inFamous, gu¨ªa completa - Misi¨®n 4

Terreno elevado

Moya nos vuelve a dar instrucciones y nuestro primer objetivo es reestablecer la electricidad en una antena. Nos dirigimos al punto azul, f¨¢cil.

Comenzamos a sentirnos mal, con la vista borrosa y nuestra energ¨ªa por los suelos. Lo primero que tenemos que hacer es reponernos con uno de los generadores azules de emergencia. Tambi¨¦n podemos recargarnos con cualquier otra cosa pero la misi¨®n no proseguir¨¢ hasta que lo hagamos con uno de los artefactos marcados en el mapa.

Ahora tenemos que dirigirnos hasta el punto que marca el mapa, que no es otra cosa que una alcantarilla. El camino es m¨¢s bien largo y est¨¢ repleto de enemigos. Especialmente dif¨ªciles son los camiones con torretas. Podemos ir a saco a matar al segador que la controla pero es posible que muramos. Propongo mejor que nos parapetemos desde un punto alto y disparemos a la cabeza. Es m¨¢s dif¨ªcil pero as¨ª nos ahorramos las heridas de bala de la torreta, las cuales, en una r¨¢faga pueden matarnos. Por el camino hay muchos segadores y al menos cuatro o cinco camiones.

Una vez en las alcantarillas, el escenario es similar al de la misi¨®n Rastro de Sangre. Avanzamos con cuidado por las plataformas (si caemos al agua nuestra energ¨ªa disminuir¨¢ vertiginosamente por los calambres) y llegamos a una fuente de alimentaci¨®n. Servimos de conductor y obtenemos la interesant¨ªsima habilidad de lanzar granadas el¨¦ctricas (L1 + ?).

Es hora de probar nuestro nuevo poder. Primero debemos destruir un cami¨®n ruinoso que impide nuestro avance, despu¨¦s nos esperan tres segadores. Luego, acto seguido, llegaremos a una sala en forma de cruz donde los tres extremos enfrente nuestra est¨¢n custodiados por torretas. No parapetamos usando O y lanzamos granadas a los barriles de gas para que exploten nuestros enemigos. En la siguiente habitaci¨®n, donde se encuentra el transformador que tenemos que arreglar, nos aparecen dos kamikazes con muy malas pulgas. Tenemos que matarlos lejos de nosotros o moriremos. Una vez aniquilados, enchufamos con nuestros rayos un poco de energ¨ªa en el transformador. Misi¨®n cumplida.