El Tour ha visitado cinco veces La Roche sur Yon, pero han pasado ya 80 a?os desde la ¨²ltima. Las dos primeras, en 1934 y 1935, tuvo el mismo vencedor: Ren¨¦ Le Grev¨¨s. Un velocista ilustre. En su palmar¨¦s lucen 16 victorias en la Grande Boucle entre 1933 y 1939, un t¨ªtulo de campe¨®n de Francia y una plata ol¨ªmpica en pista en Los ?ngeles 1932. Ya retirado, tuvo un final tr¨¢gico: muri¨® el 25 de febrero de 1946 en un accidente de esqu¨ª en Saint Gervais.
Esa primera victoria de Le Grev¨¨s en 1934 aconteci¨® en el primer sector de una jornada hist¨®rica, porque el segundo cap¨ªtulo fue la primera contrarreloj individual del Tour: La Roche sur Yon-Nantes, sobre 80 km. Henri Desgrange introdujo esta especialidad inspirado en el ¨¦xito del Gran Premio de las Naciones, para dar oportunidad a los rodadores. La crono se celebr¨® con mucha ceremonia: los 39 supervivientes, duchados, masajeados y avituallados en el vel¨®dromo, tomaban la salida cada dos minutos despu¨¦s de escuchar su himno nacional. Gan¨® Antonin Magne, que ya era l¨ªder desde hac¨ªa d¨ªas y que termin¨® coronado en Par¨ªs.
Tanto le gust¨® a Desgrange el invento, que el a?o siguiente introdujo seis cronos. ?Seis! Fueron un desastre. En la primera, Ginebra-Evian, salt¨® el esc¨¢ndalo. A mitad del recorrido, Maurice Archambaud llevaba dos minutos sobre Magne y cuatro sobre Raffaele di Paco, pero acab¨® por detr¨¢s de ambos, con victoria del italiano. En un trazado tan largo era imposible vigilar a todos los ciclistas, que se favorecieron de los veh¨ªculos intercalados en carrera. Hasta ocho recibieron penalizaciones. Desgrange decidi¨® entonces cambiar el modelo y que la siguiente crono se celebrara por equipos, en algunos casos con una mezcla ca¨®tica de corredores de diferentes pa¨ªses. En total hubo tres cronometradas individuales y otras tres por escuadras.