I Was A Teenage Exocolonist
- PlataformaNSW8.5PS58.5PS48.5PC8.5
- G¨¦neroRPG
- DesarrolladorNorthway Games
- Lanzamiento25/08/2022
- TextoIngl¨¦s
- EditorFinji
An¨¢lisis
I Was A Teenage Exocolonist, an¨¢lisis. Decisiones que importan, valent¨ªa con el guion
Analizamos una de las grandes sorpresas de este a?o. Un juego narrativo valiente en tem¨¢tica, en decisiones. En todo. Nos ha encantado.
?C¨®mo ser¨ªa la vida fuera de la Tierra? ?Ser¨ªa posible iniciar una nueva civilizaci¨®n en otro planeta? ?Nos adaptar¨ªamos a ¨¦l o tendr¨ªamos que hacer modificaciones dr¨¢sticas al h¨¢bitat para poder subsistir? Estas cuestiones son unas de las m¨¢s exploradas en ciencia ficci¨®n, y
el punto de partida de I Was a Teenage Exocolonist, una deliciosa aventura narrativa de NorthWay Games y publicada por Finji, la misma editora que nos trajo Tunic. Desde este 25 de agosto la tendremos disponible en PS4, PS5, Nintendo Switch y Steam. Hoy analizamos un t¨ªtulo que trata temas ¨¦ticos y pol¨ªticos en clave sci-fi y sin ning¨²n pudor.
Un nuevo hogar para la humanidad
Cuando una aventura narrativa nos promete que nuestras decisiones moldear¨¢n la historia, siempre nos preguntamos hasta qu¨¦ punto. En Life is Strange vemos c¨®mo hay acontecimientos ineludibles, si bien nuestras elecciones afectan a c¨®mo hemos llegado a los eventos clave. Por otro lado, en t¨ªtulos como Until Dawn, una serie de decisiones nos puede llevar a la muerte de personajes principales. En el caso de I Was A Teenage Exocolonist, nuestras decisiones impactan en la historia y el desarrollo de nuestro protagonista, y no se queda en el recurso f¨¢cil de desviarnos por diferentes atajos hasta llevarnos a una ¨²ltima decisi¨®n de la que s¨ª depende el final del juego.
Nuestro protagonista es un joven que vivir¨¢ su infancia y adolescencia en Vertumnalia, una colonia exterior al planeta Tierra donde los humanos construyen una nueva cultura y oportunidad. Asistiremos a los primeros a?os de vida de nuestro h¨¦roe/hero¨ªna al decidir su g¨¦nero (representado por un espectro y no por una selecci¨®n de opciones), su trasfondo, sus cualidades m¨¢s destacadas y su mejor amistad. Y, despu¨¦s nos embarcaremos en un viaje que comprender¨¢ la vida en la colonia desde los 10 hasta los 20 a?os.
I Was A Teenage Exocolonist nos hace sentir bienvenidos en su universo desde el primer momento, sin sobrecargarnos de informaci¨®n. S¨ª, Vertumnalia tiene una cultura propia y un lore profundo, pero la inmersi¨®n no es ortop¨¦dica; no es m¨¢s que un punto y seguido de la cultura occidental actual, con elementos que ya identificamos de la ciencia ficci¨®n, como los implantes bi¨®nicos. Conocer Nuestro entorno ser¨¢ un peque?o mapa isom¨¦trico, por el que ser¨¢ sencillo orientarse, y nuestra hud, sin resultar invasiva, nos indicar¨¢ el nivel de nuestros atributos, nuestro estado de ¨¢nimo y energ¨ªa.
Un mazo de cartas de vivencias
El a?o se divide en cinco estaciones (Humedad, Silencio, Pollen, Polvo y Brillo) y cada mes decidiremos d¨®nde emplear nuestro tiempo. En cada edificio se encontrar¨¢n las diferentes actividades que podremos realizar cada mes: cuidar los cultivos, estudiar humanidades o ciencia, colaborar en la cocina, hacer deporte, etc. Cada tarea aumentar¨¢ algunos de nuestros atributos, que se clasifican en tres categor¨ªas principales: la raz¨®n (en azul), la emoci¨®n (en amarillo) y la fuerza f¨ªsica (en rojo). Y, por supuesto, las cualidades que potenciemos afectar¨¢n a c¨®mo madure nuestro personaje, su relaci¨®n con los dem¨¢s y las sub-tramas en las que tendr¨¢ una parte activa. Cabe recordar que el trabajo y estudios aumentar¨¢n nuestra barra de estr¨¦s, que deberemos aliviar dedicando un mes al descanso. Asimismo, habr¨¢ ciertos acontecimientos del juego que nos drenen las energ¨ªas, por lo que deberemos tomarnos un reposo obligatoriamente.
I Was A Teenage Excolonist no se limita a ofrecernos una serie de opciones de di¨¢logo, sino que incorpora un sistema de cartas interno en el que cada naipe ser¨¢ fruto de nuestra experiencia; una idea que ya vimos en Signs of the Sojourner, pero mucho m¨¢s elaborada. As¨ª, nuestras vivencias generar¨¢n una carta con un color asignado a la raz¨®n, emoci¨®n o fuerza, m¨¢s un valor y, en algunos casos, unas caracter¨ªsticas especiales. Cuando nos enfrentemos a los desaf¨ªos de nuestra vida cotidiana, pasaremos a un minijuego en el que deberemos crear una secuencia con nuestros naipes hasta alcanzar la puntuaci¨®n requerida y, si nos llegamos al m¨ªnimo, a?adir puntos extra con un empuj¨®n de estr¨¦s. Como cabe de esperar, las cartas relacionadas con el tipo de desaf¨ªo recibir¨¢n una puntuaci¨®n extra. No todas las cartas ser¨¢n positivas, si bien en nuestras jornadas de descanso tendremos la opci¨®n de descartar algunas que ya no consideremos ¨²tiles. Y, siguiendo la econom¨ªa establecida en Vertumnalia, los trabajos cumplidos nos otorgar¨¢n kudos, la moneda que podremos cambiar por ventajas y objetos.
Un planeta en evoluci¨®n constante
A lo largo del a?o, viviremos eventos marcados: las festividades de Vertumnalia, donde podremos participar en un concurso de talentos; nuestro cumplea?os y la estaci¨®n de Brillo, que es donde la colonia est¨¢ m¨¢s expuesta a los ataques de criaturas externas. A la hora de dise?ar un t¨ªtulo con una narrativa sujeta a un calendario, es muy f¨¢cil caer en el error de hacer que la partida sea repetitiva, pero I Was A Teenage Exocolonist ha salvado este escollo con mucha soltura: no todos los a?os ser¨¢n iguales, y habr¨¢ acontecimientos que impacten en nuestra rutina y que alterar¨¢n significativamente el entorno, la distribuci¨®n de la colonia, su poblaci¨®n de ¨¦sta y el panorama sociopol¨ªtico.
Y es que el punto estrella de I Was A Teenage Excolonist es ser un juego vivo, en el que sentimos c¨®mo el transcurso de la ni?ez y la adolescencia fluyen, y esto lo logra a trav¨¦s de peque?os detalles. Tanto nuestro protagonista como el resto de los personajes madurar¨¢n f¨ªsica y mentalmente a?o tras a?o. Nuestras relaciones con ellos variar¨¢n seg¨²n las interacciones y actividades compartidas, si bien se echan en faltan m¨¢s interacciones extraordinarias. Y, con la adolescencia, empezar¨¢n los primeros amores: desde los 16 a?os podremos establecer relaciones rom¨¢nticas, que se sienten mucho m¨¢s din¨¢micas m¨¢s all¨¢ que en otros t¨ªtulos donde la relaci¨®n se estanca tras la primera noche de pasi¨®n.
Con nuestra pareja podremos ir regularmente de citas ¡ªque alivian estr¨¦s¡ª e interacciones extra. Las situaciones que se viven en la colonia tambi¨¦n se vivir¨¢n de forma diferente seg¨²n con qui¨¦n establezcamos lazos. Y, adem¨¢s, I Was A Teenage Exocolonist huye del manique¨ªsmo de los finales felices VS finales tr¨¢gicos. Habr¨¢ crisis de pareja, tri¨¢ngulos amorosos e incluso en algunos finales veremos c¨®mo el amor de nuestra vida nos ha acompa?ado durante unos cuantos a?os m¨¢s antes de seguir por un nuevo camino.
Un guion valiente
En su contexto de ciencia ficci¨®n, I Was A Teenage Exocolonist es un juego muy aut¨¦ntico a nivel de guion. Una distop¨ªa con una descarnada cr¨ªtica ecologista, que trata sin remilgos temas como el cambio clim¨¢tico, el capitalismo salvaje, el auge de las pol¨ªticas fascistas y la ¨¦tica cient¨ªfica. A trav¨¦s de las carnes de nuestro joven protagonista, sufriremos los conflictos generacionales y la brecha entre unos adultos que no son sinceros del todo y la rebeld¨ªa adolescente. Seg¨²n c¨®mo respondamos a nuestros mayores, adem¨¢s, nos posicionar¨¢ entre la lealtad a Vertumnalia y a nuestra rebeld¨ªa, y esto afectar¨¢ a nuestro destino.
Asimismo, los personajes, aunque parten de estereotipos muy marcados (el chico reservado y solitario, la chica que rechaza la feminidad tradicional, la joven elitista interesada por el lujo¡), tienen una evoluci¨®n muy bien estructurada que desmontar¨¢ muchos prejuicios que construyamos. Sobre la sexualidad, se tratar¨¢n de forma muy positiva la identidad de g¨¦nero y temas como la pubertad y el descubrimiento er¨®tico se llevar¨¢n con mucha elegancia y naturalidad.
Seg¨²n c¨®mo hayamos forjado a nuestro personaje, protagonizaremos ciertos eventos de primera mano, mientras que otros los observaremos desde la barrera. Y esto incentivar¨¢ nuestra curiosidad por probar otras builds. Pero I Was A Teenage Exocolonist presenta la rejugabilidad de forma consciente y muy atractiva: nuestro protagonista se reencarnar¨¢ en otra vida donde conservar¨¢ recuerdos de su yo anterior, y gracias a ello podr¨¢ resolver situaciones que le llevar¨¢n a otros caminos. Cada bucle ser¨¢n unas 6 horas de juego, y la multitud de finales y posibilidades nos podr¨¢n llevar hasta las 30 horas, con sorpresas en cada partida que refrescar¨¢n nuestra experiencia.
Y, como broche de oro, a nivel audiovisual se refleja cu¨¢n vivo est¨¢ el juego. Con un estilo art¨ªstico en el que veremos presente la firma de diferentes artistas, estaremos en un entorno rico e imaginativo, con retratos y dise?os que van cambiando a medida que pasa el tiempo y seg¨²n el momento que atravesemos. Pero no nos dejemos enga?ar por lo adorable; I Was A Teenage Exocolonist trata la belleza y tambi¨¦n el horror, tanto en el lado oscuro de los humanos como en los alien¨ªgenas con lo que compartimos hogar. Por desgracia, s¨®lo est¨¢ disponible en ingl¨¦s, y esperamos que sea localizado a m¨¢s idiomas, puesto que esta aventura narrativa intergal¨¢ctica es toda una joya del g¨¦nero.
Conclusi¨®n
I Was A Teenage Exocolonist es una aventura narrativa ejemplar, que muestra c¨®mo es posible crear un juego din¨¢mico, donde las decisiones moldeen la historia en todo momento y que nos anima a rejugarla de nuevo para probar nuevas rutas. Vertumnalia es un planeta muy vivo, donde asistimos a la madurez y evoluci¨®n de sus personajes, donde los acontecimientos y moldean el futuro de la colonia y nuestro rol en ella. El sistema de cartas construido a ra¨ªz de nuestras vivencias es una manera inteligente de aportar interactividad al juego, m¨¢s all¨¢ de convertirnos en lectores semi-pasivos. Es una l¨¢stima que s¨®lo est¨¦ en ingl¨¦s.
Lo mejor
- El impacto de las decisiones
- Rejugabilidad incentivada y consciente
- La autenticidad con la que trata temas y preocupaciones actuales
- Un universo narrativo muy bien construido
Lo peor
- S¨®lo en ingl¨¦s
- Se echan en falta m¨¢s interacciones extra con el resto de personajes.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.