Regresando a Moss: as¨ª es El jard¨ªn del Crep¨²sculo, su nueva expansi¨®n gratis

Antes, mucho antes de Blood & Truth, y antes, mucho antes de Astro Bot: Rescue Mission, la realidad virtual subsist¨ªa a base de lanzamientos muy dilatados en el tiempo y muy dispares en contenido y calidad. En esa ¨¦poca convulsa apareci¨® un juego del que pocos hab¨ªamos o¨ªdo hablar y menos a¨²n sab¨ªamos qu¨¦ esperar. Un curioso plataformas llamado Moss que combinaba la acci¨®n y los puzles con maestr¨ªa y cuyo apartado art¨ªstico no hizo sino deslumbrar a cuantos lo probaron. Un juego desarrollado por un peque?¨ªsimo grupo conformado por apenas 15 personas que, a pesar de ello, se convirti¨® en uno de los sleepers de 2018 y en uno de los mejores juegos de PlayStation VR.

Esta semana, tras m¨¢s de un a?o como exclusiva de PlayStation 4, el juego ha dado el salto a PC y Steam, haci¨¦ndose compatible con Oculus Rift/S, HTC Vive y Windows MR. Pero lejos de conformarse con ampliar horizontes, sistemas y plataformas, el juego y sus creadores, los miembros de Polyarc, han lanzado una expansi¨®n completamente gratis para el mismo. Un DLC que a?ade un nuevo nivel, un par de horas de contenido y suculentas novedades jugables que en MeriStation ya hemos podido probar y disfrutar en profundidad. Con motivo de ellas escribimos las siguientes l¨ªneas, para descubrir sus secretos y recordar todas las razones por las que Moss sigue siendo un imprescindible dentro del cat¨¢logo de realidad virtual.

?Qu¨¦ trae la expansi¨®n de Moss?

La expansi¨®n, que, repetimos, es completamente gratis, incluye un nuevo nivel llamado El Jard¨ªn del Crep¨²sculo y a?ade aproximadamente entre una y una hora y media m¨¢s de contenido al juego. Moss no era especialmente largo (en su an¨¢lisis habl¨¢bamos de una duraci¨®n entre las dos y las cuatro horas dependiendo de nuestro esp¨ªritu ¡°completista¡±), as¨ª que siempre se agradece algo m¨¢s de vida y longevidad para el mismo. El nivel incluye nuevas armas, movimientos y habilidades para su protagonista, una ratoncilla joven y valiente llamada Quill. Amplia la historia, presenta a varios personajes in¨¦ditos, nos permite librar un emocionante combate contra un nuevo jefe final y suma 7 nuevos trofeos a la lista original.

Al Jard¨ªn del Crep¨²sculo se accede por tres portales interdimensionales que han aparecido diseminados por distintos niveles de la aventura principal. Si es la primera vez que jugamos a Moss no nos ser¨¢ demasiado dif¨ªcil dar de bruces con ellos mientras avanzamos en la historia. Si, por el contrario, ya nos hemos pasado el t¨ªtulo y no queremos perder demasiado tiempo rejug¨¢ndolo todo, basta con abrir al men¨² de pausa, ir a la selecci¨®n de cap¨ªtulo y elegir aquellos en los que ahora, junto a los iconos del polvo de reliquia y los fragmentos olvidados (los dos coleccionables), hay un nuevo s¨ªmbolo verde. En concreto, son estas las fases y secciones donde est¨¢n:

Uno de los juegos m¨¢s bonitos en VR

Sobra decir que, de nuevo, estamos ante uno de los juegos m¨¢s bonitos de la biblioteca de nombres de realidad virtual. Ante una preciosa f¨¢bula donde Quill se bate con cangrejos mec¨¢nicos, habla con sapos parlantes, descubre a los llamados campeones de las hadas, pisa plataformas espectrales y atraviesa niveles en los que hay toda clase de efectos y juegos de luces. Zonas donde llueven p¨¦talos rojos, en las que podemos ver nuestro reflejo en el agua (muy parecido al Sin Cara de El Viaje de Chihiro) y donde nos vemos rodeados de criaturas a medio camino entre los kologs y las llaves voladoras de Harry Potter y la Piedra Filosofal.

La expansi¨®n estrena paleta de colores y criaturas, pero resulta tan inspirada, delicada y cuidada como la aventura principal. Polyarc presta mucha atenci¨®n a d¨®nde se posiciona la c¨¢mara, los juegos de luces y las animaciones de Quill. De hecho, ¨¦sta parece haber aprendido de los robots de Astro Bot: Rescue Mission, porque incorpora nuevas animaciones parecidas a aquellos. No solo movimientos de combate (con motivo de la nueva espada que recibe), sino tambi¨¦n animaciones? para relacionarse e interactuar con el jugador, como celebraciones, bailes y choques de manos.

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A¨²n m¨¢s recursos jugables

Entre las mayores virtudes y cualidades de Moss siempre estuvo que, al contrario que otros t¨ªtulos de realidad virtual donde la ambientaci¨®n y la inmersi¨®n priman sobre lo jugable, en Moss ambas cosas se mezclan y entrelazan de forma m¨¢s que solvente. Si nos quitamos las gafas y despoj¨¢ramos al t¨ªtulo de toda realidad virtual, seguir¨ªa siendo una propuesta interesante y atractiva. Y eso que el t¨ªtulo apenas usa tres botones y el stick del mando, y que sus mec¨¢nicas consisten en algo tan sencillo como que Quill entra por una puerta situada en uno de los lados de la pantalla y ha de salir por el lado contrario a base de saltos, combates y rompecabezas.

La expansi¨®n vuelve a demostrar el ingenio del estudio, que a?ade nuevas propuestas jugables. En primer lugar, tras superar las primeras pruebas del DLC se premiar¨¢ a Quill con una nueva armadura, espada y set de movimientos. Todos ellos podemos usarlos despu¨¦s en las fases que no son de la expansi¨®n y le permiten lanzarse en ataques direccionales, esquivar, y a?adir a¨²n m¨¢s riqueza al combate.

En segundo lugar, ahora contaremos con un nuevo objeto que permite crear plataformas espectrales que solo aparecen cuando nos acercamos a ellas y que plantean nuevos puzles y fases de plataformas a¨²n m¨¢s interesantes. Por ejemplo tendremos que saltar al vac¨ªo en determinadas ocasiones, tratando de adivinar d¨®nde est¨¢n esas plataformas y rezando proque se materialicen bajo nuestras patitas.

Adem¨¢s de las plataformas tambi¨¦n contaremos con un nuevo m¨¦todo de ataque a distancia que exige que interactuemos con Quill. Pulsando cierta combinaci¨®n de botones la ratoncilla alza su espada y se queda quieta, y si la tocamos con el mando, cargaremos su espada de energ¨ªa y le daremos la opci¨®n de soltarla en la direcci¨®n que desee. El combate final de la expansi¨®n, en el que deberemos movernos constantemente y atacar de cerca y a distancia, muestra que Polyarc a¨²n es capaz de profundizar mucho m¨¢s en la propuesta de Moss. Una aut¨¦ntica delicia de batalla.

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?Para cuando el Tomo 2?

A pesar de ser gratis y tan entretenido y disfrutable como el juego original, la expansi¨®n es igual de ef¨ªmera que aquel y nos es imposible no recordar que cuanto narraba en su historia se conoc¨ªa como el Tomo 1 de las aventuras de Moss, el mundo en el que se ambienta todo. O lo que es lo mismo, nos hace desear un Tomo 2 algo m¨¢s longevo, que siga materializando el talento del estudio y ampl¨ªe y profundice en su propuesta, que ha dado buenas muestras de lo variada y profunda que es. ?Se centrar¨¢ la desarrolladora en una secuela ahora que ha terminado su objetivo actual (sacar el juego en otros sistemas)? Crucemos los dedos.

Por ¨²ltimo, rescatar un detalle importante de las ¨²ltimas actualizaciones del juego. El hecho de que se ha traducido al castellano. Un motivo m¨¢s para rejugarlo y sumergirnos en su historia, que si bien sencilla, se cuenta de una manera la mar de original, a trav¨¦s de un libro, dibujos, voces en off y secuencias en las que hasta nosotros mismos podemos intervenir.

Desde luego, son muchas las razones que El Jard¨ªn del Crep¨²sculo aporta para regresar a Moss, un aut¨¦ntico imprescindible de la realidad virtual.

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