An¨¢lisis: Death of The Reprobate. Aventura Gr¨¢fica Renacentista a lo Monty Python

El g¨¦nero de la aventura gr¨¢fica lleva a?os en plena ebullici¨®n, con infinidad de lanzamientos mensuales de enorme calidad. Entre los los diversos exponentes del g¨¦nero que hemos disfrutado en los ¨²ltimos a?os, destacan con fuerza las rabiosamente originales aventuras gr¨¢ficas facturadas por Joe Richardson. El desarrollador, amante confeso del g¨¦nero, emple¨® cuadros reales del Renacimiento para facturar enteramente todo el apartado visual de sus dos aventuras anteriores, de manera que todos sus gr¨¢ficos provienen de pinturas de autores como El Bosco, Rembradt, Botticelli, Goya o Michelangelo. Tanto los fondos como los sprites de los personajes, graciosamente animados, est¨¢n sacados de dichas obras. Para completar la ambientaci¨®n Renacentista, la banda sonora tambi¨¦n est¨¢ compuesta por piezas de dicha ¨¦poca, a cargo de genios como Vivaldi, Bach y Haendel entre otros. Todo ello confiere un acabado ¨²nico a esas dos obras de artesan¨ªa que son las mencionadas aventuras gr¨¢ficas del se?or Richardson, Four Last Things y The Procession To Calvary.

No contento con dotar de este original y atractivo envoltorio audiovisual a sus obras, el creador las sazon¨® gustosamente del mejor humor a lo Monty Python, definiendo de de hecho literalmente sus obras como ¡°lo que habr¨ªa sido Monkey Island de haber sido desarrollada en la Flandes del siglo 16 por un viajero del tiempo que fuera fan ac¨¦rrimo de los Monty Python¡±. De desarrollo muy cl¨¢sico, basadas en los tradicionales puzzles de inventario y conversaciones habituales del g¨¦nero, lo ¨²nico que se les pod¨ªa achacar a las obras del se?or Richardson era lo cortas que eran, con una duraci¨®n en torno a las 3-4 horas (algo menos incluso para Four Last Things) que nos dejaba con ganas de m¨¢s. Teniendo en cuenta el precio de ambas, 9,49 euros cada una, menos incluso en las habituales rebajas de Steam, se les perdona dicha falta, siendo desde luego videojuegos de lo m¨¢s ¨²nicos y personales.

Para cerrar el c¨ªrculo, este 7 de noviembre del a?o del se?or de 2024 se publica Death of the Reprobate, ¨²ltimo de t¨ªtulo de esta ¡°semitrilog¨ªa¡±, ya que las tres aventuras gr¨¢ficas renacentistas comparten universo aunque pueden ser disfrutadas de manera independiente en cualquier ¨®rden, ya que los argumentos son independientes. Pese a conservar los puntos fuertes de los dos t¨ªtulos anteriores, tambi¨¦n arrastra sus males, siendo nuevamente una aventura muy corta, quiz¨¢ demasiado en esta ocasi¨®n, donde adem¨¢s los puzles nos parecen un poco menos inspirados y el gui¨®n demasiado simple. Adem¨¢s el tramo final de la aventura resulta poco satisfactorio y da la sensaci¨®n de estar m¨¢s para alargar artificialmente la escasa duraci¨®n del t¨ªtulo que para aportar algo, especialmente a nivel jugable. Quiz¨¢ ya no sorprenda tanto viniendo de donde venimos, pero lo cierto es que Death of the Reprobate nos ha parecido un peque?o paso atr¨¢s respecto a The Procession To Calvary.

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Locura a lo Monty Python

La trama de la aventura resulta de lo m¨¢s sencilla. El protagonista es el sucesor del Gobernante Marcial El Inmortal, quien no haciendo honor a su nombre agoniza en su lecho de muerte. Dicho protagonista es convocado ante el mismo, con la esperanza de ser nombrado nuevo monarca. Su sorpresa es may¨²scula cuando Marcial lo acusa de ser un incompetente desalmado, inst¨¢ndolo a cometer 7 buenas obras antes de que el actual regente fallezca si quiere heredar el trono. As¨ª pu¨¦s, nuestro personaje saldr¨¢ raudo y veloz tratando ayudar a quien lo necesite en la buc¨®lica y apacible villa medieval cercana. Sin mucha complicaci¨®n, ni profundidad alguna en los personajes, dicha trama es una mera excusa para un festival de humor a lo Monty Python bastante pasado de vueltas y algo soez en varios momentos (no es un t¨ªtulo para los peque?os de la casa).

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El t¨ªtulo es m¨¢s una sucesi¨®n de alocados gags que un juego con trama s¨®lida, siendo todo bastante simple. Los di¨¢logos resultan muy graciosos, y el humor es mordaz, gamberro y un poquillo zafio como se ha comentado. Si nos gusta este tipo de humor, el t¨ªtulo resulta muy disfrutable, adem¨¢s cuenta con una acertada localizaci¨®n de todos sus textos al castellano. Por desgracia, la duraci¨®n media en funci¨®n de nuestra pericia y paciencia rondar¨¢ las 3 horas, incluso algo menos, dej¨¢ndonos con ganas de m¨¢s, dando adem¨¢s la sensaci¨®n de haber contado una historia de menor entidad y m¨¢s apresurada que la del anterior t¨ªtulo de Joe Richardson, The Procession To Calvary.

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El desarrollo de la aventura es totalmente cl¨¢sico, con control del personaje con puntero para el desplazamiento, un inventario oculto en la parte superior de la pantalla visible cuando desplazamos el cursor a la misma, y el tipo de puzles que uno se esperar¨ªa en una aventura gr¨¢fica tradicional de toda la vida, sazonados con muchas conversaciones con posibilidad de elegir diferentes opciones de di¨¢logo. Lo cierto es que los puzles resultan escasos y no especialmente inspirados, e incluso en el ins¨ªpido tramo final se apuesta por un enfoque directo para que la atropellada conclusi¨®n avance sin trabas. No ha estado excesivamente inspirado el se?or Richardson en esta ocasi¨®n en este apartado. El t¨ªtulo resulta entretenido, pero da la sensaci¨®n de que le falta un puntito de chispa, y si se han jugado a las anteriores aventuras de ste peculiar creador nos deja con cierta sensaci¨®n de estancamiento.

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Arte Renacentista en movimiento

Donde el t¨ªtulo brilla de manera absoluta es en el plano audiovisual, rabiosamente original y ¨²nico. Como ya se ha comentado, todos y cada uno de los elementos que componen el apartado gr¨¢fico del juego est¨¢n sacados de cuadros del Renacimiento, tanto los fondos como los distintos personajes.Ello confiere un acabado espectacular y distinguido a un apartado visual brillante, el cual resulta realmente placentero para la vista. Al igual que en los anteriores t¨ªtulos de Richardson, podremos visitar una galer¨ªa dentro del propio juegos donde admirar directamente los cuadros que han servido como plantilla para los gr¨¢ficos. Death of the Reprobate es verdadero arte con may¨²sculas en movimiento, en el sentido m¨¢s literal de la expresi¨®n. Quiz¨¢ os deje con la sensaci¨®n de que los escenarios a visitar resultan muy escasos en n¨²mero, dando la sensaci¨®n de ser menores que en el anterior t¨ªtulo de Joe Richardson, The Procession To Calvary.

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Para rematar, la banda sonora est¨¢ tambi¨¦n compuesta de varias piezas musicales del Renacimiento, resultan un placer may¨²sculo para el o¨ªdo. Todo ello redondea un acabado audiovisual que es puro goce para los sentidos, y que adem¨¢s no tiene comparaci¨®n en el sector del videojuego, siendo una experiencia equiparable a una visita multimedia a un museo Renacentista. En definitiva, un t¨ªtulo ¨²nico y especial como pocos, al igual que sus antecesores, al que quiz¨¢ le falte algo de ambici¨®n y mayor escala para ir un paso m¨¢s all¨¢. En cualquier caso, resulta ser una aventura gr¨¢fica interesante, con un envoltorio simplemente espectacular.

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