Fue el COVID, en la cocina, con un candelabro
En el f¨²tbol hemos tenido que pasar de explicar los fueras de juego a explicar las cuarentenas. El pasado viernes me encontr¨¦, cartab¨®n y escuadra en mano, tratando de calcular qu¨¦ jugadores de mi Biwenger llegaban a la fecha del partido de esta jornada en funci¨®n del d¨ªa de la notificaci¨®n de sus contagios por COVID. Pero claro, al desconocer si eran o no asintom¨¢ticos y, por tanto, si ten¨ªan que alargar o no sus confinamientos, el c¨¢lculo era imposible. En definitiva, mi Biwenger ha lucido m¨¢s interrogaciones que el Whatsapp de una madre con su hijo.
Los futbolistas van casi siempre a contracorriente de la vida. Much¨ªsimas personas confinadas han agradecido este fin de semana que haya vuelto la Liga para resolver parte del obligado tedio, salvo los propios jugadores confinados. El f¨²tbol es un juego, pero tambi¨¦n es un elemento integrado e integrador de la sociedad y en todo lo que en ella sucede. Y por eso la pandemia la lleva sacudiendo desde que hace dos a?os nos llegaron las primeras noticias de que en China hab¨ªa casos de una neumon¨ªa m¨¢s agresiva de lo normal.

Entramos en la jornada con Xavi Hern¨¢ndez apelando al sentido com¨²n y pidiendo que no se jugase el Mallorca-Bar?a por las bajas que acumula su equipo, nueve por COVID. Tantos otros equipos ten¨ªan cifras similares. Todo aficionado al f¨²tbol es disc¨ªpulo involuntario de Agatha Christie: como aficionados nos gusta la trama, pero sobre todo gusta el suspense, concretamente el ajeno, el que no afecta a nuestro equipo. Nos gusta lanzarnos a la imprevisibilidad. Perdi¨® el Real Madrid, con Vinicius confinado, sin el que todo es considerablemente m¨¢s aburrido. Perdi¨® el Rayo sin Catena. Pero gan¨® el Atl¨¦tico, sin Jo?o Felix o Koke. Gan¨® el Celta, con una defensa circunstancial plagada de ausencias por el virus. O marc¨® Luuk de Jong a pase de Mingueza, rodeado de p¨²beres; ni se sabe a cu¨¢nto se pagar¨ªa esto en las apuestas. En esta jornada 19, de un lado o del otro, siempre se podr¨¢ decir que el culpable fue el COVID, en la cocina, con un candelabro.