Las ¡®Pink Panther¡¯ de Ra¨²l G.B.
Antes de arrancar el duelo entre los chavales del Madrid y de la Juve, me llam¨® la atenci¨®n un mensaje de apoyo a los bianconeri puesto en su cuenta de Twitter: "Tutti con i nostri ragazzi!". No necesita traducci¨®n. Me tranquiliz¨® un plano televisivo con Ra¨²l Gonz¨¢lez Blanco en el banquillo. Pens¨¦ en voz alta: "Con Ra¨²l no hay ragazzi, hay hombres". Y as¨ª fue. Ni quedarse con s¨®lo diez jugadores a poco de empezar y con 1-0 en contra (Jordi Mart¨ªn ya sabe lo que no debe volver a hacer si quiere triunfar en el Madrid) amilan¨® a las Panteras Rosas de Ra¨²l. Una defensa bien colocada y con coraje, un centro del campo agresivo y con buena pierna, y unos chavales arriba que son r¨¢pidos y muy verticales. Un equipazo.
Disfrut¨¦ con la just¨ªsima remontada, que pudo ser mayor en la segunda parte de no ser por dos intervenciones del portero italiano. La Juve, con superioridad, apretaba, pero no ten¨ªa el partido metido en la cabeza. Todo lo contrario que Pablo Ram¨®n y V¨ªctor Chust, dos centrales expeditivos y siempre bien colocados. O el liderazgo de Antonio Blanco en la medular. Con ese apellido est¨¢ bendecido. Y muy bien Arribas y Latasa dando batalla y dolores de cabeza a la zaga juventina. Quedaron 1-3 y pudieron ser m¨¢s. Una remontada que hubiese firmado el Ra¨²l futbolista. El Inter, pr¨®ximo reto para las Pink Panther de Ra¨²l G.B.