El ejemplo de Teresa Perales
Uno de los primeros reportajes a doble p芍gina que escrib赤 en mis inicios en el AS fue sobre Antonio Rodr赤guez, To?ejo, quien despu谷s de quedarse parapl谷jico en un accidente de quad, no se rindi車 y volvi車 a competir en motos de agua hasta proclamarse campe車n de Espa?a. Recuerdo una frase de To?ejo: ※La silla de ruedas se lleva en el culo, no en la cabeza§. Eran los a?os 90. Y desde entonces he escuchado esas mismas palabras como un mantra en boca de muchos que han vivido una situaci車n similar. Una de esas personas es Teresa Perales, que tuvo que reinventarse a los 19 a?os cuando una neuropat赤a acab車 con su movilidad en las piernas. Teresa, siempre con su deslumbrante sonrisa, se ha convertido en uno de los grandes nombres del deporte espa?ol, con 26 medallas en Juegos Paral赤mpicos: siete oros, nueve platas y diez bronces. Michael Phelps, el m芍s laureado en Juegos Ol赤mpicos, tiene 28. Perales mira la marca del Tibur車n de Baltimore con ojos golosos. ※Yo soy muy ma?ica§, dice la zaragozana de 45 a?os para recalcar su perseverancia. La misma que ha tenido en la vida.
Teresa Perales no fue elegida este mi谷rcoles Premio Princesa de Asturias de los Deportes por su brillante palmar谷s, al menos no s車lo por eso. Tampoco por su proyecci車n internacional, otra de las aspiraciones hist車ricas de este galard車n. Teresa ha recibido este honor por ese tes車n que le ha llevado a derribar barreras, por el mismo 赤mpetu que puso el d赤a de su boda para entrar andando en la iglesia con un vestido de cola y unas ortesis bitutores, apoyada en el brazo de su hermano. El premio y su ejemplo lanzan un mensaje n赤tido a las personas con discapacidad, que a su estela saben que pueden superar cualquier adversidad. Tambi谷n a las mujeres deportistas. ※Se lo dedico a los que tienen dudas§, dijo la nadadora tras conocer la noticia. Porque la silla de ruedas se lleva en el culo, no en la cabeza.