La dicotom赤a que enfrenta Soler y el fen車meno del 'Chimy'

El doble papel
No hay dos equipos iguales, ni los habr芍. Los hay que se parecen, y tambi谷n los que se diferencian de forma notoria en muchos registros del juego. Es lo que sucede con el Valencia y la Selecci車n, donde Carlos Soler (25 a?os) se acomoda a ambos lugares con la naturalidad del que siente lo que hace. Con Bordal芍s act迆a como lanzador, especialista en el bal車n parado, protagonista de movimientos de ruptura a la espalda y llegadas continuas. No necesita amasar la posesi車n, como se vio ante el Granada. Con 37 toques de bal車n le alcanz車 para dar dos asistencias de estrategia y rubricar su fiabilidad desde el punto de penalti. En la Selecci車n, donde su presencia en el Mundial gana cr谷dito, tambi谷n mueve con criterio la pelota y llena el 芍rea, pero Luis Enrique se sirve de las capacidades organizativas y din芍micas de Soler de otra forma. Como interior mixto que es, prevalece su recorrido y persistencia, adem芍s de habilitar espacios a los compa?eros con sus movimientos entre l赤neas. Luis Enrique reconoce en Soler las mismas virtudes que Bordal芍s, pero las da un uso distinto. Lo mejor de todo es que el rendimiento del valencianista ofrece la misma autenticidad y tiene el mismo valor juegue donde juegue. A Soler no le afecta el cambio de estilo.
Fen車meno del trabajo
Los infortunios m芍s delicados que aquejan al futbolista no han podido con el Chimy ?vila (28 a?os), inasequible al desaliento. Extremadamente luchador, no le aflige la soledad del delantero cuando el planteamiento desplaza a su equipo hacia su propio campo. La victoria de Osasuna sobre el Villarreal llev車 su nombre en el gol despu谷s de efectuar un trabajo incansable, a veces poco rentable, para dar salida a su equipo, dominar el 芍rea rival y no parar de correr con y sin bal車n. Con una posici車n media tan baja de Osasuna, alrededor de los 43 metros, el argentino sac車 la cabeza por el bloque. En el 1-4-4-2 inicial, le toc車 pelear un sinf赤n de disputas en las que estaba condenado a la derrota. Cuando Arrasate opt車 por el 1-4-3-3, carg車 desde una zona m芍s liberada y arrebat車 la amplitud que ten赤a Estupi?芍n por esa banda en los ataques del Villarreal. En muchos aspectos, su partido demostr車 que es m芍s que un delantero. Nunca dimite de sus obligaciones aunque el desaf赤o sea may迆sculo. Ante el Villarreal se mereci車, como tantas veces, el premio que en esta ocasi車n s赤 tuvo.
El regateador que decide mejor
A Idrissi, de 26 a?os, siempre se le ha tenido por un jugador diferente. Claramente, debido a su manera de entender el juego, lo es. Desde que lleg車 al Sevilla, ahora cedido en este C芍diz que no se da por vencido, se ha mostrado m芍s como un futbolista de escaparate que como un jugador en el que un entrenador puede confiar. Su car芍cter individualista y disperso hab赤a restado m芍s al colectivo que otra cosa. Por eso necesitaba un encuentro como el del Rayo. No solo asisti車 a Alcaraz y firm車 la sentencia, en un remate que pod赤a haber ajustado menos, dicho sea de paso, sino que se apoy車 en el equipo para ser un elemento de desequilibrio ofensivo continuo. Cuando ten赤a que pasar, pas車; cuando ten赤a que regatear, regate車. No se trata de que Idrissi niegue su identidad de encarar constantemente al rival (intenta un regate cada 15 minutos), pero s赤 que lo haga en favor del equipo.