Pepitas de oro: c¨®mo conseguirlas y para qu¨¦ sirven en Animal Crossing: New Horizons

En anteriores entregas de la saga Animal Crossing ¨²nicamente golpe¨¢bamos las piedras que nos rodeaban con la pala por si hubiera suerte y soltaran alg¨²n saco de bayas. Sin embargo, en la entrega de la franquicia para la consola h¨ªbrida de Nintendo tenemos alicientes m¨¢s palpables para realizar un acto tan agresivo contra las piedras de nuestra isla y sus vecinas. Ahora, a golpe de pala, podemos conseguir piedras, arcilla, pepitas de hierro y pepitas oro, adem¨¢s de una cuantiosa cantidad de bayas diarias. En esta ocasi¨®n, como parte de esta gu¨ªa completa, os vamos a contar detalladamente la forma de hacernos con las limitadas pero valiosas pepitas de oro y todos los usos que podemos darles a lo largo de nuestras horas de juego.

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C¨®mo conseguir pepitas de oro y para qu¨¦ sirven

Como ya hemos mencionado, las pepitas de oro salen aleatoriamente de las piedras, ya sea golpe¨¢ndolas con el hacha o con la pala. Por ello, es fundamental que, como parte de nuestra rutina diaria en la isla, tengamos las piedras que se encuentran en ella localizadas y probemos suerte en todas. Si no conseguimos pepitas de oro en nuestras piedras, siempre podemos gastar 2000 millas nook en acercarnos a otras islas desiertas del archipi¨¦lago y probar suerte en sus piedras. De hecho, con los cupones de millas nook podemos acabar aterrizando en una isla en la que, como m¨ªnimo, est¨¢ garantizado que extraigamos una de estas pepitas.

Para identificar la isla en cuesti¨®n tenemos que buscar que haga una espiral gracias al transcurso de su r¨ªo. Para asegurarnos de sacar el m¨¢ximo provecho de estas piedras, es fundamental que hagamos tres agujeros con la pala a la espalda de nuestro personaje. De esta forma, no retroceder¨¢ al golpear, lo que nos permitir¨¢ alcanzar los ocho objetos m¨¢ximos que puede desprender cada una de estas rocas.

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?Qu¨¦ hacemos una vez tengamos nuestras pepitas? Pues tenemos dos opciones: ahorrar o venderlas si estamos muy necesitados de bayas. Aconsejamos almacenarlas hasta que se d¨¦ una ocasi¨®n id¨®nea para su venta. Por ejemplo, podemos ser pacientes hasta que el objeto del d¨ªa en la tienda de Tendo y Nendo sea el candelabro de oro (el cual construimos con dos de estas pepitas). En este d¨ªa podremos vender cada candelabro por 40.000 bayas, el doble de su precio habitual. Adem¨¢s, si resistimos la tentaci¨®n de hacernos con esta suculenta suma de bayas, podremos empezar a guardar pepitas de oro para, cuando estemos suficientemente avanzados en el juego, construir el vistoso y gigantesco Godzilla que tanto nos har¨¢ presumir delante de nuestras amigas y amigos.

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