Cat Quest II: El Imperio Lupus, an¨¢lisis

Los gatos son una de las mascotas m¨¢s adoradas por la humanidad, a juzgar por el ¨¦xito de los v¨ªdeos gatunos que inundan Internet. Ya venerados en el Antiguo Egipto, estas adorables mascotas peludas, de ojos grandes y orejas puntiagudas siguen despertando hasta la ternura m¨¢s adormilada. No es de extra?ar, tampoco, que la inclusi¨®n de un gato en un videojuego aumente su carisma e inter¨¦s inicial. Gato Roboto nos tra¨ªa un metroidvania protagonizado por la gatita Kiki, aspecto que a primera vista lo hac¨ªa descatar con respecto a otros t¨ªtulos del g¨¦nero. Anteriormente, The Gentlebros nos tra¨ªa en 2017 Cat Quest, un encantador?aRPG ambientado en un continente gatuno y que homenajeaba?Skyrim. Este oto?o, la segunda parte de ¨¦sta ¨¦pica miauventura lleg¨® a PC Windows, PS4, Xbox One y Nintendo Switch. Su ternura, su modo cooperativo y su accesibilidad le convierten en una de las mejores propuestas navide?as, puesto que, al igual que su predecesor, es un t¨ªtulo amable incluso para el p¨²blico menos experimentado en videojuegos.?

Cat Quest nos tra¨ªa un sistema RPG muy simplificado, implementado en un universo gatuno lleno de humor y referencias a la cultura popular. Bajo su aparente frivolidad se agazapaba un giro narrativo que transmit¨ªa un hermoso mensaje sobre la lealtad de las mascotas. Su cliffhanger final, adem¨¢s, promet¨ªa una segunda parte: Cat Quest II: El Imperio Lupus.?

Como perros y gatos

En Cat Quest recib¨ªamos pinceladas sobre la eterna guerra entre los gatbitantes de Felinia y los perros del Imperio Lupus. En esta segunda parte, nos trasladamos hacia este conflicto basado en uno de los axiomas m¨¢s conocidos del mundo animal: la irreconciliable rivalidad entre perros y gatos. No obstante, parece que dos h¨¦roes, conocidos como los Sangrerreales, est¨¢n destinados a cambiar el mundo: un perro y un gato, sendos reyes de sus reinos, han sido desterrados y deber¨¢n cooperar para recuperar sus respectivos tronos. Guiados por el esp¨ªritu gu¨ªa Kirry, su miaujestad y su ladrestad deber¨¢n destronar a los tiranos Lionel y Lobezno, para lo cual necesitar¨¢n ir en busca de la Espada Real, un legendario artefacto que les asegurar¨¢ la victoria.?

El sistema rolero de Cat Quest II no innova demasiado y respeta la sencillez de la que hac¨ªa gala el anterior juego. Sobre un vasto mapa isom¨¦trico, la extra?a pareja deber¨¢ recorrer la tierra de Felina y del Imperio Lupus en pos de su misi¨®n. El combate se contin¨²a dando en tiempo real, con enemigos diseminados por el mapa y otros tantos pertenecientes a la misi¨®n que tengamos entre manos. Nuestros Sangrerreales estar¨¢n igualmente preparados tanto para la espada como la brujer¨ªa, y la especializaci¨®n de clase depender¨¢ de las armas y armaduras con las equipemos a nuestras mascotas. Por supuesto, nuestra aventura no estar¨¢ ¨²nicamente sujeta a la misi¨®n principal, y no nos faltar¨¢n mazmorras y ruinas donde aumentar nuestra experiencia y encontrar jugosos botines. Para guardar la partida y regenerar nuestra salud y man¨¢, descansaremos en una de las rocas se?aladas con un coraz¨®n azul y que har¨¢n las veces de posada. Asimismo, encontraremos misiones secundarias otorgadas por los PNJs que luzcan un signo de admiraci¨®n sobre su cabeza. Al igual que en la entrega anterior, estas diferentes expediciones siguen un arco propio con tramas muy interesantes, a trav¨¦s del cual se nos transmite, gota a gota parte del mensaje troncal del juego: el valor de la amistad.

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Dos mejor que uno

La mayor innovaci¨®n de Cat Quest II es su modo cooperativo, con el que el propio juego transmite su propia lecci¨®n sobre la cooperaci¨®n y la uni¨®n entre compa?eros. La partida est¨¢ dise?ada para dos jugadores y los combates est¨¢n preparados para que s¨®lo el d¨²o pueda hacerles frente, de tal modo que si uno de nuestros h¨¦roes cae, la victoria resulta mucho m¨¢s costosa. Mientras un aventurero est¨¢ inconsciente, el otro puede revivirlo si permanece el tiempo suficiente a su lado. Si ambos caen, se pierde la partida y comenzamos en el ¨²ltimo punto de guardado. As¨ª, Cat Quest II muestra una mayor dificultad que la anterior entrega, pero mantiene un desaf¨ªo muy justo y asequible, donde los jugadores deber¨¢n tener en cuenta que para triunfar es necesaria la coordinaci¨®n, la selecci¨®n de misiones acorde con el nivel y el dominio de las esquivas y los ataques.

As¨ª, cada pareja encontrar¨¢ el mejor equilibrio con sus Sangrerreales y especializarlos de forma consecuente. As¨ª, lo mismo suceder¨¢ con la magia, ya que encontraremos 12 hechizos en total que deberemos repartir, teniendo en cuenta que cada h¨¦roe s¨®lo puede equipar un m¨¢ximo de 4 sortilegios. No obstante, si nos hacemos magos ¨ªntegros, acumularemos un repertorio de varitas tan diferentes que deberemos cambiar a menudo de una a otra, y se echa en falta un men¨² directo como alternativa a acudir al inventario asiduamente.

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En el combate, veremos enemigos ya conocidos del anterior Cat Quest, al que se suman otros nuevos. Su patr¨®n ser¨¢ f¨¢cil de identificar con su dise?o, y seguiremos contando con la anticipaci¨®n de sus ataques y al ¨¢rea al que van a afectar. Con cada golpe, veremos seg¨²n el color de los puntos de da?os a qu¨¦ ataques son vulnerables o resistentes. As¨ª, se nos anima a que vayamos variando de equipo a lo largo de la partida, puesto que cada arma y armadura tiene sus propias ventajas y anima a que vayamos variando seg¨²n la misi¨®n y el tipo de enemigo. En las tiendas de los dos herreros del juego podremos mejorar nuestro equipo, mientras que en la Gatisede Arcana aumentaremos el poder de nuestros hechizos.?

Tal vez, el ¨²nico pero que se le pueda poner a Cat Quest II es lo ortop¨¦dico que puede ser el manejo si jugamos en solitario. En PC, podemos personalizar los controles a nuestro gusto y el mapeado en PlayStation es muy intuitivo y f¨¢cil de memorizar. Sin embargo, cambiar de personaje puede volverse pesado y, aunque la inteligencia artificial que maneja a nuestro compa?ero es bastante l¨®gica, no siempre es perfecta. Con todo, Cat Quest II es una aventura pensada para dos jugadores, tanto en sus mec¨¢nicas como narrativa.?

Humor y ternura

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Cat Quest II: El Imperio Lupus es un sucesor excelente, que conserva toda la personalidad de su predecesor: su ternura, su humor fresco, sus gr¨¢ficos adorables y su jovial banda sonora, donde se a¨²nan los temas anteriores y los nuevos. La comicidad contin¨²a presente en todos los aspectos: en un lenguaje propio del universo gatuno y perruno, lleno de juegos de palabras perfectamente localizados ¡ªa pesar de que la traducci¨®n de algunos textos confunde el g¨¦nero de varios PNJs¡ª; un dise?o de armas y armaduras hilarantes, mazmorras y misiones secundarias con un toque jocoso y una abundancia de referencias a la cultura popular que no satura al jugador.?

Pero el mayor encanto de Cat Quest II no es s¨®lo su humor ni la construcci¨®n de un universo poblado por gatos y perros, sino su mensaje y la calidez que transmite su historia. La trama, en este caso, puede resultar un tanto predecible, pero su resoluci¨®n esperada es m¨¢s que satisfactoria. Y, aunque la misi¨®n principal no lleve m¨¢s de 8 horas de juego, el propio juego invita a hacernos con las 13-14 horas que suman todas sus misiones secundarias, mazmorras, ruinas y huevos de Pascua, s¨®lo por conocer peque?as historias y emotivas historias, am¨¦n de descubrir nuevos detalles llenos de un humor dulce e inocente.

Este juego ha sido analizado en su versi¨®n para PC Windows y PlayStation 4.

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