La carta a los reyes
Terminada la temporada ¡ªa falta del l¨ªo en Segunda¡ª, toca pensar en la siguiente. Supongo que los entrenadores habr¨¢n enviado ya a sus respectivos directores deportivos su lista de fichajes so?ados. Me los imagino con la misma ilusi¨®n con la que escrib¨ªan de ni?os la carta a los Reyes Magos, aunque con una diferencia: en lugar de jurar haber sido buenos este a?o, prometen serlo la temporada siguiente. Siempre y cuando, claro, sus deseos sean cumplidos.
Para los mandamases del ¨¢rea deportiva tiene que ser dif¨ªcil. Tiendes la mano, y el hombre que t¨² has puesto ah¨ª te desliza un papel con los nombres de Pogba, Mbapp¨¦, Sterling y Van Dijk. A ver c¨®mo respondes a eso. Uno de los grandes retos de la paternidad es conseguir que el juguete educativo que t¨² has dejado bajo el ¨¢rbol no rompa el coraz¨®n de tu hijo, que pidi¨® a los Reyes una ametralladora de bolas de espuma.
Para los jugadores ¡ªlos juguetes de esta historia¡ª el mercado abierto es un momento de oportunidades y riesgos. La mayor¨ªa se mantendr¨¢n donde est¨¢n. Algunos decidir¨¢n cambiar de aires. Otros ver¨¢n c¨®mo terceras personas deciden por ellos y se ver¨¢n obligados a buscarse la vida en otra parte. A m¨ª, que me duele la tripa de puro nervios la noche previa a emprender un viaje de dos d¨ªas fuera de casa, se me antoja que tiene que ser dif¨ªcil tomar esa decisi¨®n: d¨®nde desarrollar una carrera que depende tanto del azar, al tiempo que arrastras contigo a tu familia a esa nueva aventura.
Una vez, un jugador profesional que hab¨ªa quedado libre, me dijo que ten¨ªa una oferta de Rusia. Por c¨®mo me mir¨®, entend¨ª que anhelaba mi respuesta para comprobar si le felicitaba o le daba el p¨¦same. El Football Manager es muy f¨¢cil, pero la vida es jodida. Y m¨¢s en tiempos de COVID. De las decisiones tomadas en verano ¡ªpor voluntad o porque las circunstancias han obligado¡ª depende el futuro del jugador. Como en?Elige tu propia aventura, pero sin posibilidad de volver p¨¢ginas atr¨¢s.