Activision: Empleados de Raven Software se ponen en huelga tras una oleada de despidos

Activision ha iniciado una oleada de despidos masiva en Raven Software, estudio encargado de Call of Duty: Warzone y de dar soporte en entregas como Call of Duty: Black Ops Cold War. Tal y como adelant¨® The Washington Post el pasado 3 de diciembre, al menos un tercio de la plantilla de control de calidad del estudio afincado en Madison, Wisconsin, Estados Unidos, dejar¨¢ de formar parte de la compa?¨ªa en enero de 2022. Como respuesta a estos despidos, un grupo de unos 40 trabajadores ha convocado una huelga con la que reclaman tanto mejoras en sus condiciones laborales (contratos indefinidos) como frenar esta sucesi¨®n de destituciones, que califican de improcedentes.

Los trabajadores de Raven Software protestan: les hab¨ªan prometido mejoras

La disconformidad entre los trabajadores y extrabajadores de Raven Software se acent¨²a en el momento en que Activision Blizzard hab¨ªa prometido que ¡°aproximadamente 500 trabajadores temporales¡± pasar¨ªan a la plantilla de empleados indefinidos en los pr¨®ximos meses. Sin embargo, la corporaci¨®n alega que como consecuencia de esa nueva estructuraci¨®n tendr¨¢n que despedir a unos 20 trabajadores temporales.

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Tras conocerse la informaci¨®n, que se transmiti¨® a los empleados el pasado viernes 3 de diciembre, este lunes el periodista Stephen Totilo ha accedido al comunicado colectivo que han utilizado los miembros de Raven Software para convocar la huelga. El movimiento tiene como prop¨®sito garantizar el crecimiento de Raven como estudio y fomentar un espacio de trabajo positivo para todos aquellos que forman parte del equipo. Mientras tanto, los empleados que han convocado el movimiento no se presentar¨¢n en su puesto de trabajo desde este lunes.

La plantilla se queda sin mejoras salariales ni ascensos; reclaman contratos indefinidos

El recorte de personal se cifra, en la primera oleada de despidos, en 12 testers del departamento QA, cuyos contratos ser¨¢n rescindidos el 28 de enero de 2022. Aparentemente, las destituciones son improcedentes porque no responden a un bajo rendimiento ni malas praxis, sino un recorte personal que coincide con un periodo de ¡°cinco semanas de horas extraordinarias y justo antes de un fin de a?o con crunch¡±. El resultado no es otro que una reducci¨®n del 30% en el departamento de control de calidad de Call of Duty: Warzone, uno de los free-to-play m¨¢s exitosos de la actualidad y uno de los videojuegos m¨¢s lucrativos de Activision.

La firma liderada por Bobby Kotick ha comunicado a los empleados que, con motivo de esta restructuraci¨®n, ning¨²n miembro del equipo tendr¨¢ ascensos en sus posiciones ni aumentos en sus salarios en el ejercicio actual. La plantilla no se explica la decisi¨®n cuando hablamos de un videojuego que factura 5,2 millones de d¨®lares cada d¨ªa.

La convocatoria de huelga reincide en la necesidad de incorporar a la plantilla de contratos indefinidos a aquellos trabajadores temporales que terminar¨¢n su contrato el pr¨®ximo enero de 2022.

Toda esta situaci¨®n coincide con el esc¨¢ndalo que rodea a Activision Blizzard desde el pasado julio, cuando el estado de California denunci¨® a la empresa por posibles abusos laborales y sexuales. Este mes de noviembre, despu¨¦s de meses de acusaciones y pruebas, un millar y medio de empleados est¨¢n en huelga ¡ªsumando todas las divisiones de Activision, Blizzard y King¡ª, mientras que Bobby Kotick, consejero delegado, es acusado de maltrato y ocultaci¨®n de pruebas.

Fuentes | Jason Schreier; The Washington Post; Stephen Totilo; Bloomberg