Nintendo reparar¨¢ gratis los Joy-Con estropeados, seg¨²n VICE
La compa?¨ªa empieza a tomarse en serio el llamado Joy-Con Drift, un defecto en los mandos que hace que los sticks act¨²en solos sin que nadie los pulse.
Nos llegan buenas noticias desde el portal VICE, donde, siguiendo con la cobertura sobre los errores de los Joy-Con de Nintendo Switch, se hacen eco de un mensaje interno que habr¨ªa pasado la compa?¨ªa a todos los trabajadores de su servicio t¨¦cnico. En ¨¦l, Nintendo pide a sus representantes que no cobren m¨¢s reparaciones y que devuelvan el dinero a aquellos que ya pagaron. Adem¨¢s, el memo a?ade que de ahora en adelante "no es necesario comprobar la garant¨ªa" con aquellos usuarios que soliciten la reparaci¨®n de sus mandos.
Los primeros afectados que hab¨ªan demandado este servicio hablan de que, hasta el momento, el servicio de atenci¨®n al cliente Nintendo presentaba largos tiempos de espera de hasta 20 minutos, no aceptaba reparar los Joy-Con si no probabas otros en la misma consola, y de que, si finalmente se te ofrec¨ªa la reparaci¨®n, ¨¦sta ten¨ªa un coste cercano a los 40 dol¨¢res.
El Joy-Con Drift, el fallo de Nintendo Switch
El problema de los Joy-Con recibe el nombre de Joy-Con Drift y consiste en que los sticks anal¨®gicos de los mandos empiezan a mover a los personajes sin que nadie los pulse o presione, tal y como sucede en el gif sobre estas l¨ªneas. En las ¨²ltimas horas Kotaku ha publicado m¨²ltiples art¨ªculos en los que recoge un creciente n¨²mero de casos con el mismo problema, y muchos de sus afectados ya han demandado a Nintendo por este asunto. Con motivo de ello la compa?¨ªa ha lanzado un escueto comunicado al respecto que no ha convencido a los usuarios y en el que se puede leer lo siguiente: ¡°Conocemos los informes que dicen que algunos mandos Joy-Con no responden correctamente. Queremos que los clientes se diviertan con Nintendo Switch, pero si algo falla, siempre los animamos a utilizar la p¨¢gina de soporte¡±.
De momento solo queda permanecer a la espera para comprobar si este mensaje interno empieza a ser efectivo y para ver si, como es de esperar, se aplica tambi¨¦n en Europa para todos los afectados del viejo continente.