Los Hispanos ya fluyen
Jordi Ribera, el seleccionador espa?ol, dijo antes del decisivo partido ante T迆nez que a Espa?a le estaba ※faltando la fluidez del 迆ltimo Europeo§ durante el presente Mundial. Una explicaci車n puede ser que los jugadores, ya veteranos, tienen un a?o m芍s que entonces,?cuando se colgaron el oro, y que incluso alguno de ellos ha estirado una temporada su retirada para poder participar en los Juegos Ol赤mpicos, como es el caso de Ra迆l Entrerr赤os. Pero es una teor赤a facilona. De hecho, si los Hispanos han salvado esta primera ronda ha sido precisamente porque han suplido la falta de chispa con la experiencia. El propio Ra迆l, a sus casi 40 a?os, ha tirado del carro en situaciones delicadas ante Brasil y Polonia. Esa congesti車n en el juego y en la resoluci車n, que se ha combinado tambi谷n con momentos de lucidez, seguramente est谷 m芍s relacionada con la irregular preparaci車n del equipo a causa de la pandemia y del temporal Filomena, que s車lo han permitido la disputa de un partido previo ante Croacia y que han alterado viajes y entrenamientos m芍s de la cuenta.
Aun as赤, la Selecci車n avanza invicta y con la sensaci車n de crecimiento, como si estos primeros tres partidos, dos de ellos de extremo sufrimiento, hubieran servido para terminar de ensamblar las piezas. Espa?a recuper車 al fin la soltura ante la an芍rquica T迆nez en un choque determinante que necesitaba al menos igualar para acceder a la ronda principal. No s車lo ha logrado el objetivo, sino que se clasifica con su marcador m芍s c車modo (36-30) y como l赤der de su grupo. El 迆nico inconveniente est芍 en aquel empate inicial ante Brasil, que obliga a pasar con tres puntos en lugar de cuatro. Los tropiezos se arrastran, pero lo importante es que los Hispanos ya fluyen, empiezan a tomar ritmo, y todav赤a hay Mundial por delante. Es m芍s: hay Mundial y hay Juegos. Dos balas de oro en el horizonte de una generaci車n deslumbrante.