Soundfall, an¨¢lisis. El poder de la m¨²sica

Dispara, dispara, esquiva y dispara; y vuelve a repetir. Todo ello al ritmo de los temas musicales m¨¢s variados que podemos encontrar pr¨¢cticamente en cualquier videojuego. Y, adem¨¢s, m¨²sica comercial, canciones de toda clase y condici¨®n recopiladas en un nuevo dungeon crawler con ciertas concesiones al bullet hell que basa su visi¨®n de la acci¨®n en el ritmo de la m¨²sica. As¨ª es Soundfall, lo nuevo de los estadounidenses Drastic Games que, junto a Noodlecake, lanzaban por sorpresa su nueva propuesta tras su presentaci¨®n en el pasado Indie World de Nintendo; y no solo en la h¨ªbrida de la Gran N, sino que tambi¨¦n en resto de plataformas, es decir, PC (Steam), PS4, Xbox One, PS5 y Xbox Series X|S. Veamos en nuestro an¨¢lisis si este nuevo exponente de los juegos de disparos musicales logra posicionarse en los primeros puesto de las lista de ¨¦xitos de los m¨¢s recomendables del g¨¦nero.

Viaje al reino de la m¨²sica y el ritmo

Desde luego, Soundfall es un juego original, tanto por su planteamiento como por sus mec¨¢nicas; y si bien nos recuerdan a otros juegos r¨ªtmicos como Crypt of the NecroDancer o el m¨¢s reciente No Straight Roads, el t¨ªtulo que nos ocupa basa su propuesta ¨²nica y exclusivamente en seguir el ritmo mientras disparamos y esquivamos, caracter¨ªstica que no conviene pasar por alto y que marca totalmente su disfrute a los mandos. Pero veamos qu¨¦ nos plantea tan colorido mundo musical a nivel de trama. Somos Melody, una joven enamorada de la m¨²sica que, sin saber c¨®mo, termina siendo transportada al reino de Sinfon¨ªa, un lugar en el que la m¨²sica lo es todo.

Por desgracia, Melody no llega en el mejor momento de este colorido y r¨ªtmico universo alternativo. Y es que Sinfon¨ªa ha sido invadido por los Discordantes, unos seres que pretenden arruinar el ritmo del lugar comandados por la villana Banshee. Melody, con la intenci¨®n de regresar a su hogar, se cruzar¨¢ con Legato y los Compositores, unos compa?eros gracias a los cuales descubrir¨¢ el misterio tras su viaje: en realidad, Melody forma parte de los llamados Guardianes de la Armon¨ªa, cuyo prop¨®sito es salvaguardar la m¨²sica de Sinfon¨ªa y evitar que cualquier amenaza corrompa sus canciones. Junto a sus nuevos amigos, Melody tratar¨¢ de regresar a casa mientras lucha contra los Discordantes a trav¨¦s de los ritmos m¨¢s ca?eros y variados que nos podamos imaginar.

Porque s¨ª, Soundfall es todo un regalo para los amantes de la m¨²sica; no en vano, cuenta con una biblioteca de aut¨¦ntico lujo con decenas y decenas de temas de todos los g¨¦neros, desde pop a rock, pasando por m¨²sica electr¨®nica y los ritmos m¨¢s latinos, adem¨¢s de bandas sonoras orquestales, funk, dubstep, hip-hop y muchos m¨¢s, todos ellos de artistas reales, unos m¨¢s conocidos que otros. Adem¨¢s, en la versi¨®n para PC podemos recurrir a nuestra propia m¨²sica y jugar al ritmo de nuestros temas favoritos. Pero, ?c¨®mo se juega a Soundfall? ?C¨®mo se fusiona tanta m¨²sica con el g¨¦nero dungeon crawler de disparos estilo bullet hell? Desde luego, la mezcla es explosiva.

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Soundfall es, en esencia, un juego de explorar mazmorras -los propios niveles- a trav¨¦s de acci¨®n fren¨¦tica v¨ªa disparos y vista elevada que nos da una amplia perspectiva de los escenarios donde transcurre la acci¨®n. Con un progresivo acercamiento al subg¨¦nero bullet hell a medida que avanzamos en la historia, la jugabilidad se basa totalmente en el ritmo impuesto en cada fase, un aspecto clave que puede ser del agrado de unos y el tormento de otros. Y es que en la parte inferior de la pantalla se muestra una suerte de metr¨®nomo que nos marca el ritmo de la canci¨®n de cada nivel; pues bien, debemos hacer coincidir nuestros movimientos de disparo y dash con el ritmo de cada tema para encadenar golpes y movimientos y completar as¨ª combos m¨¢s destructivos y efectivos. Si perdemos el ritmo y fallamos, tanto nuestra cadencia de disparo como nuestros movimientos se ver¨¢n lastrados, incluso dej¨¢ndonos vendidos, algo a evitar si no queremos morder el polvo antes de lo necesario.

Tambi¨¦n contamos con la posibilidad de alternar entre un arma principal y otra secundaria, adem¨¢s de un golpe cuerpo a cuerpo mediante espadas y similares y la posibilidad de desatar un modo berserk tras encadenar un determinado n¨²mero de hits, para as¨ª deshacernos de un plumazo de grandes grupos de enemigos que puedan acorralarnos, situaci¨®n que ser¨¢ constante en los momentos m¨¢s comprometidos y exigentes de la aventura. Mientras avanzamos, iremos desbloqueando mundos con sus propios niveles obligatorios y otros opcionales, los cuales ir¨¢n aumentando su dificultad de forma progresiva, no sin caer en ciertos picos de dificultad bastante exigentes. Por suerte, la aventura puede afrontarse tanto en solitario como en cooperativo para hasta 4 jugadores, tanto local como online; de lejos, afrontar todos estos retos en compa?¨ªa es mucho m¨¢s agradecido, tanto por diversi¨®n como por dificultad, ya que en solitario nos encontraremos con ciertas barreras que pueden convertirse en un obst¨¢culo no muy bien equilibrado.

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Otra gracia de Soundfall es su vertiente de shooter looter, ya que al final de cada nivel -o al derrotar ciertos enemigos- podremos hacernos con diferentes recompensas en forma de armas, armaduras, equipo y m¨¢s, con sus propias estad¨ªsticas, fortalezas y debilidades, y que tendremos que aprender a combinar para lograr los mejores resultados ante los diferentes tipos de enemigos a los que nos enfrentaremos. Por desgracia, y a pesar de las buenas intenciones del conjunto, la experiencia se hace muy repetitiva demasiado pronto, ya que su desarrollo es totalmente mon¨®tono y sin apenas novedades m¨¢s all¨¢ de las particularidades de cada uno de los personajes que iremos desbloqueando. Incluso los propios niveles pecan de reiterativos, apostando por diferentes ¡°pasillos¡± sin mucha gracia, de vez en cuando con rutas alternativas para descubrir tesoros con m¨¢s loot. Los enemigos, por su parte, mantienen la misma t¨®nica reiterativa, con pocas variaciones entre mundos tanto en aspecto como en tipos de ataques.

A nivel audiovisual tambi¨¦n nos encontramos con varios claroscuros. Sobre su apartado sonoro no hay mucho m¨¢s que podamos decir m¨¢s all¨¢ de lo alabado al inicio del an¨¢lisis. La m¨²sica es la aut¨¦ntica protagonista del juego, un aspecto brillante por su variedad y calidad; no obstante, no podemos hablar en los mismo t¨¦rminos respecto a los efectos de sonido, muy escasos y poco trabajados. Es como si dichos efectos estuvieran desacompasdods respecto a la excelente calidad musical del juego. A nivel visual nos encontramos con un estilo cartoon agradable y colorido, con numerosos elementos en pantalla que se mueven al ritmo de cada tema y unos personajes sencillos aunque efectivos. El conjunto se completa con varios efectos visuales bastante resultones que ayudan a crear este aura de magia y ¨¦pica. El juego llega localizado al espa?ol de hispanoam¨¦rica y no de Espa?a, con algunas palabras o expresiones muy particulares, pero bien resuelto en este aspecto.

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