La Banda de Dutch Van der Linde en Red Dead Redemption 2

Los tiempos han cambiado. La revoluci¨®n ha llegado a esta parte de la frontera. Lo que antes eran herraduras y espuelas, ahora son ra¨ªles y carb¨®n. Los cielos de los valles, colinas y prados; antes te?idos por azules, amarillos, naranjas y violetas; ahora se impregnan del humo que sueltan m¨¢quinas. Los avances que la civilizaci¨®n ha ido descubriendo a lo largo de estos a?os convierte los sue?os que ten¨ªamos en realidad; y con ella, los sue?os desaparecen. Los h¨¦roes y villanos del pasado se olvidan, se siguen emborrachando, envejecen, mueren,... Y el sol sigue poni¨¦ndose, incorrupto como todos los d¨ªas, sobre esta dorada tierra compuesta de prosperidad, esperanza y grandes historias que contar a nuestros hijos.

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Sin embargo, siempre existe cierta tendencia en el ser humano de tratar de persistir m¨¢s all¨¢ de sus tiempos. Que sus valores, sus creencias, y las cosas por las que ha luchado, perduren en el eco de la humanidad y no se desvanezcan en la velocidad del mundo moderno, del que pronto seremos testigos. Hoy, y porque la situaci¨®n lo merece, vamos a hacer un alto en el camino y vamos a contar una historia. Las estrellas y el fuego en medio del viaje siempre han sido buenos amigos de las historias; y si bien en esta historia tambi¨¦n hay miles de estrellas y fuego, va m¨¢s all¨¢ de todo aquello que se pueda imaginar. Es una historia de coraz¨®n, honor, maldad y una innegable elegancia. Una historia escrita con barro y sangre que mantiene su eco en las tormentas que oscurecen las praderas de estas maravillosas tierras. Esa es la historia de la Banda de Dutch.

Dutch Van der Linde y los or¨ªgenes de su banda

Conocidos y temidos hasta el hueco m¨¢s rec¨®ndito de West Elizabeth y las periferias del Estado, la banda de Dutch es, sino la mayor, una de las m¨¢s importantes y amenazantes bandas de todo el Oeste. Un grupo de forajidos bien organizados liderados por una mente cuyo ingenio y carisma s¨®lo es equiparable a su ferocidad: El se?or Dutch Van der Linde. Seg¨²n la descripci¨®n que el sheriff de ¡°Estrella Rocosa¡± ha puesto en su cartel de ¡°Se Busca¡±: ¡° Dutch es el l¨ªder de una considerable banda de forajidos y parias. Es un hombre instruido, idealista, an¨¢rquico y carism¨¢tico, con mucho vivido a sus espaldas, que quiz¨¢s comienza a notar las presiones del asfixiante mundo moderno¡±. Por lo le¨ªdo, Dutch podr¨ªa considerarse un rom¨¢ntico de esta ¨¦poca, y en cierta medida lo es, o al menos lo fue.

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Comenz¨® su camino como maleante con asaltos, robos, asesinatos, y todo ese tipo de fechor¨ªas; pero poco a poco, fue adquiriendo la experiencia y habilidad necesarias para organizar una banda con unos motivos por los que luchar. Altruista y con el ideal de un ut¨®pico que cree que puede cambiar el mundo; Dutch era conocido por repartir su bot¨ªn con los m¨¢s desfavorecidos. Un Robin Hood de prominente bigote y elegante porte que se lleva tomando la justicia por su parte hasta el d¨ªa de hoy. Cierto es que todo esto no lo ha conseguido s¨®lo. Dutch no se rodea de cualquiera. Selecciona con sumo cuidado los compa?eros que formar¨¢n parte de su variopinto grupo. Pero no adelantemos acontecimientos, a¨²n est¨¢ viva la hoguera. A d¨ªa de hoy, se sabe que Dutch y los suyos han hu¨ªdo en un intento de robo al mism¨ªsimo banco de Blackwater, ni m¨¢s ni menos. Esta vez, algo sali¨® mal en los planes de Dutch y su banda de piratas y al parecer, ahora una jaur¨ªa de federales y cazarrecompensas van a por sus cabezas. El se?or Van der Linde siempre ha luchado con sentimiento por sus ideales, pero los acontecimientos venideros quiz¨¢ sean motivo suficiente como para creer que puede haber llegado demasiado lejos. Si no se adapta pronto al cambio inexorable del mundo, ¨¦ste acabar¨¢ engull¨¦ndole, y entonces ya ser¨¢ demasiado tarde para ¨¦l. Pero bueno, tampoco podemos predecir el futuro¡­ ?O tal vez s¨ª?

Como hemos dicho al comienzo de esta historia; la banda de Dutch Van der Linde no s¨®lo es Dutch Van der Linde. Est¨¢ compuesta por un selecto y competente grupo de personas que han decidido luchar por esta causa unidos. Forajidos, pistoleras, nativos, cortesanas, carniceros y otros cuantos balas perdidas de este y el otro lado de la frontera conforman el denso de la banda de Dutch; y muchos de ellos merecen ser nombrados por sus innumerables gestas y tropel¨ªas. As¨ª que continuemos la historia hablando de los dem¨¢s jinetes de este apocalipsis.

Los odiosos 10 de Dutch

Una de las personas que m¨¢s llaman la atenci¨®n es uno de sus hombres de mayor confianza, Arthur Morgan. Es el m¨²sculo de la banda, un tipo muy duro que obtiene lo que quiere cuando quiere, por las buenas, o por las malas. El se?or Morgan tiene m¨¦ritos propios para ser el hombre de confianza de Dutch. Atraco a mano armada, robo de trenes, ganader¨ªa, asesinatos¡­ El historial de Arthur muestra una uni¨®n muy fortificada con el grupo. Un hombre con apariencia de diablo que guarda toda su bondad y equidad para lo que para ¨¦l, es su familia; la banda. Aunque su tosco aspecto pueda llevar a pensar lo contrario, muchas veces Dutch es la cabeza conciliadora y negociadora. Su templanza, as¨ª como su temperamento y portento f¨ªsico, son motivos m¨¢s que suficientes para convertir a este vaquero en un poderoso aliado. Adem¨¢s, Morgan forma parte de la banda de Dutch desde sus inicios. Cuando era m¨¢s joven, se dice que Arthur acab¨® bajo la tutela de Van der Linde, y desde entonces, han sido inseparables compa?eros de fatigas. Sin embargo, todo esto no le afecta a Arthur a la hora de mostrar su desacuerdo, y es que tiene su propio sentido del honor as¨ª como su modo de hacer las cosas. Seg¨²n lo entendido por estas colinas, parece que el se?or Morgan dar¨¢ que hablar en los d¨ªas venideros, ya ver¨¢¡­

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Otra persona que est¨¢ muy asociada tal y como dicen por ah¨ª con Arthur Morgan es la temida Sadie Adler. Muchos pobres diablos la tachar¨¢n de d¨¦bil, pero probablemente al decir eso, esos pobres diablos se encontrar¨ªan de bruces con los ca?ones de sus dos rev¨®lveres. Y es que Sadie Adler es una de las personas mas peligrosas de la banda de Dutch. De cabello dorado como un campo de trigo que brilla por el Sol y con la furia de mil valquirias; son muchos los cr¨ªmenes que lleva a sus espaldas. Parte de su impetuosa naturaleza puede que se deba a que qued¨® viuda por un grupo de asesinos, que acabaron con la vida de su marido. Su duro pasado le ha hecho m¨¢s resistente y dura que el Ca?¨®n del Colorado. Implacable a la hora de hacer las cosas, Sadie no conoce el miedo a nada ni a nadie y busca obtener su venganza de aquellos que mataron a su esposo. Una mujer con una muy interesante historia que contar que es leal a los suyos, de una u otra forma. Sin embargo no es oro todo lo que reluce dentro de la banda de Dutch. Y si bien existen integrantes que cuentan con unos interesantes valores que, en esencia, pueden ser buenos; Bill Williamson no es uno de esos casos.

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De car¨¢cter ego¨ªsta, ambicioso y despiadado por naturaleza, Bill Williamson parece ser como el caballo de Atila. Su inconsciencia as¨ª como sus ansias de poder han convertido su nombre en una aut¨¦ntica pesadilla. Su rastro deja atr¨¢s un reguero de asesinatos, saqueos, violaciones e incendios bajo un manto de cobard¨ªa e inmoralidad. Bill es un hombre muy impetuoso e inestable que no se pensar¨¢ dos veces apretar el gatillo. Una ca¨®tica personalidad que fue el motivo de su expulsi¨®n del ej¨¦rcito sin honores cuando era joven. Tras no aguantar la jerarqu¨ªa marcial, m¨¢s tarde conocer¨ªa a Dutch y se unir¨ªa a su causa, acatando sus ¨®rdenes de manera sorprendentemente firmes. A d¨ªa de hoy sigue galopando en compa?¨ªa de Dutch, pero Williamsom no tardar¨¢ mucho en hacer uso de su volatilidad para rivalizar con los integrantes de su banda. Pronto comenzar¨¢ a desbandarse y si sigue por ese camino, seguro que acaba muerto a tiros en alg¨²n lugar de M¨¦xico. Bill es como una bomba que no sabes cu¨¢ndo va a explotar, y explota ese beneficio a su favor para hacer lo que mejor se le da: Matar.

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Charles Smith es otro integrante de la banda. Es uno de los ¨²ltimos en llegar a las filas de Dutch, pero eso no le hace menos competente que el resto. Smith es un nativo americano que se ha hecho un nombre dentro del mundo de los forajidos. Su sabidur¨ªa, as¨ª como su conocimiento de la fauna y flora aut¨®ctona, convierten a Charles en una persona cultivada y tranquila en la mayor¨ªa de ocasiones. Sin embargo, es un aut¨¦ntico portento f¨ªsico y, seg¨²n dicen, es pr¨¢cticamente invencible en una pelea justa a pu?os. Un hombre decente y honesto a la par que mortal cuando se lo propone.

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Micah Bell tambi¨¦n es conocido como un notorio pistolero de la banda de Dutch. Salvaje e impredecible, se granje¨® la fama como cazarrecompensas, asesino a sueldo y delincuente profesional hace un tiempo. Gasta un prominente bigote, un abrigo de cuero negro y dos pistolas a cada lado de la cintura. Poco se conoce de Bell, s¨®lo que es habilidoso con las pistolas y que hace llamar al grupo ¡°Los hijos de Dutch¡±, mostr¨¢ndose unido a la banda como si de una familia se tratara, y equiparando la autoritaria figura de Dutch a la de un salvador santo.

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Si existe un segundo de abordo casi igual de importante que Dutch, claramente ¨¦ste ser¨ªa Hosea Matthews. Seg¨²n cuentan las malas lenguas, Hosea lleva siendo el mejor amigo de Dutch desde que ambos eran j¨®venes, cuando les daba por robarse el uno al otro. 20 a?os juntos desde entonces ha sido tiempo m¨¢s que suficiente para que Dutch considere a Hosea como un hermano, as¨ª como uno de los aliados m¨¢s valiosos de su extenso grupo. El se?or Matthews probablemente sea una de las personas m¨¢s mayores de la banda de Dutch, pero que no os enga?e su avanzada edad. Hosea Matthews es un embaucador y un manipulador de primera. Su arma es la palabra y el di¨¢logo, poderosas herramientas que utiliza con suma soltura, ya sea para conseguir lo que se proponga o para salir de una escabrosa situaci¨®n. Un hombre elegante e inteligente con lengua de oro que sabe m¨¢s por viejo que por Diablo.

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Como el rom¨¢ntico empedernido que es, Van der Linde cuenta con su objeto de deseo en esta ecuaci¨®n: La se?ora Molly O¡¯shea. Molly es una fuerte mujer proveniente de Dubl¨ªn. Su sangre caliente irlandesa hace que sea una chica muy nerviosa y eso la incapacita a la hora de hacer seg¨²n qu¨¦ cosa. La situaci¨®n actual que est¨¢ atravesando la banda de Dutch no es bueno para ella. A diferencia de la mayor¨ªa del grupo, Molly no suele inmiscuirse en los aspectos criminales y mantiene una relaci¨®n amorosa con Dutch.

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Otro aliado proveniente de fuera, m¨¢s concretamente en la frontera, al otro lado del extenso R¨ªo San Luis, es el famoso bandolero y cazarrecompensas mexicano Javier Escuella. Nacido en la calurosa regi¨®n de Nuevo Para¨ªso, Escuella es un pasional hombre revolucionario que lucha firmemente por la libertad. Seguramente ese sea el motivo por el que congeni¨® tan bien con Van der Linde y su banda. Unos ideales relacionados por los que luchar hicieron que el se?or Escuella formara parte del equipo, el resto ya lo conocemos. Atracos, asesinatos, robos¡­ El sello de la casa de Dutch. M¨¢s all¨¢ de la sangre derramada y la p¨®lvora gastada, Escuella se muestra leal y comprometido con la banda, m¨¢s por creer en el fin que busca su l¨ªder que por el resto de cosas. La rabia de este ¨¢guila de bigote y rev¨®lver ser¨¢ m¨¢s que suficiente para acabar con cualquier serpiente que Dutch piense que puede acabar con su revoluci¨®n.

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Por otro lado, la banda tambi¨¦n cuenta con Abigail Roberts. Una mujer con todo un mundo a sus espaldas. Una superviviente que ha sabido sobrellevar las adversidades de su tortuosa vida para seguir adelante. Internada desde joven en un orfanato, al salir tuvo que buscarse la vida en todo tipo de cantinas y burdeles. En un momento determinado Dutch la encontr¨®, y se uni¨® a su tropa. Igualmente, tuvo que mantener en repetidas ocasiones su profesi¨®n de meretriz con algunos integrantes de la banda con la esperanza de vivir. Sin embargo y debido a todo esto, Abigail es una mujer fuerte que ha sabido sobrevivir en las circunstancias m¨¢s duras, y cr¨¦anme cuando les digo que sabe utilizar un arma con mucha eficacia. No todo es oscuridad y tormento en la vida de la se?ora Roberts, y es que no hace mucho se convirti¨® en madre, un completo renacer en su vida que le da la posibilidad de ser otra persona e instruir por el buen camino al peque?o Jack, aunque quiz¨¢ el ambiente no sea el m¨¢s indicado. Con esta premisa ya conocemos a la madre de la criatura... ?Pero y el padre? Abigail ha compartido cama con algunos miembros de la banda. Morgan, Escuella o el propio Dutch. Sin embargo no fue con ninguno de ellos con quien concibi¨® al chico, el nombre del padre es John Marston.

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Criado en un orfanato al igual que su compa?era Abigail, John tuvo m¨¢s suerte y fu¨¦ adoptado por Butch y su banda a la edad de 12 a?os. Al igual que Morgan, Marston supo valerse por s¨ª mismo y se adapt¨® a la profesi¨®n de forajido de forma r¨¢pida y eficaz. Su fuerza, su astucia y su valent¨ªa siempre han servido de manera maravillosa al ingenio innato de Van der Linde. Y es que sus aptitudes y talentos no es lo ¨²nico que comparte con Morgan; ambos son los protegidos de Dutch. El crecimiento de los dos dentro del grupo y su educaci¨®n corrieron a cargo de Dutch, y eso hace que les tenga un especial afecto a ambos. Marston siempre ha destacado por su amplio plantel de habilidades y las cicatrices de su cara demuestra que le ha costado sudor y sangre manejarlas. John posee una posici¨®n de respeto en la banda; sin embargo, se dice que tiene ciertas rencillas con Williamsom, que siente un odio infundamentado hacia Marston. La templanza de Johnny Boy mantiene la calma y la paz con los de su equipo, y parece que la llegada de Jack a su vida le ha dado cierta perspectiva mantieniendo una relaci¨®n estable con su madre, la se?ora Roberts. Pese a que por el momento pueda funcionar, la idea de criar a un ni?o en ese entorno es peligrosa cuanto menos y deber¨ªan comenzar a velar m¨¢s por su propio bien y dejar eso, ahora que pueden¡­ Pero bueno, por cualquier cosa, el se?or Marston goza de un especial cari?o entre los vaqueros y vaqueras de esta zona; quiz¨¢ por su pasado, su presente o, quien sabe, su futuro¡­

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En relaci¨®n a la organizaci¨®n y gesti¨®n del grupo, existen varias piezas angulares para que el mecanismo interno de la banda de Dutch funcione a la perfecci¨®n. Y es que como ya hemos comentado antes, hay de todo en el campamento de Van der Linde. Un ecosistema que se retroalimenta con los bienes y males de cada ¨¢tomo que compone este poderoso grupo.

Los otros

La principal responsable del correcto funcionamiento de ese ecosistema es la Se?ora Susan Grimshaw. Susan lleva mucho tiempo manteniendo el orden en el campamento, y esto no es balad¨ª. Como una domadora de leones, Grimshaw debe llevar con mano dura su autor¨ªa en el d¨ªa a d¨ªa de la banda con algunas de las personas m¨¢s peligrosas de este lado del oc¨¦ano. Y es que probablemente sin Susan, la lucha de Dutch se habr¨ªa ido al garete hace mucho tiempo. La se?ora Grimshaw representa la justicia en la rutina de sus compa?eros de aventuras, y es dura y exigente como la que m¨¢s.

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La banda de Van der Linde tambi¨¦n cuenta con la presencia de Pearson, el carnicero y cocinero del equipo. Tras un tiempo sirviendo en la marina, algo de lo que seg¨²n dicen, le encanta hablar, la vida de Pearson di¨® un giro de 360 grados cuando acab¨® convirti¨¦ndose en el chef de la banda de Dutch. Un hombre jovial un poco falto de modales que preparar¨¢ el suculento men¨² del vaquero. Liebre, venado, vacuno, ¡­ Seguro que s¨ª se pone le puede preparar un ?¨² o algo por el estilo.

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El encargado de la gesti¨®n econ¨®mica y las cuentas es el se?or Leopold Strauss. Originario de Austria, el se?or Strauss o, como lo llaman entre ellos, Herr Strauss, es un as con el dinero. Con las cualidades perfectas de un usurero, lleva y gestiona los libros de cuenta, as¨ª como administra las operaciones econ¨®micas y los pr¨¦stamos entre el grupo de Van Der Linde. Su astucia para el dinero y las cuestiones econ¨®micas s¨®lo es equiparable a su seriedad a la hora de hacer cualquier cosa y a su completa falta de emociones, rasgos que le convierten en el mejor en lo suyo.

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Existen otros integrantes del grupo que si bien no tienen un alto rango en la banda de Dutch, suponen una verdadera diferencia a la hora de atacar. Podr¨ªamos hablar del viejo Uncle, un viejo borracho cascarrabias m¨¢s vago que un chicharro que si sigue vivo es por su gran sentido del humor. De Mary-Beth Gaskill, la ladrona con el rostro m¨¢s angelical que se ha visto jam¨¢s. Podr¨ªamos hablar tambi¨¦n de Lenny Summers, el hombre que lleva en b¨²squeda y captura 15 a?os por matar al asesino de su padre¡­ O de Sean Macguire, el forajido irland¨¦s descendiente de una amplia estirpe de maleantes y bandidos¡­ La peligrosa Karen Jones, el estrafalario Josua Trelawny, la servicial Tilly Jackson o el antiguo padre que le salv¨® la vida a Dutch¡­ Un amplio cat¨¢logo de tipos malos con una historia muy interesante que contar. Pero parece que las brasas se est¨¢n apagando, esta charla est¨¢ llegando a su fin, y deber¨ªamos dormir; ma?ana se tercia duro. Sin embargo, y antes de dormirse, ponga en orden toda esa informaci¨®n y piense que mientras usted disfruta del m¨¢s pl¨¢cido de los sue?os, ellos est¨¢n all¨ª, galopando, con la luna y el sol como faros, cien hombres armados a sus espaldas, y el sue?o de la libertad justo enfrente de todos ellos. Forajidos hasta el final.