El 2-8 pone en valor la 10, 11, 12 y 13 del Madrid
El 2-8 no aconteci¨® en cualquier sitio. Fue en Lisboa, en el estadio Da Luz. El para¨ªso de la D¨¦cima y del inolvidable cabezazo de Sergio Ramos en el minuto 93. Ello simboliz¨® el m¨¦rito estimable que tiene el ciclo exitoso que el Madrid ha completado estos a?os atr¨¢s en Europa, que quiz¨¢s no se hubiese valorado como merece sino llegar a ser por este 2-8 brutal e inmisericorde del Bayern al Bar?a... de Messi.
Recuerdo que cuando el Madrid conquist¨® las tres Champions seguidas con Zidane en el banquillo (la 11, la 12 y la 13) se lleg¨® a decir que, pese a todo, el equipo no ten¨ªa un estilo definido de juego, que si la flor de Zidane, que si los goles de Cristiano tapaban las deficiencias, que hab¨ªa equipos que ofrec¨ªan mejor espect¨¢culo... Todo eso lo ha ido aguantando el madridista con paciencia y templanza. Puede que sea algo de envidia, puede que cueste reconocer los m¨¦ritos de un equipo hegem¨®nico...
Recuerdo que nada m¨¢s conquistar la 13? en Kiev, Sergio Ramos se dirigi¨® a las c¨¢maras de Realmadrid TV y dijo: "Tres seguidas y cuatro en cinco a?os ya es algo m¨¢s que una buena racha, es una dinast¨ªa". S¨ª, el Madrid lo logr¨® en el arranque de la Copa de Europa (1956-60) y lo ha repetido en estos ¨²ltimos tiempos. Ganar una Champions cuesta un ri?¨®n (que se lo digan al City, al PSG o al Atleti, que siguen sin estrenarse). Pues imaginen el valor de lograr cuatro en cinco a?os. Una haza?a.
Cuando iban cay¨¦ndole goles a Ter Stegen en el vapuleo de Lisboa imaginaba lo que hubi¨¦ramos dicho los madridistas si llega a ocurrirnos algo similar. No quedar¨ªa piedra sobre piedra. Esa autocr¨ªtica brutal que distingue al club blanco y su exigencia fan¨¢tica es lo que le ha permitido sobrevivir con grandeza y t¨ªtulos a cualquier rev¨¦s del destino. En cualquier caso, a mi Madrid no recuerdo que le hayan metido en Europa m¨¢s de cinco goles nunca (una vez con el Hamburgo en las semifinales de 1980 y tambi¨¦n con el Mil¨¢n de Sacchi en 1989, as¨ª como un 5-0 con el Kaiserslautern en la extinta Copa de la UEFA). Cierto que tambi¨¦n el Bayern amarg¨® a los blancos m¨¢s una noche (se le apod¨® La Bestia Negra). Eso explica que el 0-4 del Madrid al Bayern de Guardiola supiese a gloria. Inolvidable.

Pero el 2-8 sirve tambi¨¦n para recordar que el Bar?a lleva s¨®lo una Champions en los ¨²ltimos nueve a?os, la de 2015 conquistada con Neymar como estrella azulgrana. Esos batacazos que han acumulado los cul¨¦s en Europa a partir de ah¨ª (2-0 ante el Atleti, 3-0 ante la Juventus, 3-0 en Roma, 4-0 en Anfield, 2-8 en Lisboa...) reflejan que la Champions es una monta?a dificil¨ªsima de escalar. Ahora se empieza a ver con perspectiva justa y coherente la gesta protagonizada por el Madrid en estos tiempos recientes.
Cierto que all¨ª estaba Cristiano. Pero desde que se fue el portugu¨¦s, el Madrid ya ha ganado una Liga (la 34 ha tenido mucho m¨¦rito por razones de todos conocidas), un Mundial de Clubes y una novedosa Supercopa de Espa?a.
A diferencia del Bar?a, el Madrid tiene una econom¨ªa s¨®lida que le permite seguir estando como club deportivo m¨¢s valorado, tanto a nivel institucional como deportivo. Nuestro t¨¦cnico no corre peligro y tiene cr¨¦dito sobrado, la pol¨ªtica de fichajes j¨®venes le permite apuntalar el futuro y aqu¨ª en vez de hablar de elecciones platicamos sobre el modern¨ªsimo Bernab¨¦u que vamos a disfrutar dentro de a?o y medio. El Madrid est¨¢ navegando con firmeza y el Bar?a en aguas turbulentas. Bayern, no te imaginas la alegr¨ªa que nos has dado.