An¨¢lisis de World of Warcraft: The War Within, la vuelta a lo grande de un legendario MMORPG

World of Warcraft se prepara para ofrecer al jugador una de las mejores ¨¦pocas para el MMORPG de Blizzard. La llegada de la ¨²ltima expansi¨®n, The War Within, inicia una ronda de actualizaciones constantes llamada Saga del Alma-Mundo que llevar¨¢ de aventuras a los adalides durante esta y dos expansiones m¨¢s.

Todo este contenido, abanderado de nuevo por Chris Metzen, uno de los principales responsables de la saga Warcraft ¡ªentre otras¡ª, comenz¨® el pasado 27 de agosto de 2024 y en MeriStation ya hemos probado todo lo que la nueva expansi¨®n ten¨ªa que ofrecernos. Esto es lo que nos ha parecido World of Warcraft: The War Within.

Una deliciosa campa?a

Despu¨¦s de los hechos acaecidos en Dragonflight, una nueva pero vieja y conocida Xal¡¯atath amenaza a los habitantes de Azeroth. Los nuevos planes de la que anta?o fuera la conciencia de una daga del Imperio Negro pasan por reclutar a nerubianos de la isla de Khaz Algar, destruir a los terr¨¢neos que all¨ª habitan y cerrar rencillas con Alleria Brisaveloz. Y un prop¨®sito mayor, claro.

Los grandes l¨ªderes de ambas facciones, Alianza y Horda, son advertidos de estos peligros mediante susurros de una entidad en teor¨ªa desconocida y ponen rumbo hacia Khaz Algar utilizando la ciudad flotante de Dalaran como m¨¦todo de transporte. Sorpresas aparte que no queremos desvelar por ser sucesos impactantes para el jugador, el equipo formado por Thrall, Alleria, Anduin, Jaina y Khadgar entre otros llegan a su destino en mitad de una guerra inusual.

Una vez que el adalid llega a la Isla de Dorn, su periplo consistir¨¢ en conocer las verdaderas intenciones de Xal¡¯atah a trav¨¦s de las historias que rodean a los nuevos mapas de The War Within; Isla de Dorn, Cavernas Resonantes, Santificaci¨®n y Azj-Kahet, el germen de los horrores de esta nueva expansi¨®n. La primera, habitada por la nueva raza aliada, los terr¨¢neos. La segunda, poblada por Mecaoradores y kobolds. Santificaci¨®n ¡ªel escenario m¨¢s impresionante de esta nueva expansi¨®n¡ª es el hogar de la en teor¨ªa extinta tribu Arathi y por ¨²ltimo, Azj-Kahet, el nido nerubiano m¨¢s grande que se haya visto en World of Warcraft.

Al contrario que Dragonflight o anteriores expansiones, la trama de The War Within se sostiene a lo largo de las diferentes campa?as que llevamos a cabo. Cada mapa cuenta con su historia ¨²nica, sus problemas y quehaceres, pero todo est¨¢ conectado milim¨¦tricamente para que aporte frescura y al mismo tiempo consistencia. Tambi¨¦n hemos encontrado misiones algo m¨¢s crudas de lo habitual y muchas de ellas desarrollan los problemas que motivan el eje de la expansi¨®n.

Hay misiones t¨ªpicas del g¨¦nero; ve aqu¨ª y all¨¢ y tr¨¢eme esto, ata cinco o diez enemigos, rellena esta barra de porcentaje eliminando contrarios de la zona, pero tambi¨¦n ha habido espacio para nuevos puzzles, mec¨¢nicas diferentes y situaciones divertidas. En The War Within en las misiones ¡ªa¨²n siendo la mayor¨ªa gen¨¦ricas¡ª no hay esa sensaci¨®n de estar haciendo cada cinco minutos la misma misi¨®n, hay variedad y eso se agradece.

Blizzard ha seguido en la l¨ªnea de ofrecer escenas cinem¨¢ticas en los momentos m¨¢s impactantes de la historia, quiz¨¢s menos de lo habitual, pero siempre a un nivel al que nos tienen acostumbrados. Por supuesto, adem¨¢s de las escenas generadas con el motor del juego, han incluido tambi¨¦n secuencias al estilo c¨®mic animado como vienen haciendo desde hace a?os.

The War Within es, como dijimos al inicio del an¨¢lisis, el comienzo de una trilog¨ªa basada en Azeroth, el alma mundo que da nombre al planeta en el que el adalid reside. Dicho esto podr¨ªa dar la equ¨ªvoca sensaci¨®n de que es una aventura incompleta, con un inicio planteado para The War Within, un nudo con Midnight y un desenlace con la ¨²ltima expansi¨®n de esta trilog¨ªa; The Last Titan. Si bien en cierto modo es as¨ª, The War Within es autoconclusiva y lo hace muy bien tanto en este t¨¦rmino como anticipo a lo que vendr¨¢ en a?os venideros.

Llegados a este punto podemos concluir que la ¨²ltima actualizaci¨®n de World of Warcraft nos ha encantado. Despu¨¦s de una atrevida Shadowlands ¡ªmuy interesante pero mal ejecutada¡ª y una expansi¨®n algo sosa como Dragonflight, The War Within presenta la primera piedra de una trama que promete ser especialmente interesante para los habitantes de Azeroth. Eso s¨ª, el concepto de las facciones se ha vuelto a dejar de lado y ya se ha perdido todo inter¨¦s en ellas.

Novedades jugables muy interesantes

Al contrario que en Dragonflight, The War Within no incluye ninguna clase nueva, solo se han limitado a a?adir una raza aliada; los terr¨¢neos. No obstante no es ¨®bice para que aporte negatividad al resultado final ya que Blizzard ha hecho los suficientes cambios en el n¨²cleo del juego como para necesitar una nueva especializaci¨®n. Lo primero, por ejemplo, los talentos heroicos.

Se trata de nuevos ¨¢rboles de talentos adheridos con dos variantes para cada especializaci¨®n que potencian las caracter¨ªsticas de la clase. Se obtiene acceso a ellos a partir del nivel 71 y todos los nodos estar¨¢n disponibles llegados a nivel 80. Es decir, todos los talentos disponibles estar¨¢n activos una vez llegado al nivel m¨¢ximo. Hay algunos nodos que incluyen variantes, que son los que marcar¨¢n en parte la diferencia, aunque el resultado final de este nuevo a?adido no ha sido del todo bien recibido por la comunidad. Se nota m¨¢s una ampliaci¨®n del ¨¢rbol de talentos original que algo realmente nuevo.

Por otra parte tenemos las Bandas Guerreras, una renovaci¨®n del sistema de cuentas de World of Warcraft que permite compartir el progreso de tu personaje principal con el resto de tu cuenta. Por ejemplo, la reputaci¨®n de The War Within obtenida con un h¨¦roe se compartir¨¢ con el resto de la banda, eliminando as¨ª la necesidad de volver a obtenerla desde cero con cada nuevo personaje creado. Adem¨¢s, objetos como las monedas, logros o colecciones tambi¨¦n se compartir¨¢n e incluso podr¨¢n depositarse en un banco especial para la ocasi¨®n. ?Os sobran monedas de canje de la nueva expansi¨®n? No pasa nada, env¨ªaselas a un personaje secundario y que las use ¨¦l.

El sistema de vuelo implementado en Dragonflight vuelve a The War Within, siendo incluso obligatorio durante buena parte de nuestra estancia en Khaz Algar. No solo eso, si no que ahora casi cualquier montura de nuestro cat¨¢logo tendr¨¢ la habilidad Surcacielos con las mismas habilidades que ya vimos en la anterior expansi¨®n. Se puede utilizar el vuelo cl¨¢sico mediante una habilidad que cambia el formato de planeo, pero para ello ¡ªsolo en los mapas de The War Within¡ª se necesitar¨¢ desbloquear un logro en concreto.

Por ¨²ltimo dos novedades que nos han encantado especialmente; las Profundidades y la posibilidad de completar mazmorras con la ayuda de NPCs. Lo primero es una vuelta de tuerca a las cl¨¢sicas mazmorras pero con sutiles diferencias. Son m¨¢s cortas, m¨¢s desafiantes y est¨¢n llenas de recompensas. Podemos superarlas en grupo o con la ayuda de Brann Barbabronce, a quien podemos equipar con nuevas habilidades a medida que completamos Profundidades o las encontramos en ellas. Brann, que no ser¨¢ el ¨²nico ayudante que llegar¨¢ a esta mec¨¢nica de juego ¡ªcada temporada se a?adir¨¢ uno¡ª, puede ejercer el rol de sanador o de DPS (da?o por segundo) a nuestra conveniencia y equiparlo con los ¡°bibelots¡± (habilidades) que creamos m¨¢s conveniente dependiendo de su funci¨®n en la Profundidad.

Lo interesante de este nuevo contenido son tanto las mec¨¢nicas en forma de handicaps que se incluyen en ellas como los secretos, estado de las profundidades, sus once niveles de dificultad o recompensas. Puede que en una de ellas el veneno de la zona afecte a nuestras capacidades o que tengamos que mirar por donde pisemos si no queremos despertar a decenas de ar¨¢cnidos, pero adem¨¢s hay otros peligros que pueden o no acecharnos. As¨ª y si sumamos que hay diferentes misiones en cada una de ellas, algunas relacionadas con la trama principal, se convierte en un tipo de contenido muy fresco, divertido, desafiante y satisfactorio. Y claro, humor¨ªstico, con Brann y sus chascarrillos os lo vais a pasar bomba.

La ¨²ltima novedad, como ya hiciera el legendario mmorpg EverQuest en 2008, Final Fantasy XI en 2013 y recientemente Final Fantasy XIV, es la de poder completar las mazmorras del videojuego con la ayuda de la ¡°m¨¢quina¡±. Para ello los jugadores deben seleccionar dicho modo en el buscador de mazmorras y autom¨¢ticamente entrar¨¢ en la mazmorra con un grupo de personajes definidos dependiendo del rol que tomemos en ella. Por ejemplo, nosotros utilizamos un Cazador para completar la campa?a por lo que el resto de roles escogidos por el videojuego se conformaban por un tanque, un sanador y dos DPS, cumpliendo as¨ª el habitual grupo de cinco jugadores. En este caso se habilita un bot¨®n en la interfaz en la que podemos ordenar al NPC tanque que inicie su trabajo y al mismo tiempo, ordenar que se detenga si necesitamos tomar un respiro.

La inteligencia de los NPCs se comporta realmente bien, casi igual a como lo har¨ªa un jugador. Intenta no atraer a demasiados enemigos, esquiva los innecesarios, toma rutas alternativas que reducen el trayecto, ejecutan mec¨¢nicas para no recibir impactos de ¨¢reas enemigas y todo lo que podr¨ªais ver en una partida llevada a cabo por jugadores reales. Adem¨¢s, si hay alguna mec¨¢nica o desv¨ªo necesario, el NPC te explica lo que hay que hacer en dicho momento.

Pero quiz¨¢s lo m¨¢s divertido es ver las reacciones de los NPCs en las mazmorras. En un intento de conseguir el m¨¢ximo realismo a la hora de utilizar esta funci¨®n, los personajes controlados por el juego saltan de ac¨¢ para all¨¢, realizan movimientos err¨¢ticos por la zona, anuncian que van a hacer una mesa de mago y pasean por la zona como cualquier otro jugador har¨ªa. Este tipo de detalles aporta un toque de realismo ¨²nico que logra no sentirnos demasiado solos haciendo este contenido.

Khaz Algar, precioso y ¨¦pico

Si bien la Isla de Dorn, el primer mapa que visitamos en The War Within, parece demasiado continuista en lo art¨ªstico y gr¨¢fico, las dudas con respecto a la calidad gr¨¢fica se disipan conforme vamos avanzando en la historia. De una estepa verde, h¨²meda y llena de ruinas tit¨¢nicas de la Isla de Dorn, pasamos a las enormes Cavernas Resonantes, que si bien yacen por debajo de Dorn, son lo suficientemente grandes como para pasearse por ellas a toda velocidad con nuestra montura voladora durante varios minutos. Adem¨¢s el dise?o del mapeado ha ganado enteros con respecto a otras expansiones y ahora cuentan con m¨¢s lugares a descubrir, recovecos imposibles y un estilo art¨ªstico de ensue?o.

La guinda final llega por parte de Azj-Kahet y Santificaci¨®n. La primera comparte un dise?o similar con Cavernas Resonantes aunque tematizada con arquitectura nerubiana. Un amasijo de intrincados edificios, cuevas, edificios en suspensi¨®n y un ambiente extremadamente oscuro y l¨²gubre que le otorgan al lugar un aspecto ¨²nico. Pero sin duda Santificaci¨®n ser¨¢ uno de esos mapas que van a perdurar de por vida en el cerebro de los jugadores. No exageramos si decimos que la primera vez que pusimos los pies en dicho mapa se nos eriz¨® el pelo, ocultamos la interfaz y nos dejamos maravillar ¡ªpulsando constantemente la tecla de capturar pantalla¡ª por lo impresionante que es el lugar.

Es muy dif¨ªcil explicar dicha sensaci¨®n sin un material audiovisual que lo apoye, sobre todo porque Beledar, el cristal protagonista que yace en el techo de este lugar, es el causante de tanta maravilla visual. Ayud¨® tambi¨¦n la configuraci¨®n gr¨¢fica m¨¢s alta del juego, incluyendo el trazado de rayos al m¨¢ximo, claro, pero el juego de luces y sombras, el dise?o del escenario, la arquitectura, la tribu que all¨ª reside y su historia pasar¨¢ a recordarse por mucho tiempo.

Sobre la banda sonora es tal y como esper¨¢bamos que fuera viniendo de Blizzard. Ralla a un nivel excelente aunque en esta ocasi¨®n han coqueteado con melod¨ªas m¨¢s acordes a un juego de fantas¨ªa, quiz¨¢s motivados por el ¨¦xito de las composiciones de Final Fantasy XIV ¡ªo no, qui¨¦n sabe¡ª, pero lo cierto es que, sin ser el que firma un experto en m¨²sica, son menos ¡°peliculeras¡± y m¨¢s juguetonas.

Lejos de chocar con lo habitual en World of Warcraft, m¨¢s bien provoca todo lo contrario, agudiza el ¨¦nfasis en ofrecer variedad al juego, aporta un toque m¨¢s divertido y fantasioso y nos permite descubrir que la variaci¨®n musical tiene cabida en este cl¨¢sico mmorpg. ?Y que le sienta estupendamente bien! Por supuesto, el juego sigue con la tradici¨®n de doblar todos los textos interesantes en espa?ol, con un elenco a la altura de las grandes superproducciones de cine o televisi¨®n.

En definitiva, World of Warcraft: The War Within es todo un acierto en cada uno de sus campos, reafirmando ¡ªesta vez s¨ª¡ª por qu¨¦ este legendario MMORPG es uno de los m¨¢s importantes del g¨¦nero y, en muchas ocasiones, el Rey. La variedad de situaciones, la interesante trama, las nuevas mec¨¢nicas jugables tanto en mazmorras, profundidades o raid, la m¨²sica, lo art¨ªstico y decisiones hacen que The War Within sea un juego sobresaliente.

No podemos cerrar este an¨¢lisis sin comentar dos detalles m¨¢s, uno positivo y otro negativo. Para lo primero, aplausos a la empresa californiana por agregar una opci¨®n que cambie el modelo de las ara?as por crust¨¢ceos. Para alguien con principio de aracnofobia como el que os escribe es todo un acierto. La parte negativa viene dada por la inesperada decisi¨®n de abrir la expansi¨®n unos d¨ªas antes a aquellos que compraran la edici¨®n m¨¢s cara. Creemos que sienta un precedente para el videojuego que, ni es sano, ni es agradable para los jugadores que llevan a?os pagando religiosamente una cuota ¡ªnada barata para los tiempos que corren¡ª cada mes.

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