a, por su parte, debe esperar todav赤a al viernes para iniciar su eliminatoria ante el Gran Canaria, a la que llega como l赤der de la fase regular, una condici車n m芍s determinante que en Europa, porque asegura el factor cancha en semifinales y final. A diferencia del Madrid, el equipo azulgrana tiene el consuelo de haber ganado la Copa del Rey, aunque tampoco justifica un proyecto de su envergadura. Todo esto, claro, si no viene un tercer invitado a agravar las dos heridas.