Mireia Belmonte es el ejemplo
¡°No me arrepiento, pero corrijo¡±. La frase la pronunci¨® Fernando Carpena, presidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Nataci¨®n, en una comida con AS. Carpena se refer¨ªa a los Juegos Ol¨ªmpicos de R¨ªo 2016, donde la direcci¨®n t¨¦cnica abri¨® la mano para permitir la presencia de 23 nadadores. Una cifra amplia, en contradicci¨®n con la l¨ªnea que hab¨ªa marcado la RFEN en a?os anteriores, cuando prefer¨ªa una participaci¨®n m¨¢s reducida, menos cantidad y m¨¢s calidad. La experiencia no fue buena. ¡°S¨®lo un 15% logr¨® superar sus mejores registros, cuando en los Mundiales de Barcelona, en 2013, fue un 65%¡±, revel¨® el dirigente. El oro y el bronce de Mireia Belmonte maquillaron la realidad, en la que s¨®lo otro nadador, Joan Llu¨ªs Pons, se meti¨® en una final, y otro, Hugo Gonz¨¢lez, anticip¨® su prometedor futuro.
Carpena ha corregido, s¨ª. Y Espa?a ha viajado a los Mundiales de Budapest con s¨®lo ocho nadadores, que este domingo comenzar¨¢n su actuaci¨®n. Los criterios se han endurecido: ¡°Ahora pedimos que la m¨ªnima se haga por la ma?ana y por la tarde, porque as¨ª van a tener que repetirlo en los grandes campeonatos¡±. Otra raz¨®n de la rebaja participativa es ajena a la Federaci¨®n y est¨¢ relacionada con la actitud de los propios nadadores, que se han borrado en la temporada posol¨ªmpica: ¡°La mitad de los que estuvieron en R¨ªo no acudieron al Campeonato de Espa?a¡±. As¨ª han agradecido su inclusi¨®n en los Juegos. Quien no se borra nunca es Mireia Belmonte: ¡°Ella no se toma a?os sab¨¢ticos¡±. Aqu¨ª est¨¢ uno de los secretos de sus resultados: su trabajo constante, su compromiso, su af¨¢n de superaci¨®n y su amor por la nataci¨®n.