El Aleti frente a los monstruos
Le parece a usted bien que los diarios cl芍sicos de la prensa deportiva dediquen la portada a un amistoso en Dortmund y no a la victoria del Atl谷tico de Madrid, Champions, en Grecia?" "No, me parece mal". "?Y esto tiene soluci車n?" "Ninguna, caballero, no se haga l赤os". Desde la refundaci車n de la prensa deportiva hace unas d谷cadas, basada en la desproporci車n, esto no ha hecho m芍s que engordar. Purulentamente, como un divieso tozudo e invencible. Al calor del nuevo estilo, reventaron las puertas del armario periodistas que sustituyeron su anterior cuidado en las formas por una declarada labor proselitista. No es que ahora sean m芍s madridistas, o barcelonistas, simplemente han pasado a convertirse en agitadores del madridismo, o del barcelonismo. Y est芍n m芍s felices que las codornices. Esto, que en el pasado hubiera sido piedra de esc芍ndalo, es lo com迆n hoy y menos da?ino e injusto que el reparto de la informaci車n.
Por bombardeo, los seguidores del futuro, ni?os hoy, tienden a excluir todo lo que no sea uno de los dos monstruos. As赤 sucede salvo con chavalines de excepcional temple capaces de no seguir a Vicente. O que te salga un Fernando Torres que enamore a la mitad de las ni?as del pa赤s y fascine a una cuarta parte de los peques. Ya dec赤a mi paisano Graci芍n que hombre sin noticias es hombre muerto: esa muerte peque?ita nos dan cada d赤a. Y si las noches de gloria no las puede ver Espa?a entera por televisi車n, en los lugares donde no alcanza la luz rojiblanca morimos un poco m芍s.