Nueva York decide el campe¨®n: ocho pilotos a¨²n con opciones
La doble cita final reparte 58 puntos como m¨¢ximo y Abt, 8?, est¨¢ a 55, aunque la realidad es que Vergne lo tiene a tiro con sus 32 de ventaja sobre Di Grassi.


Una temporada que comenz¨® con ocho ganadores diferentes en las ocho primeras carreras y que llega a su cita final con el mismo n¨²mero de pilotos con opciones de hacerse con el t¨ªtulo, se merece acabar a lo grande. Y qu¨¦ mejor lugar para hacerlo que Nueva York, una ciudad que solo con nombrarla emociona. La Gran Manzana acoger¨¢ por segundo a?o consecutivo el final de la F¨®rmula E con dos carreras que coronar¨¢n al quinto campe¨®n el¨¦ctrico¡ que tiene toda la pinta de ser el mismo que el cuarto.
En el deporte se dice mucho eso de que hasta que las matem¨¢ticas lo digan hay opciones, pero viendo la distancia con la que el l¨ªder encara el desenlace del campeonato, se debe hacerlo con la boca peque?a. Porque tras su tercera victoria en Berna, Vergne tiene 32 puntos de ventaja respecto a Di Grassi, su rival m¨¢s cercano. Nadie hab¨ªa llegado al final de una temporada de la FE con tanto margen para hacerse con el t¨ªtulo, pero es lo que tiene encadenar tres podios seguidos, que pasas de ser sexto a liderar con esa ventaja.
Ahora bien, ya que los n¨²meros dicen que ocho hombres contin¨²an en la carrera por el t¨ªtulo hay que ver por qu¨¦. En Nueva York un piloto puede aspirar a sumar un m¨¢ximo de 58 puntos: 50 por ganar ambas carreras, seis si se lleva las dos poles y dos si adem¨¢s marca tambi¨¦n las vueltas r¨¢pidas. As¨ª, hay que tener en cuenta hasta Daniel Abt, octavo clasificado a 55 puntos de Vergne. Pero, no hay que llevarse a enga?os, tanto ¨¦l como la mayor¨ªa de los que salvan las matem¨¢ticas necesitar¨ªan el fin de semana de su vida para destronar al franc¨¦s.
Sea como sea, Di Grassi, Evans (+43), Lotterer (+44), Da Costa (+48), Frijns (+49), Buemi (+54) y Abt lo dar¨¢n todo para ponerle las cosas lo m¨¢s dif¨ªciles posibles a JEV en el trazado de 2,373 km y 14 curvas que recorre los muelles de Brooklyn con el siempre espectacular skyline del distrito financiero de Manhattan de fondo. Dif¨ªcil que ocurra el milagro para alguno de ellos incluso en un lugar tan m¨¢gico como la ciudad que nunca duerme, aunque si Vergne se queda sin el t¨ªtulo, ser¨¢ ¨¦l quien nunca lo haga¡