Pedalear entre las provincias de Valencia y Alicante

Si hace unos d¨ªas ten¨ªamos una ruta accesible y para todos los p¨²blicos al norte de la Comunitat Valenciana, esta vez os traigo algo un poquito m¨¢s ¡®heavy¡¯. Una propuesta larga y con un desnivel que, sin ser extremo, s¨ª exige ya una condici¨®n importante. Y vamos a tocar parcialmente las otras dos provincias: Valencia y Alicante.

Un trazado que deja poco espacio para el plano y, pese a no tener puertos enormes, s¨ª que discurre por un territorio de ¡®guerrillas¡¯ donde apenas hay descansos. Esta vez vamos a empezar en la ciudad valenciana de Gand¨ªa, con sus 75.000 habitantes. Desde all¨ª vamos pedaleando hacia el l¨ªmite provincial en direcci¨®n Sur hasta llegar a Oliva. Estamos, por cierto, en un territorio habitual de entrenamientos y operaciones para los equipos profesionales.

Hacer esta ruta poco antes o poco despu¨¦s de Navidad implica encontrarse a una nutrida representaci¨®n del pelot¨®n WorldTour, entre ellos no pocos de los mejores ciclistas del mundo, que utilizan esta zona para su puesta a punto por el buen clima y las comunicaciones existentes.

Seguimos a lo nuestro y, desde Oliva, nos metemos hacia Pego para entrar ya en la provincia de Alicante buscando el pueblo de Vall de Laguart, que nos llevar¨¢ al primer puerto del d¨ªa: el coll de La Garga, con sus casi 11 kil¨®metros de ascensi¨®n a una media del 6%... que enga?a, porque los ¨²ltimos tres kil¨®metros esconden rampas de hasta el 18% y hay m¨¢s de mil metros al 10% de media. Desde El Campell hasta La Vall de Laguar.

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Descendemos despu¨¦s brevemente hasta Castell de Castells, lugar conocido por sus ¡®Arcs¡¯. Una maravilla de la naturaleza. Desde ah¨ª vamos hasta T¨¢rbena por el Puerto de Sa Creueta, ni mucho menos tan duro como el anterior. Precisamente en la localidad de T¨¢rbena comenzamos ya el descenso en direcci¨®n al mar y nos vamos a adentrar en el Parque Natural de Pego y Oliva, con sus caracter¨ªsticos arrozales. Subiremos la ¡®tachuela¡¯ del Monte Pego y luego nos encaminamos de nuevo hasta Gand¨ªa.

Ya casi al final de la cabalgada, tendremos un ¡®bonus track¡¯ llegando a Gand¨ªa con la subida a La Drova, un alto cortito -3,2 kil¨®metros al 7%- pero que con la kilometrada que llevaremos y sus rampas de hasta el 10% se pueden atravesar a cualquiera. La vista arriba, eso s¨ª, merece la pena: la vista del Real Monasterio de Santa Mar¨ªa de Valldigna, con el mar de tel¨®n de fondo detr¨¢s de extensas plantaciones de naranjos. De ah¨ª ya haremos el rodeo hasta Tabernes de Valldigna para volver, ya de forma definitiva y en plano, otra vez a Gand¨ªa.

As¨ª que ah¨ª ten¨¦is un rato de entretenimiento, pasando desde una de las costas m¨¢s transitadas de nuestro pa¨ªs hasta monta?as no voy a decir desconocidas, pero sin duda s¨ª que con carreteras serpenteantes, curvas de herradura y poco tr¨¢fico rodado. Un para¨ªso para el ciclista con buen clima y un terreno exigente. ?A disfrutarlo!