El pan de los ricos
"La t¨¦cnica es el pan de los ricos y la t¨¢ctica el pan de los pobres", dec¨ªa Carletto Mazzone, seguramente antes de dar media vuelta y gru?irle a alg¨²n lateral demasiado alegre por perderle la cara a su marca. Pens¨¦ en ello durante el transcurso del Inter-Madrid, el jugoso arranque de la Champions League que nos brindaron ambos equipos el mi¨¦rcoles. Con la contundencia de Lukaku descansando en alg¨²n sof¨¢ londinense, el Inter se aferr¨® al brillante trabajo t¨¢ctico de Simone Inzaghi. El Real Madrid amas¨® harina y agua durante la mayor parte del encuentro, pero encontr¨® el pan a ¨²ltima hora, en una jugada de rara belleza. La juventud de los tres jugadores que la trenzaron, Valverde, Camavinga y Rodrygo, nunca anticipar¨ªa una madurez t¨¦cnica y emocional de ese calibre.
Me impresion¨® la propuesta de Simone Inzaghi en el arranque. El t¨¦cnico italiano, eterno hermano a la sombra de SuperPippo, apenas ha dirigido nueve partidos de Champions, pero su Inter se despleg¨® con una inteligencia t¨¢ctica y ¨¦tica superior. La valent¨ªa en la presi¨®n de sus carrileros, la capacidad para defender con tres o cuatro piezas, cambiando de piel seg¨²n lo requiera el juego o la audacia para activar a Barella, incluso orillado en la banda derecha, exaltan la pizarra de Inzaghi. La ¨¦tica del equipo se apreci¨® en su fiereza para recuperar cada bal¨®n dividido hasta que le dur¨® la gasolina. Por la banda del Meazza camina un gran entrenador.
Nils Liedholm sol¨ªa decir que entrenar ser¨ªa el mejor trabajo del mundo si no hubiera partidos. El f¨²tbol, imprevisible como solo puede serlo un deporte que se juega con la parte menos noble del cuerpo, le reserv¨® a Carlo Ancelotti un reto inesperado. El Madrid pudo perder el duelo en esos diez metros de menos que Casemiro, su jugador m¨¢s fiable, no le com¨ªa a Brozovic en la primera mitad. Carletto entendi¨® el desajuste tarde, pero lo corrigi¨® en la segunda mitad. El estratega italiano avanz¨® y orden¨® el rompecabezas para que el Madrid pudiera encontrar mejor abrigo y m¨¢s salida hacia Casemiro y Rodrygo. Acabaron con mucha fuerza los blancos, anticipando que hay vida sin Mbapp¨¦, claro, incluso para competir en los grandes escenarios.