La F1 recupera la vieja normalidad
El Mundial de F車rmula 1 recuper車 la vieja normalidad con un doblete de Mercedes: Lewis Hamilton, ganador, y Valtteri Bottas, segundo. El mismo resultado que se dio seis veces el a?o pasado, y otras tres en la secuencia contraria. La escuder赤a alemana se mantiene la m芍s fuerte y Hamilton es un piloto excepcional. Ambas cosas son sobradamente conocidas. Pero en este at赤pico regreso de la F1, los antecedentes hab赤an puesto sobre la mesa nuevos ingredientes que auguraban vibrantes escenarios. El GP de Austria, hace una semana, hab赤a ofrecido un espect芍culo rico en alternancias y emociones y un podio sorprendente con Charles Leclerc y Lando Norris, detr芍s de Bottas. La clasificaci車n de este s芍bado, en el mismo circuito de Spielberg, hab赤a aupado tercero a Carlos Sainz bajo la igualitaria lluvia. Pero el agua desapareci車. Y el orden se restableci車. Eso devolvi車 a Max Verstappen como 迆nica oposici車n potable. Porque no hay m芍s. Los Ferrari andan poco, con una bajada de nivel que no tiene nada de normalidad, nueva o vieja, y adem芍s son capaces de anularse entre s赤.
El accidente entre Leclerc y Vettel en la primera vuelta contrasta con la disciplina existente entre Norris y Sainz en McLaren. Ambos tienen permitida la pelea limpia, salvo que haya consignas contrarias. Y las hubo. El espa?ol, lastrado por una desastrosa parada de m芍s de siete segundos, tuvo que dejar pasar al brit芍nico, que recogi車 heridos por el camino hasta alzarse a la quinta plaza. Esa era la posici車n realista que ten赤a que haber ocupado Carlos. Sin la lluvia que le situ車 tercero, fue superado en los lances iniciales por el Mercedes de Bottas y el Red Bull de Albon, coches de otra liga. En la lucha con la clase media s赤 podr赤a haberse defendido, pero el error de los mec芍nicos le dej車 fuera de juego. Ni siquiera sirvi車 de consuelo la vuelta r芍pida final. El talento no es suficiente cuando falla el grupo.