¡°Garbi?e, sigue, sigue¡¡±
El ¨²ltimo set sonre¨ªa a Garbi?e Muguruza para anotarse su tercer Grand Slam: 2-2 y tres bolas de break con 0-40. No pudo materializar ninguna. El realizador de televisi¨®n enfoc¨® entonces a Conchita Mart¨ªnez. ¡°Sigue, sigue¡¡±, se ley¨® en sus labios. Pero Garbi?e no volvi¨® a ganar un juego y encaj¨® una dolorosa derrota con una doble falta, la octava que sumaba durante el partido. Estos errores en el saque, unidos a la falta de efectividad con las pelotas de rotura (2 de 12), conden¨® a la hispano-venezolana, que hab¨ªa comenzado el duelo muy bien, con esa concentraci¨®n y esa confianza que ha exhibido durante el resto del torneo. Muguruza perdi¨®, s¨ª, pero en ese ¡°sigue, sigue¡± de Conchita est¨¢ la clave de su resurrecci¨®n, de su regreso a una gran final despu¨¦s de dos a?os de declive, y del camino a seguir.
Uno de los lastres de Garbi?e siempre ha sido su irregularidad en la competici¨®n y su inestabilidad emocional, sus altibajos extremos. Garbi?e Muguruza no es Rafa Nadal, a eso ya est¨¢bamos acostumbrados, pero tiene talento para ganarlo todo si consolida la l¨ªnea mostrada en Australia. Si sigue y sigue¡ Cuando Muguruza cogi¨® el micro tras perder la final, enumer¨® uno a uno a los integrantes de su nuevo equipo. El Team Mugu, como lo hab¨ªa denominado en redes sociales al inicio del curso. Ah¨ª ha apoyado su regreso.
Enfrente tuvo a una rocosa rival, a una ni?a prodigio, Sofia Kenin, que crey¨® siempre en la victoria, que no renunci¨® a ninguna bola, que por momentos record¨® a un front¨®n llamado Nadal¡ A veces parec¨ªa acelerada, excesos de juventud, pero esa electricidad tambi¨¦n la catapult¨® al triunfo. Kenin tiene un hambre voraz de ¨¦xito a sus 21 a?os. Es el mismo apetito que Muguruza, a los 26, est¨¢ volviendo a recuperar de la mano de Conchita. Garbi?e empez¨® el Open de Australia con un 0-6 en contra ante Shelby Rogers y con fiebre, y lo ha terminado como finalista. Esa es la direcci¨®n¡ Sigue, sigue.