La realidad del p¨¢del en Qatar
En un pa¨ªs con una capacidad casi ilimitada de inversi¨®n, los jugadores son estrellas y se invierte en formaci¨®n y grandes eventos deportivos.

La realidad del p¨¢del en Qatar es chocante. Como la propia Doha. El deporte de la pala se ha instalado esta semana en su capital para celebrar el Ooredoo Qatar Major 2022, la primera prueba del circuito Premier Padel, poniendo de relieve un contexto evolutivo donde hay m¨¢s de forma, a¨²n, que de fondo.
Porque el p¨¢del es un deporte en v¨ªas, a¨²n, de desarrollo. Precoz en el despunte, su emancipaci¨®n est¨¢ siendo vertiginosa. Tanta que, sin haber a¨²n conseguido estabilizarse en muchos escenarios, le permite llegar a nuevos territorios que, hace apenas cinco a?os, hubieran sido impensables. El claro ejemplo, Qatar, o m¨¢s concretamente Doha, una ciudad en constante construcci¨®n y que en una misma semana puede albergar el sorteo de un Mundial de f¨²tbol y un torneo de p¨¢del de grandes dimensiones.
Doha, como dec¨ªamos, acoge esta semana la prueba inaugural de Premier Padel, el circuito de la FIP y QSI, que pone de manifiesto una tendencia ya avanzada en el pasado Mundial y que, con perspectiva, no solo respond¨ªa a la mayor prueba de selecciones de este deporte, a la aparici¨®n de la afici¨®n de cada pa¨ªs o a un momento concreto del a?o.
¡°Esta no es la realidad del p¨¢del¡±, aseguraba por aquel entonces un miembro de una federaci¨®n internacional del p¨¢del tras haber finalizado ya la competici¨®n y tras varios d¨ªas conociendo el evento por dentro. Y, en el fondo, es as¨ª. Pero, s¨ª es una parte. Un prisma. Los escenarios con gran capacidad econ¨®mica han entrado en el mundo del deporte desde hace ya varios a?os en algo normalizado. Inversi¨®n y diversificaci¨®n lo llaman.
Qatar, por ejemplo, en el p¨¢del lo ha hecho con eventos de primer nivel donde hay varias pistas simult¨¢neas, transfers, ruedas de prensa de jugadores -impensable hasta ahora-, pistas de p¨¢del en centros comerciales o el primer gran estadio. El Khalifa International, con 7.000 localidades, brinda un escenario que impresiona y que, a la par, cuesta llenar.

¡°Cuando estuve aqu¨ª cinco semanas, me di cuenta que es distinto verlo en la distancia que vivirlo. Quieren ser una referencia a nivel mundial, est¨¢n completamente volcados y apuestan por la calidad. Y eso que la primera pista de p¨¢del se hizo hace 4 a?os¡±, asegura Jorge Bellmont, entrenador profesional y seleccionador de Qatar en el pasado Mundial.
Una realidad que se refleja, a la perfecci¨®n, en su m¨¢ximo exponente. Aunque el p¨¢del todav¨ªa est¨¢ por desarrollarse, los jugadores son estrellas del deporte. A la altura de otras figuras del tenis, f¨²tbol o baloncesto. Por concepto, as¨ª se les trata desde la organizaci¨®n. Pero va mucho m¨¢s all¨¢. Los jugadores ya son reconocidos, sus caras dominan las paredes del recinto deportivo y sus nombres, anglosajonizados, son pronunciados con esa mezcla de asombro y sonrisa por los primeros aficionados en un deporte que aqu¨ª todav¨ªa es de nicho y no de masas.
¡°Sir, por favor, ?c¨®mo podemos conocer a Tello y Chingotto? Es mi pareja favorita¡±, preguntaba un nervioso aficionado qatar¨ª ataviado con la indumentaria local ya entrada la noche y finalizada la jornada de octavos esperando a sus ¨ªdolos y tras recibir la noticia de que se hab¨ªan marchado ya al hotel.
Esta, una an¨¦cdota, por supuesto, es representativa de que eso ya ocurre. Tello y Chingotto, pareja 4 del torneo, componen una de las duplas m¨¢s destacadas en lo deportivo, pero no en la repercusi¨®n. Y, aqu¨ª, son ya son seguidos por un p¨²blico que, aunque minoritario, genera un gran fen¨®meno fan. Apoyado, tambi¨¦n, por parte de los residentes extranjeros. ¡°Me han regalado una camiseta de la Selecci¨®n firmada¡±, asegura un ni?o ilusionado que, parece, reside junto con su familia en Doha.

Es evidente que, de momento, el p¨¢del no es un deporte de masas aqu¨ª. Es m¨¢s, no se puede comparar con su crecimiento en seg¨²n otros escenarios como Suecia o Italia, pero en apenas cuatro a?os el p¨¢del se ha convertido en una tendencia a explotar en un pa¨ªs con una poblaci¨®n censada que apenas supera los dos millones y medio de habitantes y donde el poder econ¨®mico es de capacidad casi infinita.
¡°No te lo creer¨¢s, pero cuando se hizo la acci¨®n con Gal¨¢n, Lebr¨®n, Navarro y Di Nenno, les paraban para hacerse fotos y les reconoc¨ªan. Y no eran uno o dos. Eso no siempre pasa con el tenis¡±, asegura V¨ªctor Ruiz, coordinador general del Major de Qatar que est¨¢ organizado por Qatar Tennis Federation (QTF).
Una realidad que tambi¨¦n refleja la inversi¨®n en el propio deporte. La organizaci¨®n de eventos deportivos, algo ya habitual en el Golfo P¨¦rsico y en muchas disciplinas, ha llevado a Qatar Sports Investments a asociarse con la Federaci¨®n Internacional de P¨¢del (FIP) para un proyecto que, aseguran, vertebrar¨¢ el p¨¢del los pr¨®ximos 25 a?os con los jugadores -las jugadoras, con propuesta encima de la mesa, a¨²n no han decidido-. Un all in.
Algo que tambi¨¦n ocurre con la formaci¨®n. En Doha son muchos los perfiles t¨¦cnicos que son seducidos con grandes proyectos en nuevos y lujosos clubes para que pasen una larga temporada formando y entrenando a ese nicho catar¨ª que se ha enamorado del p¨¢del.
Habitual es que entrenadores, t¨¦cnicos y jugadores j¨®venes con aspiraciones se vayan a vivir la experiencia catar¨ª con unos salarios suculentos y unas posibilidades deportivas y extradeportivas imposibles fuera de all¨ª donde el dinero es una fuente casi inagotable de riqueza e inversi¨®n.
¡°Mi familia no se quiere volver¡°, afirma Ramiro Choya, uno de los mejores entrenadores profesionales de la historia reciente del p¨¢del y que se mud¨® a Doha hace poco m¨¢s de un a?o para emprender nuevos proyectos deportivos dada su dilatada y contrastada experiencia.
Una apuesta por el deporte que se?ala a Qatar como uno de los nuevos escenarios del p¨¢del. Al igual que ha ocurrido en otras disciplinas. Guste o no, los posibles, los tienen. Es evidente, por supuesto, que las limitaciones van impl¨ªcitas.