A prop車sito de un h谷roe
Ayer el VfB Stuttgart logr車 el ascenso a la Bundesliga en la 迆ltima jornada. Tras un a?o fuera del primer nivel, el club de Baden-W邦rttemberg regresa a la m芍xima competici車n con ilusi車n renovada. El gran responsable del 谷xito es su director deportivo, Thomas Hitzlsperger.
Antes de dirigir al club, Hitzlsperger devino leyenda como jugador, ganando la Bundesliga en 2007, con aquel hist車rico plantel en el que tambi谷n destacaban Sami Khedira, Cacau y Mario G車mez. Este 迆ltimo, por cierto, volvi車 al club tras recorrer medio mundo y marc車 un gol ayer.
Rudo centrocampista defensivo, a Hitzlsperger le apodaban El Martillo por su tremendo disparo lejano. Quiz芍 por ello jug車 tambi谷n en el West Ham. Pero en Inglaterra despunt車 en otro club con los mismos colores: el Aston Villa.
En 2017, en un encuentro sobre diversidad organizado por la FIFA, Clarence Seedorf pregunt車 a Hitzlsperger si era realmente necesario que afirmara su orientaci車n sexual. Cabe recordar que Thomas Hitzlsperger es gay. Sali車 del armario en 2014, tras terminar su carrera deportiva. El alem芍n le respondi車 con un argumento de peso: todos explicitamos nuestra orientaci車n sexual en el d赤a a d赤a, pero con diferente reacci車n de la sociedad. "Los medios de comunicaci車n decidieron que mi sexualidad es noticia, no yo", sentenci車.
Ayer, d赤a en el que el Stuttgart recuper車 la categor赤a, se celebraba el d赤a del orgullo LGTBI y la pr芍ctica totalidad del mundo del f迆tbol se apunt車, de una manera u otra, a la fiesta. Diarios deportivos, clubes, federaciones, t谷cnicos, jugadores, jugadoras e hinchas, hicieron suya la bandera arco赤ris, signo de diversidad, respeto y amor. Esto era algo impensable hace apenas seis a?os, cuando Hitzlsperger dio el paso de dejar de ser solo un deportista para luchar por un mundo mejor. De 谷l, y otros como Robbie Rogers, Anton Hysen o Jaiyah Saelua, es el m谷rito de que poco a poco lo estemos construyendo.
Como en un recordatorio, sin embargo, el Stuttgart ascendi車 ayer perdiendo estrepitosamente en casa y ante un rival menor. Era como si el bal車n quisiera recordar a Hitzlsperger y a todos nosotros que toda victoria es parcial y que hay que seguir luchando d赤a a d赤a.