Carlos Sainz y As volaron con el Peugeot a 150 km/h
Copilotaje extremo en el 3008 DKR Maxi que venci¨® el Dakar. Roncero complet¨® el reto en los tramos de El Goloso. ¡°Es una coctelera¡±, dice el piloto.
El barro dakariano permanece impregnado en la carrocer¨ªa de carbono del Peugeot 3008 DKR Maxi. Una bestia con motor de 300 caballos, tracci¨®n trasera para trepar en las dunas, 200 kil¨®metros por hora de velocidad m¨¢xima y 460 mil¨ªmetros de recorrido en las suspensiones para subir paredes gracias a unos neum¨¢ticos off-road de tecnolog¨ªa punta. Con semejantes prestaciones, y si al volante est¨¢ Carlos Sainz, no parece muy dif¨ªcil cumplir con tu cometido como copiloto en el asiento derecho. Gran error: junto al campe¨®n del Dakar comprendes por qu¨¦ unos valen para volar y otros s¨®lo para contar las gestas y vibrar con el deporte.
Porque As tuvo el privilegio de rodar con el madrile?o en los terrenos de la Base Militar de El Goloso, entre tanques del Ej¨¦rcito de Tierra y sobre unos tramos minuciosamente preparados por Lucas Cruz, el verdadero copiloto. ¡°?C¨®mo lo haces, c¨®mo eres capaz de leer las notas en marcha?¡±, fue la primera pregunta despu¨¦s de comprobar en un circuito de cuatro kil¨®metros la exigencia del Dakar. Tom¨¢s Roncero, un valiente en la pista, y este redactor ya dan fe de ello.
Pero paso a paso: lo primero, vestirse con un mono ign¨ªfugo y ajustarse el casco. A partir de entonces uno ya se siente piloto, aunque a los ojos de los dem¨¢s s¨®lo parezca un torpe mec¨¢nico. Confirmas tu falta de pericia cuando accedes al habit¨¢culo como un contorsionista. Te abrochan el cintur¨®n con seis anclajes y conectan el intercomunicador del casco. ¡°?Vamos?¡±, dice Carlos. ¡°?Vamos!¡±.
Aceleraci¨®n descontrolada, el veloc¨ªmetro marca 150 km/h, giros cerrados imposibles, baches y socavones, el cuello soportando fuerzas y golpes en todas las direcciones... pero una sensaci¨®n de adrenalina y felicidad que debe parecerse mucho a ganar el Dakar. ¡°?Vas bien?¡±, pregunta. ¡°Bien. Si hubiera que hacer 700 kil¨®metros te dir¨ªa que no llego, pero bien¡±.
Lo reconoce Sainz: ¡°Es como una coctelera, el coche absorbe todo pero al ritmo que vas sufren cuello y espalda. Gracias a la preparaci¨®n f¨ªsica y a Miguel ?ngel, el fisioterapeuta que estuvo conmigo, puedes aguantar bien el rally¡±. Entonces ha llegado el momento de buscar a Miguel ?ngel.