
Ori and the Blind Forest: Definitive Edition
- PlataformaXBO9.7NSW9.5PC
- G¨¦neroAcci¨®n, Plataformas
- DesarrolladorMoon Studios
- Lanzamiento11/03/2016 (XBO)30/03/2016 (PC)27/09/2019 (NSW)
- TextoEspa?ol
- EditorMicrosoft
LLega a Switch la joya de Moon Studios
Ori and the Blind Forest, an¨¢lisis Switch
El cl¨¢sico moderno de Microsoft desarrollado por Moon Studios llega a la consola h¨ªbrida de Nintendo. ?Est¨¢ el port a la altura de las expectativas?
Cuando arrancamos Ori and the Blind forest en nuestra Switch lo primero que vemos es el logo de Microsoft Studios. En ese momento somos conscientes del regalo que tenemos entre las manos. El exclusivo de la consola Xbox One (y de su universo adyacente en el PC) llega a Nintendo como ¨²ltima expresi¨®n de las cercanas y cordiales relaciones que se han dado entre las dos compa?¨ªas en los ¨²ltimos tiempos. Tras Cuphead, otro imprescindible, Ori and the Blind Forest se presenta en la m¨¢quina h¨ªbrida como el ¨²ltimo tesoro cedido por la compa?¨ªa de Cupertino a la Gran N. Adi¨®s a una posible vuelta de los cl¨¢sicos de RARE en lo que habr¨ªa sido un reencuentro hist¨®rico y memorable. Pero no nos lamentemos por lo que no ser¨¢ sino por los oropeles y genialidad de lo que ya es. Bienvenidos al an¨¢lisis de Ori the Blind Forest en Switch.
En esta generaci¨®n que va llegando a su fin, a falta de alg¨²n rezagado que a¨²n est¨¢ por llegar, ya se encuentran posicionados los juegos que har¨¢n que la recordemos por siempre. Ori and the Blind Forest brilla con especial luz entre ellos desde su estreno en 2015. En consola era de los juegos a envidiar por parte de los no usuarios de una Xbox One. Pues bien, su estreno en Switch fue una estupenda sorpresa en su anuncio y una maravillosa realidad hoy. Como no pod¨ªa ser de otra manera, a su precioso estilo 2D le viene de perlas el modo port¨¢til de la consola de Nintendo.
Sin rodeos: ?Vale la pena el port para Switch?
Aunque toquemos generalidades sobre Ori and The Blind Forest, vamos a centrarnos en lo que es realmente importante para posibles compradores de esta versi¨®n. Para m¨¢s detalles, pod¨¦is leer los estupendos an¨¢lisis que publicamos en su momento del juego y de su posterior Definitive Edition.
Y es que hab¨ªa un comprensible miedo con respecto al port. No por la potencia de la m¨¢quina, que no deja de sorprender ensanchando sus l¨ªmites a golpe de nuevos y antiguos Triples A, sino por la calidad del port en s¨ª. Ya sufrimos, por ejemplo, con Rime, un desastre que no hac¨ªa justicia al juego original y que fue solucionando poco a poco sus problemas a base de parches. Ahora mismo solo hay que echar un ojo al reci¨¦n estrenado y fallido Contra. Bueno, ¡®un ojo¡¯ es un decir, que sorprende para mal lo borrosa que se ve en Switch la (re)vuelta de Konami. Pues bien, Ori lo da todo en la consola de Nintendo. O m¨¢s bien habr¨ªa que decirlo al contrario. Con alg¨²n baj¨®n muy puntual, la h¨ªbrida da sus m¨¢ximos n¨²meros tanto en dock, 1080p, como en port¨¢til, 720p. Y no solo eso, la experiencia de una d¨¦cada de Moon Studios con el motor del juego ha permitido mejorar las animaciones, que se mueven a 60 frames con respecto a los 30 originales. Es un detalle que repercute a nivel visual y de gameplay. Se trata de logros conseguidos durante el desarrollo de la segunda parte, Ori and the Will of the Wisps, que han sido trasladados para bien a esta versi¨®n. Efectivamente, no sobra ese Definitive Edition que acompa?a al nombre del juego. Si bien as¨ª se denomin¨® la edici¨®n mejorada que sali¨® a la venta en 2016 incluyendo nuevas zonas y movimientos, todo lo comentado apuntala actualmente la versi¨®n de Switch como la edici¨®n definitiva de verdad.

La belleza de Ori
La pantalla de inicio de Ori es de las que te pide que te quedes a escuchar. Las prisas por apretar Start desaparecen sepultadas por las notas de un tema principal excepcional. Piano y voz paralizan los impacientes dedos ante ese bell¨ªsimo paisaje vestido de fuertes colores y con el ¨¢rbol de la vida refulgiendo al fondo. Recuerda a otros momentos gloriosos como el de Final Fantasy X, Kingdom Heart, Xenoblade Chronicles o Mafia III. Momentos en los que fuimos incapaces de empezar la partida a la primera.
Lo que sigue mantiene el nivel. Y es curioso, porque estamos ante un metroidvania con fuerte componente de plataformas, pero sus primeros minutos enga?an en ese sentido. Ori se expresa en un sencillo plano horizontal, y sin recovecos, pone el acento en la narrativa en los primeros compases en lo que resulta un pr¨®logo conmovedor, de esos que no olvidar¨¢s jam¨¢s. Colocado el detonante de la historia (que no vamos a desvelar, quedaos con la eterna lucha entre la luz y la oscuridad y dejaos llevar por c¨®mo la muestra en pantalla), esta arranca poco a poco desplegando sus imbricados dedos.

La luz de Ori
Casi sin darnos cuenta el t¨ªtulo va cogiendo velocidad y creciendo en complejidad. Como buen metroidvania, su mapa se va desplegando como si de las galer¨ªas de un hormiguero se tratara. Las habilidades que vamos consiguiendo nos recuerdan aquel recoveco que ahora s¨ª podremos alcanzar. Y todo crece, y crece. Aparecen las primeras pantallas que asustan. Esas en las que piensas de primeras, ¡°Imposible¡±, pero saltas entre plataformas, abatiendo enemigos, utilizando los movimientos aprendidos y las superas a base de tes¨®n. La fluidez de la imagen y lo bien implementado del control es vital en estos compases.
Y llega un momento realmente importante, el primero de los que nos esperan. Has devuelto la estabilidad a un ic¨®nico espacio. ¡°Pues no ha sido tan dif¨ªcil¡±, piensas. Y esperando tu recompensa el juego te premia con una huida amartillada por el segundero que no esperabas. ?Recuerdas la famosa huida de una Estrella de la Muerte que colapsa en algunos juegos de Star Wars (Super Return of the Jedi, por ejemplo)? Pues aquello fue como simplemente sacar el coche del garaje. Aqu¨ª es donde aparecen las primeras dudas sobre Ori. Y no por ¨¦l, sino por la m¨¢quina que lo acoge. En ese momento ya no importa la belleza que tienes delante de ti, solo salir con vida de una fase que se te resiste hasta el infinito y m¨¢s all¨¢. Sudores fr¨ªos, frustraci¨®n. La m¨²sica es la misma que te maravill¨® en la pantalla de t¨ªtulo. Est¨¢ algo m¨¢s acelerada, pero no lo suficiente como para seguir lo que ocurre en pantalla, tampoco y por supuesto, no lo suficiente como para acompasar tu acelerado coraz¨®n.

La oscuridad de Ori
?Por qu¨¦ ocurre esto si se mantiene la fluidez ante esos momentos de extremo estr¨¦s? Hasta ahora, y hablando de perif¨¦ricos oficiales dentro de la calidad est¨¢ndar, Ori se hab¨ªa jugado con el mejor mando del mundo en las manos. El mando de Xbox One super¨® en su salida al que ya parec¨ªa el mando perfecto, el de 360. Y los Joy-Con no pueden competir con eso. En situaciones l¨ªmite como la descrita, donde hay que actuar con rapidez y precisi¨®n, el joytcks izquierdo de Switch sufre una barbaridad. Si ya est¨¢is soportando sus consabidos problemas de fiabilidad, imaginaos el cuadro.
A¨²n en fases duras, muchas veces Ori te permite el ligero fallo, o una segunda v¨ªa para acceder de un salto a ese saliente escurridizo si no se te da bien proyectarte aprovechando un proyectil. Resulta desesperante cuando esas m¨ªnimas facilidades se te escurren entre los dedos porque el joystick est¨¢ forzando sus fr¨¢giles l¨ªmites. No es imposible, pero pone a prueba tus nervios. Y enfada, porque sabes que no es culpa tuya ni del juego. Tirad de un mando pro si ten¨¦is la posibilidad. Esos momentos son un peque?o porcentaje en la aventura, pero si pod¨¦is ser felices durante todo el viaje, pues mejor que mejor.

Por lo dem¨¢s, producto impecable. Que estos ¨²ltimos p¨¢rrafos no empa?en la gran labor realizada. Ori and The Blind Forest es ya, por m¨¦ritos propios, uno de los mejores juegos de Switch. Una estrella que luce con especial intensidad entre las muchas que ya iluminan el nutrido cat¨¢logo de la consola de Nintendo.
Conclusi¨®n
Ori and the Blind Forest, una de las joyas de la corona de Microsoft Studios, ilumina los circuitos de Switch con todas sus virtudes, ya no intactas, sino mejoradas. En lo t¨¦cnico, y gracias a la experiencia acumulada de Moon Studio, Ori da en la consola de Nintendo incluso m¨¢s que en su casa original. La mayor fluidez en las animaciones y los 60 fps se unen a la resoluci¨®n m¨¢xima de la que es capaz Switch tanto en sobremesa como en port¨¢til. Es un juego incre¨ªblemente bello en lo formal que tambi¨¦n es exigente con el jugador. Metroidvania plataformero de maravilloso envoltorio, har¨¢ que volvamos con gusto sobre nuestros pasos a esas zonas inaccesibles en la primera vuelta que podremos sortear seg¨²n vayamos adquiriendo habilidades. En momentos de excesiva dificultad es donde m¨¢s sufre. Y no porque el juego falle en sus intenciones y ejecuci¨®n, sino porque se topa con unos Joy-Con que no est¨¢n del todo a la altura. M¨¢s all¨¢ de eso, Ori es un juego que se disfruta a muchos niveles, incluyendo el emocional. Es de esas historias, de esos viajes y aventuras, que no olvidar¨¢s jam¨¢s. Imprescindible.
Lo mejor
- Alt¨ªsimos niveles de belleza visual y musical. Tambi¨¦n en su historia
- Lleva al m¨¢ximo la resoluci¨®n de Switch en TV y port¨¢til
- Mejores animaciones y framerate que el original
- Metroidvania plataformero exigente por momentos
Lo peor
- ¡ Momentos que hacen sufrir demasiado al Joy-Con izquierdo
- Que con Ori termine el trasvase a Switch de exclusivos de Microsoft
Excelente
Un t¨ªtulo referente en su g¨¦nero, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutar¨¢s de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en cl¨¢sico con el paso de los a?os. C¨®mpralo sin pesta?ear.