Immortals Fenyx Rising, an¨¢lisis. Las pruebas de los dioses

Si algo ten¨ªan las deidades griegas era tiempo libre. El Olimpo, reino de Zeus y de las dem¨¢s divinidades, no se caracterizaba precisamente por el recato y los buenos modales. En Immortals Fenyx Rising, la producci¨®n m¨¢s reciente de Ubisoft Quebec, los dioses arrastran las mismas debilidades que los seres humanos. Son temperamentales, irascibles, apasionados y a menudo irracionales. Y como tal, han dedicado su tiempo a moldear un mundo repleto de pruebas y de puzles, porque para qu¨¦ poner las cosas f¨¢ciles a los mortales. El t¨ªtulo se vale de la s¨¢tira suave para conformar una propuesta tan divertida como irreverente.

Zeus, padre de los dioses y de los mortales, se cre¨ªa a salvo como soberano del universo. Sin embargo, entre la lava de los volcanes, Tif¨®n estaba urdiendo un plan para derrocarlo. Volando a trav¨¦s de las llamas, la bestia alada revolotea con sus lenguas de fuego y sume al Olimpo en la penumbra. Una a una, cada una de las divinidades sucumbe ante el poder de este poderoso enemigo, que finalmente consigue doblegar a Zeus.

Tampoco los h¨¦roes m¨¢s reconocidos (v¨¦ase H¨¦rcules o Aquiles) han logrado hacerle morder el polvo. No en vano, se han convertido en esclavos de Tif¨®n, por lo que luchan como los campeones de sus huestes. Zeus, desesperado, busca ayuda y se fija en Prometeo, el tit¨¢n amigo de los mortales que les regal¨® el fuego... y fue castigado por ello por el propio dios. Todas las esperanzas est¨¢n puestas en Fenyx, un humano al que el dios desprecia, pero del que depende el futuro de su reino.

La premisa de la historia podr¨ªa encajar en un guion de tono serio, pero Ubisoft ha optado por el humor. En l¨ªneas generales, los gags resultan divertidos y de vez en cuando arrancan alguna sonrisa, aunque no nos ha provocado ninguna carcajada irrefrenable. Quiz¨¢ le falte un poquito m¨¢s de picante, pese a que los chistes encajan bien en el universo desenfadado que han construido, que en lo visual se refleja en un mundo colorista con personajes cartoon y escenarios de fantas¨ªa.

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Fenyx, el verdadero h¨¦roe de la historia

A nadie le gusta ser un segund¨®n, pero parece que Fenyx, el protagonista de la historia, estaba muy c¨®modo (o c¨®moda) en su rol preestablecido. Por eso, cuando descubre que su hermano Ligyron ha ca¨ªdo no tiene otro remedio que sacarse las casta?as del fuego. El personaje siempre ha cre¨ªdo que su hermano fortach¨®n y bravuc¨®n era el destinatario de toda la gloria, el mortal que luchar¨ªa mil batallas y las ganar¨ªa. Ahora que el futuro de las islas griegas pende un hilo, las tornas han cambiado dr¨¢sticamente. ?Podr¨¢ vencer a Tif¨®n solo? Desde luego que no, primero necesitar¨¢ recuperar las esencias de todos los dioses, que han sido transformados en representaciones antag¨®nicas de lo que eran anta?o. Estos le ofrecer¨¢n sus bendiciones para continuar ampliando sus poderes.

Cabe destacar que el jugador puede crear a su protagonista gracias a un editor tal vez un tanto parco en opciones, aunque es posible modificar elementos como el cabello y su color, la forma de la cara, el vello facial, las cejas, los tatuajes, etc. Tambi¨¦n se brinda la oportunidad de seleccionar a un personaje masculino o femenino. Ninguno de los cuerpos tiene limitaciones, pues comparten todos los elementos, de forma que un cuerpo de mujer se puede combinar con una barba de hombre. Eso s¨ª, m¨¢s adelante todo esto se puede modificar de nuevo, tantas veces como uno lo desee. En el Sal¨®n de los Dioses, las divinidades disponen de todo lo necesario para cambiar de aspecto cuando y como quieran: parece que la cirug¨ªa est¨¦tica ya la practicaban las divinidades.

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Puzles y exploraci¨®n, una combinaci¨®n que funciona

Bastan unos segundos en el mundo de Immortals Fenyx Rising para darse cuenta de que The Legend of Zelda: Breath of the Wild es una de las grandes influencias de esta producci¨®n. La estructura de juego basa su progresi¨®n, principalmente, en la resoluci¨®n de puzles. Poco a poco, se van desplegando distintos componentes que se combinan a medida que avanza la aventura, con una curva de aprendizaje muy bien medida.

Los puzles de la historia principal son lo suficientemente elaborados como para hacerte pensar, pero est¨¢n equilibrados para no frustrar. Los elementos de estos rompecabezas se van a?adiendo paulatinamente y se mezclan hasta formar estructuras m¨¢s complejas. Son en las c¨¢maras de los dioses donde todos esos conceptos se conjugan m¨¢s brillantemente, pese a que los rompecabezas est¨¢n presentes en casi todas las facetas del videojuego. Dispararemos flechas de fuego, las haremos traspasar aros especiales hasta llegar a su destino, generalmente otra antorcha, para luego mover bloques, jugar con la gravedad o resolver un puzle que a su vez forma parte del mecanismo de otro enigma, como si de una mu?eca rusa se tratara. Nos ha gustado especialmente c¨®mo se van a?adiendo las capas de complejidad, un elemento sobre otro.

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Adem¨¢s, los desarrolladores se han fijado en el juego de Nintendo para implementar una exploraci¨®n m¨¢s compleja. Provisto de una barra de resistencia, el personaje depende de ella para realizar acciones espec¨ªficas como nadar, escalar o planear; tambi¨¦n se utiliza para las habilidades especiales durante el combate. Esta barra se agota progresivamente, de modo que hay que medir bien cada uno de los movimientos si no quieres quedar exhausto y morir ahogado o precipitarte al vac¨ªo. Un poci¨®n a tiempo y en el momento adecuado puede salvarte de una ca¨ªda fatal.

La construcci¨®n de mundo es por lo dem¨¢s muy similar a lo que Ubisoft acostumbra a hacer en sus juegos de mundo abierto. No hay duda de que los desarrolladores de Assassin's Creed Odyssey est¨¢n detr¨¢s del proyecto. El mapa no es ni muchos menos tan extenso, pero el jugador puede explorar cada rinc¨®n de esta Grecia mitol¨®gica. ?Y qu¨¦ retos se pueden hallar? Toda clase de desaf¨ªos secundarios en forma de puzles, as¨ª como la posibilidad de recolectar los materiales necesarios para mejorar al personaje.

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Las atalayas de Assassin's Creed regresan, pero solo hay una por regi¨®n, de modo que no sentimos esa sensaci¨®n abrumadora que dan a veces los mundos abiertos de los franceses. Nos ha faltado, quiz¨¢, un punto m¨¢s de valent¨ªa a la hora de abordar la exploraci¨®n. Pese a que las comparaciones no son acertadas en todas las circunstancias, Breath of the Wild ten¨ªa cierto grado de impredecibilidad que generaba situaciones muy ¨²nicas en el mundo. A Immortals le falta ese toque final, que hubiera bosquejado una exploraci¨®n m¨¢s org¨¢nica. Algo similar ocurre con las mec¨¢nicas de sigilo y de domar animales, versiones muy b¨¢sicas de otros videojuegos.

Otro de los conceptos que se explotan casi desde el principio es una de las habilidades que adquiere Fenyx en los primeros compases de la aventura. Las alas de D¨¦dalos nos dejan recorrer los escenarios desde el cielo, lo que introduce una forma de exploraci¨®n nueva con respecto a Assassin's Creed. Como dec¨ªamos, depende de la barra de resistencia, por lo que no podemos volar por el cielo de forma continua. El juego te obliga a gestionar los tiempos.

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El combate se nos hace familiar

Cualquiera que haya jugado a Assassin's Creed Odyssey se dar¨¢ cuenta de que el sistema de combate es muy parecido, aunque un poquito m¨¢s din¨¢mico y veloz. Se basa en la combinaci¨®n de arma ligera (espada), hacha y arco. El jugador tiene la opci¨®n de utilizar el ataque fuerte, el d¨¦bil, el dash y el parry, as¨ª como las habilidades especiales que se valen de la barra de resistencia. La novedad es que introduce el vuelo como componente y un sistema de combos ampliable que a?ade variedad a la lucha. Como en su anterior proyecto, las luchas no terminan de funcionar cuando varios enemigos ataquen a la vez, pues se producen situaciones de relativa confusi¨®n y caos, generalmente relacionados con la c¨¢mara y con el problema de fijar el blanco en uno de los objetivos y perder de vista a los dem¨¢s cuando salen del campo de visi¨®n.

La progresi¨®n, por su parte, se basa principalmente en la recogida de recursos, que luego se pueden canjear para mejorar armas (espada, hacha, flecha, lanza) y habilidades; lo mismo ocurre con las barras de vida y resistencia. Algunos de estos materiales se obtienen directamente en los escenarios, mientras que otros se consiguen despu¨¦s de resolver puzles. En definitiva, un sistema bastante cl¨¢sico que entra bien en un juego de estas caracter¨ªsticas

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An¨¢lisis de la versi¨®n de Xbox Series X.