AS entra en la burbuja de la F¨®rmula 1 en Silverstone

Los protocolos de seguridad para contener el coronavirus en el deporte son un ¨¦xito hasta que se demuestra lo contrario, pero la F¨®rmula 1 puede presumir, por ahora, de que el positivo de uno de sus veinte pilotos, el mexicano Sergio P¨¦rez, no ha puesto en jaque al campeonato ni a su equipo (le sustituye Nico Hulkenberg) y queda como una an¨¦cdota del GP de Gran Breta?a. El Gran Circo es ahora la Gran Burbuja, un coto cerrado y controlado que por momentos parece m¨¢s un experimento social que un acontecimiento deportivo. AS ha accedido este fin de semana a Silverstone dentro de un grupo muy reducido de prensa internacional con autorizaci¨®n de la FIA. Y as¨ª se vive un evento que re¨²ne, aun sin p¨²blico, a m¨¢s de 3.000 personas.

Inglaterra y las mascarillas

En la semana previa, el gobierno de Reino Unido incluy¨® a Espa?a en la lista de pa¨ªses no exentos de cuarentena, lo que obliga a mantener 14 d¨ªas de aislamiento al llegar. No obstante, los trabajadores de la F1 tienen permiso para dirigirse al circuito y realizar sus tareas seg¨²n las leyes brit¨¢nicas por tratarse de un evento deportivo de alto nivel. Es necesario mostrar en la frontera una autorizaci¨®n del organizador. Ser¨¢ as¨ª en ambas direcciones: los ingleses que asistan al GP de Espa?a podr¨¢n librarse del aislamiento a la vuelta. En cualquier caso, no hubo que dar explicaciones al cruzar el aeropuerto londinense de Heathrow con pasaporte electr¨®nico.

El mayor shock para un madrile?o sucede al llegar al hotel y organizarse para comprar comida en un supermercado, o pedir mediante take away (actividades permitidas dentro de la cuarentena fuera del circuito): la mascarilla no es obligatoria en un restaurante y no la llevan camareros o cocineros. No hay l¨ªmites en la ocupaci¨®n de los locales de restauraci¨®n visitados en Northampton, en las inmediaciones del alojamiento. Tampoco utilizan mascarilla todos los recepcionistas, ni algunos operarios del hotel que realizan el servicio de habitaciones, s¨ª la llevan quienes sirven el desayuno. En Gran Breta?a se reportaron ayer 880 casos y 120 muertes en las ¨²ltimas 24 horas; en Espa?a fueron 2.800 contagios nuevos y dos fallecimientos.

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Acceso al circuito de Silverstone

Antes de viajar, era imprescindible contar con una PCR negativa y a partir de entonces hay que someterse a test en el circuito sin que transcurran m¨¢s de cinco d¨ªas entre las pruebas, porque se bloquear¨ªa el pase. A la entrada de Silverstone est¨¢ el laboratorio de campa?a de ¡®Eurofins¡¯ para trabajadores del circuito, medios, comisarios, F1 y FIA¡­ por cada escuder¨ªa hay otra oficina port¨¢til.

Una vez superado el desagradable tr¨¢mite de los bastoncillos de algod¨®n por la nariz y en la garganta, y confiando en que tu destino no sea el de Checo, regresas al coche para dirigirte a las puertas del aut¨®dromo. Parada obligatoria, ventanilla bajada y un operario comprobar¨¢ la temperatura en la frente. "?C¨®mo te encuentras?", pregunta. "Bien". "Apto", dice, permite el paso de camino al p¨¢rking. Con el coche aparcado, paseo hasta la sala de prensa, dejando a la derecha el paddock reducido a la m¨ªnima expresi¨®n. Al entrar en las reformadas instalaciones de The Wing, hay marcas en el suelo que indican por d¨®nde proceder hasta llegar al Media Centre. Cada d¨ªa se registra qui¨¦n lo ha visitado.

Paddock y pit lane con acceso restringido

Los opulentos hospitalities han dado paso a austeros locales prefabricados para que los pilotos descansen entre sesiones y videoreuniones. Los mec¨¢nicos o ingenieros comen en los edificios del circuito con servicios de c¨¢tering separados por fabricante, y tambi¨¦n cuentan con despachos para trabajar en lo que antes eran reservados del Paddock Club, el pase m¨¢s lujoso. Los operadores de televisi¨®n con derechos est¨¢n restringidos al paddock, donde pueden entrevistar a distancia a los pilotos, y no hay Prensa en el pit lane, apenas pasan los fot¨®grafos oficiales de los equipos. Tampoco se puede caminar por la parrilla.

Hay dispensadores de gel hidroalcoh¨®lico cada pocos metros. La mascarilla, aqu¨ª s¨ª, es absolutamente obligatoria. De hecho, hubo rega?inas en Austria por una foto que reun¨ªa a Helmut Marko y Sebastian Vettel charlando sin ella, y es que contraven¨ªa tambi¨¦n la norma que prohibe contactos entre miembros de escuder¨ªas diferentes. En la F1 funcionan las subburbujas para que s¨®lo sea necesario aislar a un n¨²mero limitado de personas cuando aparezca un caso. Todo est¨¢ regido por el ¡®C¨®digo de conducta¡¯ de la FIA y hay un ¡®Delegado Covid-19¡¯. Se realizan alrededor de 5.000 test semanales y s¨®lo ha habido tres positivos.

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Desde otra perspectiva lo vive Carlos Sainz, quien subraya el buen hacer de todos los implicados: "No he visto a nadie quitarse la mascarilla fuera de un recinto en el que lo puedas hacer, como mi habitaci¨®n personal o el hotel. Pero con los ingenieros, o en el comedor, todos guardamos los metros de distancia y nadie se quita la mascarilla. Es muy estricto, pero para m¨ª es lo correcto y tiene todo el sentido". El madrile?o reconoce a AS que se llev¨® "un susto" el pasado s¨¢bado cuando se anunci¨® la cuarentena obligatoria a los viajeros de Espa?a: "Se queda en eso, porque la exenci¨®n que tenemos con la F1 nos permite movernos entre el circuito y el hotel. Tampoco pretend¨ªa moverme mucho m¨¢s". Algunos pilotos disponen de enormes caravanas dentro del mismo circuito y no lo abandonan en todo el gran premio. Uno de ellos es precisamente P¨¦rez, quien debe superar el Covid-19 sin salir de Silverstone.

Mejor acostumbrarse a esta F1

Esta es la realidad ahora en la F1 y queda tiempo para que el paddock vuelva a convertirse en un evento social. El GP es fr¨ªo, y no es s¨®lo por el aire acondicionado de la sala de prensa, que tambi¨¦n. De 350.000 aficionados se ha pasado al silencio. La Gran Burbuja permanecer¨¢ otra semana en Silverstone con el GP del 70? Aniversario y viajar¨¢ despu¨¦s a Barcelona, para celebrar el GP de Espa?a. Se repetir¨¢ el dispositivo en Spa-Francorchamps, Monza, Mugello, Nurburgring, Portimao, ?mola¡­ Mientras tanto, Sochi vende entradas y espera convertirse en la primera carrera con las gradas parcialmente ocupadas. Depende de la evoluci¨®n de la pandemia. Si no hay progresos, este modelo funciona. No es la F1 so?ada, pero la otra opci¨®n era no correr.