Inmost, an¨¢lisis Switch

Apple Arcade se lanz¨® como una propuesta que quer¨ªa impulsar un nuevo tipo de juego para m¨®vil. Aquel que seguramente no tiene espacio para triunfar entre los gatchas y los free to play, repletos de elementos como las compras integradas y un modelo de negocio agresivo. En el servicio de Apple hemos rescatado varias joyas, entre ellas Sayonara Wild Hearts, que encuentran su espacio dentro de una suscripci¨®n que permite hacer volar la imaginaci¨®n. Inmost era una de estas apuestas. La semana pasada lleg¨® a Nintendo Switch para traer consigo una historia de p¨¦rdida y esperanza. De muerte, desaz¨®n y sacrificios. El juego de Hidden Layer Games deja indiferente.

No vamos a entrar en grandes destripes, ya que la experiencia de juego de Inmost se encuentra por debajo de las cuatro horas de juego y forma parte indivisible de su atractivo, pero si diremos que es un juego crudo, en el que a trav¨¦s de los ojos de tres protagonistas vemos una cara oscura, poco amable, de la vida. El h¨¦roe, un hombre aparentemente normal que no tiene habilidades de combate ni nada por el estilo y simplemente intenta escapar de las bestias oscuras que le persiguen es el punto de enlace de toda la trama, donde tambi¨¦n encontramos una joven ni?a que intenta escapar del peligro -mucho m¨¢s mundano, pero dram¨¢tico- y de un caballero que combate contra las bestias con espada y gancho en mano.

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Ellos son los protagonistas de este juego en el que los puzles tienen un papel imprescindible para entender lo bueno y no tan bueno del juego. Lo primero, es que se nota que el estilo de control y respuesta de los personajes estaba planteado de forma inicial para m¨®viles. Un ritmo pausado, un tipo de saltos y movimientos muy marcados y todo construido de tal manera para que el no tan preciso control t¨¢ctil no nos juegue malas pasadas. No lo decimos como algo malo, pero s¨ª algo que es evidente que se nota de buenas a primeras. A ello se une un desarrollo en el que normalmente no se unen dos o tres desaf¨ªos a la vez, si no que vamos paso a paso: una cosa lleva a la otra.

?Y qu¨¦ es lo que debemos realizar para avanzar en la historia? Depende de cada caso. Tras una breve introducci¨®n con la peque?a ni?a en nuestro control, pasaremos a tener en nuestras manos al hombre mundano, una persona normal y corriente que va solventando puzles mientras avanza. El protagonista puede coger y empujar cosas, encontrar objetos que le sirvan para abrirse paso -como un pico para romper paredes de piedra- y recoger y encajar artilugios all¨¢ donde le toca. De esta manera, nuestro avance se desarrolla cogiendo engranajes y coloc¨¢ndolos en m¨¢quinas que nos permiten elevarnos, usar cuerdas para recoger objetos de zonas alejadas, montar plataformas con una viga extra¨ªda anteriormente de otro lado y empujar carretillas, encontrar llaves y saltar de un lado para otro. Todo mientras esquivamos enemigos, saltamos por encima de ellos o escapamos a toda velocidad cuando nos persiguen.

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Su propuesta jugable es reflexiva, buscando siempre con qu¨¦ interactuar en el escenario. Similar, aunque con habilidades diferentes, es la peque?a ni?a. Que tiene un rol mucho m¨¢s enfocado al sigilo. Al no ser vista, y al tener que escapar de todo distintos obst¨¢culos, estando la interacci¨®n con el escenario centrada en alzarse hasta lugares que por su tama?o no llega haciendo uso de lo que le rodea. Y por ¨²ltimo, tenemos al caballero. Este misterioso espadach¨ªn cuenta con un gran elenco de habilidades, pero no puede saltar. Tenemos una espada para poder atacar a los enemigos y plantarles cara -el ¨²nico que puede- junto a un gancho que permite cogerse a todo tipo de lugares, tambi¨¦n en vertical, para poder seguir su periplo. Con un ritmo m¨¢s elevado, casi sin puzles de por medio, es el que pone encima de la mesa la acci¨®n m¨¢s ¨¢gil e intensa, ya que tendremos ciertos enfrentamientos donde las esquivas -como el backdash- ser¨¢n claves para despu¨¦s contraatacar contra enemigos que los dem¨¢s personajes no podr¨ªan superar.

Todo ello funciona relativamente bien, aunque es cierto que el desarrollo de las fases de la ni?a no es especialmente inspirado, y que el ensayo-error con el h¨¦roe es bastante tramposo. En demasiadas ocasiones estaremos obligados a morir por desconocimiento de los peligros que nos acechan. Enemigos que aparecen de un lugar imposible de ver hasta que te han matado alguna vez son demasiado frecuentes. Tambi¨¦n echamos en falta mayor precisi¨®n en los momentos de ciertos saltos que a veces no son tan precisos como nos gustar¨ªa. Es evidente que con el caballero y en la resoluci¨®n de puzles es donde mejor se desenvuelve el t¨ªtulo, sin duda.

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Tampoco ayuda el desenlace del juego en el tramo final. Sobre el ¨²ltimo cuarto, y sin querer entrar en destripes, el juego se precipita en sus acontecimientos y en la manera de explicarlos, algo que provoca que la m¨ªsitca y los detalles que vamos recopilando en el primer tramo -por situaciones, por NPC que nos vamos explicando y por un narrador que primero es un complemento y luego, excesivamente protagonista- se vayan diluyendo.

Naturalmente, no podemos obviar el apartado audiovisual dentro de la ecuaci¨®n de lo que es y lo que supone Inmost. Estamos ante una obra que eleva el concepto de p¨ªxel-art con unos escenarios maravillosos, repletos de detalles y capas que ofrecen profundidad y son capaces de transmitir todo aquello -oscuro y decr¨¦pito- que quiere ofrecer. El dise?o de personajes, la recreaci¨®n de las bestias oscuras y ciertos elementos, como los efectos de luces, hacen que sea un juego realmente atractivo a la vista, tanto en est¨¢tico como en movimiento. Junto a ello, una banda sonora que preciosa, capaz de acompa?ar sutilmente con un piano en momentos de rompecabezas, pero subiendo el tono y el dramatismo cuando los enemigos nos persiguen. Su papel es acompa?arnos y dejar que todo fluya. Y lo consigue.

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