Retro
El port imposible: as¨ª era la impresionante versi¨®n de Street Fighter Alpha en Game Boy Color
Crawfish Interactive se sac¨® de la manga en 1999 una conversi¨®n m¨¢s que digna del cl¨¢sico Street Fighter Alpha en Game Boy Color, la port¨¢til de Nintendo.
Street Fighter Alpha fue el interesante giro de tuerca de Capcom a las tan manidas revisiones de Street Fighter II. Se trataba de una precuela anterior al primer Street Fighter, que serv¨ªa para dotar de un mayor trasfondo a los personajes de este rico universo. Como tal, fue bien recibido y tuvo conversiones a pr¨¢cticamente todos los sistemas de la ¨¦poca. Esto incluy¨® un peculiar port para Game Boy Color, la consola port¨¢til de Nintendo. Contra todo pron¨®stico, no solo se consigui¨® trasladar la jugabilidad b¨¢sica de la saga a un entorno port¨¢til, sino que adem¨¢s se convirti¨® por m¨¦ritos propios en uno de sus mejores juegos.
El origen de Street Fighter Alpha: Warriors¡¯ Dreams y sus sucesivos ports
Street Fighter Alpha: Warriors¡¯ Dreams, llamado Street Fighter Zero en Jap¨®n, naci¨® por pura necesidad por parte de Capcom, como una forma de reinventar la saga pero a la vez hacer que siguiese siendo algo familiar para no alienar a la enorme base de fans amasada con Street Fighter II y sus sucesivas revisiones. Para ello, se dise?¨® desde cero un nuevo juego con una est¨¦tica de anime m¨¢s marcada para sus personajes y con una jugabilidad m¨¢s r¨¢pida y fluida, con combos y barras de S¨²per que permit¨ªan que cada luchador desatara un potente ataque para pillar desprevenido a su rival.
Este t¨ªtulo fue lanzado en primer lugar en recreativas en 1995, y dada su acogida por parte de los jugadores, con el paso de los a?os fue recibiendo ports en otros sistemas de la ¨¦poca como PlayStation (1995), Sega Saturn (1996), PC (1997), Game Boy Color (1999) y Java ME (2010).
De entre todas las plataformas que recibieron un port durante su ¨¦poca, Game Boy Color destacaba por dos elementos fundamentales: era la ¨²nica consola port¨¢til, y como tal, tambi¨¦n era la que menor potencia atesoraba en su hardware. Es por esto que, a priori, trasladar un videojuego de estas caracter¨ªsticas a una m¨¢quina de este tipo no parec¨ªa una buena idea. Todo parec¨ªa estar en contra.
Pero lleg¨® 1999, y Crawfish Interactive, quienes fueron los responsables de portear Street Fighter Alpha a GBC, consiguieron disipar cualquier atisbo de duda entre los m¨¢s esc¨¦pticos: se trataba de un buen port, y adem¨¢s era un muy buen videojuego. Y tuvo m¨¢s m¨¦rito a¨²n si cabe porque el grueso del trabajo realizado en el juego fue fruto del esfuerzo de dos personas: Keith Burkhill como programador y Kevin McMahon como artista.
As¨ª era el port de Game Boy Color de Street Fighter Alpha, uno de los mejores juegos de la consola
La versi¨®n de Game Boy Color de Street Fighter Alpha: Warriors¡¯ Dreams era, simple y llanamente, un aut¨¦ntico prodigio t¨¦cnico. Era algo que resultaba absolutamente impensable, y m¨¢s a¨²n teniendo en cuenta el desastroso port de Sun L de Street Fighter II lanzado en Game Boy en 1995.
En el Street Fighter Alpha de GBC estaban todos los luchadores de la versi¨®n original de recreativas, incluyendo gran parte de sus movimientos ¡ªas¨ª como los especiales y los S¨²pers que respetaban los inputs originales¡ª, sus escenarios y versiones remezcladas de sus temas que sonaban con el modesto hardware de la port¨¢til. Tambi¨¦n destacaba por su enorme fluidez, llegando a los 60 FPS estables en todo momento e incluso permitiendo a los jugadores alternar entre tres velocidades distintas.
Por supuesto, para alcanzar esta ansiada fluidez hab¨ªa que hacer concesiones, y los sprites de los luchadores eran m¨¢s peque?os y ten¨ªan un menor nivel de detalle que en el port de GB de Street Fighter II. A¨²n as¨ª segu¨ªan siendo reconocibles, y en perspectiva, era preferible este recorte si redundaba en una jugabilidad m¨¢s fluida y sin parones como le pasaba a este otro videojuego. Otro de los sacrificios a realizar ten¨ªa que ver con los controles: en lugar de seguir un esquema de pu?o y patada d¨¦bil, media y fuerte, simplemente hab¨ªa un bot¨®n para pu?o y otro para patada.
Otro de sus grandes ¡°peros¡± era el hecho de que se trataba, efectivamente, de un juego para un solo jugador. Solo hab¨ªa dos modos: Arcade y Entrenamiento, por lo que al carecer de una opci¨®n de conectividad v¨ªa Cable Link con una segunda GBC y otra copia del juego, no hab¨ªa forma alguna de jugar con un amigo. A¨²n as¨ª, en l¨ªneas generales se trataba de un muy buen juego que llevaba al l¨ªmite a la peque?a videoconsola de Nintendo.
Crawfish Interactive fue una desarrolladora experta en las consolas de la familia Game Boy, demostr¨® su experiencia con un cat¨¢logo de m¨¢s de treinta videojuegos lanzados entre Game Boy, Game Boy Color y Game Boy Advance. El trabajo que realizaron con este t¨ªtulo gust¨® tanto a Capcom que volvieron a contar con ellos para el port de Street Fighter Alpha 3 para GBA, lanzado en 2002.
Esta nueva entrega, que tambi¨¦n fue bien recibida y s¨ª pose¨ªa opciones multijugador, demostr¨® que con los conocimientos y experiencia necesarios era posible desarrollar experiencias satisfactorias en el g¨¦nero de la lucha 2D en sistemas de juego port¨¢tiles.
- Acci¨®n