Otro 'error' de Red Bull
Da Costa, que triunfa y lidera la F¨®rmula E, perdi¨® en 2014 un asiento en F1 en beneficio de Kvyat. "Creo que me lo merec¨ªa, pero no hay resentimientos", recuerda.
Es el hombre de moda en la F¨®rmula E. Ganador del ePrix de Marrakech, l¨ªder del campeonato, voz autorizada y muy respetada dentro del paddock... y con una espina clavada del pasado que no le impide disfrutar del presente: en 2014 perdi¨® un asiento de F1 en Toro Rosso en beneficio de Daniil Kvyat. Y sin se?alar culpables ni enemigos. De hecho, hace un par de a?os Da Costa alababa en 'motorsport.com' a la persona que apost¨® por ¨¦l en en la estructura austriacos... y que luego fue el encargado de darle la mala noticia: Helmut Marko. "El deporte del motor es f¨¢cil, solo tienes que ganar", cuenta Antonio Felix que le explic¨® el controvertido abogado 'energ¨¦tico'. "Fue ¨¦l el que me llam¨® para contarme lo de Kvyat. No s¨¦ por qu¨¦ los pilotos le tienen miedo. Siempre tuve una buena relaci¨®n con ¨¦l, es abierta, directo y honesto".
Da Costa sonaba para sustituir en Toro Rosso ese a?o a Daniel Ricciardo, que sub¨ªa a Red Bull, y ser compa?ero de Vergne precisamente el piloto con el que comparte box actualmente en DS Techeetah en F¨®rmula E y que en Marruecos fue tercero en la victoria del portugu¨¦s haciendo que la estructura china, con apoyo franc¨¦s, lidere la clasificaci¨®n general por equipos. Sin embargo, optaron por el ruso Kvyat y Da Costa vir¨® su destino primero hacia el DTM y despu¨¦s camino a la F¨®rmnula E que ahora lidera. "Cuando Daniil obtuvo el asiento pens¨¦ que yo me lo merec¨ªa, pero no hubo resentimientos. Hab¨ªamos vivido juntos durante un a?o y medio: le ense?¨¦ a cocinar, mejor¨¦ sus gustos musicales que eran catastr¨®ficos y le present¨¦ a su novia", recuerda en la publicaci¨®n brit¨¢nica.
Ahora, a los 28 a?os, el piloto nacido en Cascais es uno de los jefe del certamen el¨¦ctrico de la FIA con un sueldo muy importante, bastante superior al que percibe en F1 el ruso del renombrado Alpha Tauri, que le permite ganarse perfectamente la vida haciendo encima lo que m¨¢s le gusta al volante de un coche de carreras. Eso s¨ª, lejos de Red Bull. Y encima, ganando. "La victoria en Marruecos se la dedico al equipo. Me dieron un coche incre¨ªble y estamos trabajando duro y juntos para seguir mejorando. La carrera fue mucho m¨¢s dif¨ªcil de lo que pareci¨® y tuve que ser valiente e inteligente en algunas acciones en pista. Por ejemplo dej¨¦ que Guenther se acercara para que usara energ¨ªa extra", afirmaba tras bajar del podio. Un escal¨®n que el pasado a?o perdi¨® cuando su comp?aero Sims, ambos entonces en BMW, se lo llev¨® por delante impidiendo un seguro doblete de los alemanes. Y Da Costa lo ten¨ªa presente: ¡°Estaba pensando en eso cuando llegaba a la meta, quer¨ªa venganza. Para ser honesto, en las ¨²ltimas tres vueltas cuando pasaba por la curva 7 miraba ese muro y dec¨ªa: 'No, gracias, esta vez no".