Call of Duty Modern Warfare, impresiones del multijugador: ?Vuelve el rey?

Solo los padres del shooter que redefini¨® el g¨¦nero pod¨ªan volver a demostrar que la f¨®rmula Call of Duty est¨¢ m¨¢s viva que nunca. Tras una larga generaci¨®n llena de experimentos alejados del famoso boots on the ground, Infinity Ward demuestra a las puertas de las nuevas consolas que es posible construir una experiencia contundente, fresca y que, a su vez, sea tremendamente familiar. Modern Warfare ya ha pasado por nuestras manos durante una demostraci¨®n que le ha permitido mostrar su extensa carta de presentaci¨®n.

Permitidnos un breve spoiler: es tremendo. Este soft reboot, como le gusta denominarlo al estudio, plantea el mayor salto en t¨¦rminos visuales y jugables desde el camino que inici¨® Call of Duty: Ghosts. Un Modern Warfare que surge como una catarsis interna; la gran mayor¨ªa de responsables del original se han encontrado presentes aqu¨ª, trabajando una vez m¨¢s por devolver la relevancia de su marca dentro de la rotaci¨®n de la saga. Las ganas por ganarse al tendido son indudables desde el primer minuto.

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¡°Gameplay is king¡±

El inicio de la presentaci¨®n entre los profesionales fue conciso, tal como reza en el ladillo que da pie a este p¨¢rrafo. La jugabilidad lo es todo en un shooter que vive del multijugador competitivo, y para ello ha de ser s¨®lido, divertido de jugar a la par de retante. Para ellos, profundizar en la f¨®rmula sin alterar su concepto original ha sido una de las m¨¢ximas que han seguido en este desarrollo. Quieren que Modern Warfare acepte todos los estilos de juego, que sea familiar con el ecosistema anterior y que necesite de cierto aprendizaje para exprimir las nuevas mec¨¢nicas.

?Quieres jugar como apoyo? Dale. ?Quieres ser ¨²nicamente ofensivo? Tambi¨¦n puedes. La divisi¨®n de roles no act¨²a de la forma en la que lo har¨ªa un hero shooter, todo lo contrario: dentro de la simplicidad de las herramientas puedes encontrar tu propio reflejo, sin estad¨ªsticas alteradas, ni habilidades ni nada que se entrometa entre t¨² y las posibilidades del soldado. Acci¨®n cl¨¢sica como solo ellos saben hacer.

Confiesan que han remodelado el sistema de disparo para asemejarlo a la vida real. Desde el primer minuto ten¨ªan claro que quer¨ªan crear un videojuego coherente con la realidad. No somos un superh¨¦roe, sino un soldado en el campo de batalla que trata de sobrevivir. Tanto la manera en la que se comporta el arma como los efectos visuales y sonoros est¨¢n sensiblemente retocados para la ocasi¨®n. Se siente un gunplay contundente, de precisi¨®n y habilidad, de los mejores que recordamos desde hace bastante tiempo dentro de la franquicia.

En todo momento se le pone especial ¨¦nfasis en el concepto del tiroteo como una situaci¨®n de complejidad que puede variar seg¨²n el comportamiento del jugador con el entorno. Algo que nos gust¨® especialmente fue el momento en el que trataron el dise?o de niveles. Infinity Ward reconoce que a?oran los tiempos de Modern Warfare 2, cuando los jugadores intentaban ¡®romper¡¯ los mapas para llegar a lugares que les proporcionaban ventaja, como la gr¨²a en Highrise. Ellos lo denominan ¡°puzle exploration¡±, y lo cierto es que durante la sesi¨®n pudimos dar buena cuenta de ello. La caja de un aire acondicionado puede ser la superficie perfecta para poder saltar un muro imposible y caer sobre un flanco del respawn enemigo. Ese tipo de artima?as que solo los jugadores pueden descubrir era clave en el antiguo ADN CoD; ahora lo es en el renovado ADN IW.

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De esa complejidad nacen nuevas caracter¨ªsticas que permiten exprimir el entorno de manera mucho m¨¢s org¨¢nica. Es el caso de las puertas, cuya funci¨®n ha dejado de ser un mero tr¨¢mite entre estancias. Ahora, podemos jugar con ellas para tomar ventaja frente al rival, ya sea abri¨¦ndola levemente para colar una granada cegadora y posteriormente arrasar lo que haya dentro, o destrozarla con un dispositivo explosivo para que no haya barreras posibles. Lo cierto es que durante nuestro paso, no nos qued¨® muy claro c¨®mo gozar de estas posibilidades. La mayor¨ªa de jugadores pasaban corriendo y las abr¨ªan de un portazo, apenas hab¨ªa chicha con la que experimentar.

Otro de los cambios es la posibilidad de parapetarnos en una superficie a nuestra altura, ya sea en horizontal como en vertical; las esquinas tambi¨¦n cuentan. Cuando hablamos de ¡®montar¡¯ muchos pensar¨¢n que se requiere un b¨ªpode para ello. Nada m¨¢s lejos de la realidad, puede realizarse en cualquier momento siempre que el juego nos lo indique en pantalla. Cuando estemos en esta posici¨®n, el retroceso ser¨¢ m¨ªnimo, a costa de perder velocidad de apuntado y movimiento en caso de que suframos un ataque. Muy ¨²til en modos como dominio.

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Hablando de movimiento, encontramos peque?os cambios en la manera en la que podemos correr. La versi¨®n b¨¢sica, la t¨ªpica que utilizamos apretando ¨²nicamente el stick, se desplaza a menor velocidad, como si el peso del cuerpo incidiera ahora en la manera en la que nos desenvolvemos. Lo curioso sucede cuando apretamos dos veces el mismo bot¨®n, lo que activar¨¢ un 'super sprint' que si bien viene perfecto cuando necesitamos llegar cuanto antes, tambi¨¦n nos deja un poco vendidos al llevar el arma solo con una mano. La recarga de esta ¨²ltima es mayor de lo habitual.

Algo similar a la exploraci¨®n han sufrido las rachas de bajas. El equipo quer¨ªa recuperar la sensaci¨®n de riesgo que ten¨ªan los MW originales, el estar a una baja de tu misil predator o AC-130. Vuelve un sistema cl¨¢sico, sin grandes chifladuras, en el que a partir de ocho bajas comienza el rock and roll de helic¨®pteros tripulados, aviones de bombardeo hasta terminar en el m¨ªtico Juggernaut, en 15 bajas. Por poner un ¡®pero¡¯, por lo que pudimos probar es demasiado f¨¢cil conseguir rachas potentes a trav¨¦s del paquete sorpresa, ubicado en la cuarta eliminaci¨®n. Convendr¨ªa reducir la estad¨ªstica para que el combate sea m¨¢s ajustado.

¡°Going Dark¡±

Uno de los sellos inconfundibles de esta nueva interpretaci¨®n de Modern Warfare es la relevancia que se le ha dado al combate nocturno. Desde el primer minuto tus gafas de visi¨®n nocturna son el mejor compa?ero posible ah¨ª fuera. Dentro del multijugador no podr¨ªa ser menos, teniendo incluso su propia rotaci¨®n dentro de los modos de juego. Todos los mapas tendr¨¢n su propia versi¨®n nocturna, lo que cambia por completo el modo en el que jugamos.

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La noche es, literalmente, noche. Nos encontramos un entorno que nos era reconocido por haber jugado de d¨ªa, pero la manera en la que nos mov¨ªamos con cautela cambiaba el enfoque. Sin la visi¨®n nocturna es casi imposible combatir en entornos cerrados, de la misma manera ocurre cuando apuntamos. Por defecto, todas las armas incluir¨¢n un puntero l¨¢ser que se activa al mantener pulsado el gatillo. Esto, claro, es visible para todos los jugadores de la partida, por lo que existe una especie de tira y afloja por ver qui¨¦n es el primero en revelar su posici¨®n.

Jugar partidas nocturnas en extremo es una de las mejores experiencias que pueden tenerse en un shooter en los ¨²ltimos a?os. La inmersi¨®n que logra sin interfaz es total, parece cualquier v¨ªdeo que puedes encontrar en internet sobre actuaciones reales bajo las mismas circunstancias. Ha sido todo un acierto darle tanta relevancia a esta parte del combate, sobre todo en vistas de aportar variedad al cabo de las horas.

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Algo que merece la pena rese?ar es la manera en la que el calibre del armamento incide sobre las superficies. Ahora, las armas variar¨¢n la efectividad de su penetraci¨®n dependiendo del rango de poder que obtengan. Por ejemplo, un rifle de francotirador matar¨¢ al instante si atraviesa una placa de metal, mientras que una pistola que monte balas de 9mm no har¨¢ absolutamente nada. Este tipo de perfiles tendr¨¢n su repercusi¨®n a la hora de personalizarlas, puesto que algunas de ellas abren la posibilidad de cambiar su calibre a costa de sufrir algunas penalizaciones.

El gran cambio real de Modern Warfare viene de la mano de la total eliminaci¨®n del minimapa en los modos 6vs6 cl¨¢sicos. Solo podremos tenerlo durante unos segundos si desbloqueamos la racha de bajas a la tercera eliminaci¨®n, o al pedir un UAV en la cuarta. La navegabilidad por el mapa se transforma en una exploraci¨®n basada en las se?as visuales, en cada sonido emitido a nuestro alrededor. Tambi¨¦n repercute en la relevancia de la boquilla tradicional frente al silenciador, transformado su rol a uno m¨¢s fiel a su concepto: emitir el menor ruido posible.

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Junto al clasicismo del combate cercano, existe otra vertiente que extiende el combate a dos equipos de diez jugadores por bando. Estos modos de juego ¡®grandes¡¯ cuentan con sus propios mapas, m¨¢s amplios de lo normal, que cuentan con caracter¨ªsticas especiales, como el uso de veh¨ªculos de desplazamiento (Quads) o la posibilidad de pedir un tanque controlado por el jugador. Pese a que cuesta pillarle el punto a estar atento a otras v¨ªas diferentes de acci¨®n, lo cierto es que es una manera fant¨¢stica de oxigenar el contenido b¨¢sico. Funciona de lujo, sigue sinti¨¦ndose Call of Duty a pesar de las variaciones.

Modern Warfare como punto de encuentro global

Infinity Ward nunca ha escondido sus preferencias sobre el futuro del multijugador entre plataformas. Haber logrado introducir crossplay total entre Xbox One, PS4 y PC ha sido un esfuerzo que ha llevado a?os, negociaciones duras y alguna que otra cana de m¨¢s. Hoy se vuelven a reafirmar en su compromiso por unificar a todos los jugadores, y s¨ª, ese juego cruzado tambi¨¦n significa que jugadores de Xbox One y PS4 podr¨¢n jugar entre ellos sin absurdas limitaciones de otra ¨¦poca.

Por lo que pudimos saber a trav¨¦s de Paul Halle, PC product manager, los jugadores tendr¨¢n una lista de amigos integrada en el men¨² multijugador que permitir¨¢ invitar sin necesidad de utilizar el sistema interno de cada plataforma. Pese a que no entr¨® en detalles, nosotros pudimos ver algo relacionado con una cuenta Activision; quiz¨¢ ese sea el nexo que haga posible que todos puedan jugar, mismo m¨¦todo que utilizan compa?¨ªas como Epic Games.

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Esta unificaci¨®n tambi¨¦n se traslada a otros aspectos del juego, incluida la progresi¨®n. El equipo ha querido que todo el progreso que hagamos est¨¦ unificado en un mismo valor; en un mismo operador. Ya sea la campa?a, el multijugador o las operaciones especiales, todo lo que hagamos tendr¨¢ efecto en la oferta completa de Modern Warfare. Desde el primer momento no quieren hacer perder el tiempo a sus jugadores, es decir, jugando a la campa?a no vas a sentir que est¨¢s perdiendo tiempo que podr¨ªas invertir en el multijugador porque vas a recibir recompensas que llevar¨¢s a ese modo, y viceversa.

Recompensas que se trasladan a la armer¨ªa, el lugar donde dar lugar a todo tipo de creaciones armament¨ªsticas. El equipo ha querido que el arma sea un personaje m¨¢s, que tenga su propia voz. Para ello, gozaremos de la mayor gama de accesorios jam¨¢s vista hasta la fecha en Call of Duty. Cargadores, boquillas, culatas, gatillos¡­ las posibilidades son amplias. Tenemos la sensaci¨®n de que en esta entrega se penaliza en mayor grado respecto a sus antecesores, por lo que hay que buscar el equilibrio entre ganancia y p¨¦rdida dentro de los cinco accesorios m¨¢ximos que podemos acoplar a la vez, incluido el perk espec¨ªfico.

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?Vuelve el Rey?

Es dif¨ªcil trasladar en un texto o v¨ªdeo las sensaciones que se sienten al jugarlo. Por m¨¢s que pueda parecer lo mismo de siempre, lo cierto es que el salto es mucho mayor que en anteriores entregas. Como dec¨ªamos al principio del texto, estamos encantados con lo que hemos probado; queremos seguir experimentando, queremos seguir gozando del que apunta a ser un terreno competitivo a tener en cuenta en los puestos m¨¢s altos.

Y es que dentro del g¨¦nero estamos viviendo una ¨¦poca espectacular. Infinity Ward se reafirma, de esta manera, en su vuelta por la puerta grande. Por vuestra parte, podr¨¦is probar un anticipo de lo que viene a trav¨¦s de su beta p¨²blica el pr¨®ximo 12 de septiembre, primero en PS4.